Un barrio, dos conflictos y un sólo interés: negocios inmobiliarios

Por Victoria Colombo*

El Gobierno de la Ciudad, mediante un convenio con el Gobierno Nacional, tiene como propósito construir edificios de entre 60 y 90 metros de altura para situar emprendimientos administrativos y financieros a partir de la venta de tierras públicas -que actualmente pertenecen a Vialidad Nacional- ubicadas entre las calles Brasil, Caboto, Gualeguay, Arnaldo D´Espósito y la Av. Pedro de Mendoza.

Los vecinos aledaños se opusieron a dicha propuesta desde un primer momento ya que la misma no está pensada en pos del beneficio del barrio, no considera la calidad de vida de los habitantes, los espacios verdes ni su idiosincrasia. Fue por ello que en abril del 2017 decidieron presentar un proyecto alternativo que consiste en declarar “Unidad Ambiental, Deportiva, Cultural y de Gestión Catalinas Sur” y propone que sean los vecinos quienes discutan con el Gobierno el uso que se le dará a los espacios verdes en La Boca.

El próximo jueves, el proyecto que promueve la construcción de torres será tratado en la Legislatura porteña donde el bloque oficialista cuenta con la mayoría sobre las bancas.

Mientras tanto, a unas pocas cuadras, las 30 familias del conventillo ubicado en Av. Don Pedro de Mendoza 1447/1451 afectadas por el incendio ocurrido el 20 de julio, continúan en la calle. Este último martes 5 de septiembre, se dio a conocer que el Poder Judicial de CABA otorgó carácter colectivo a la acción de amparo promovida por varios vecinos contra el Gobierno de la Ciudad y el Instituto de Vivienda de la Ciudad, con el propósito de proteger su derecho a la vivienda y a la salud integral. Lo cierto es que hace más de un mes las familias siguen sin ningún tipo de solución habitacional concreta por parte del Gobierno porteño.

Estas problemáticas y conflictos de intereses no pueden entenderse como casos aislados. En los últimos años ha crecido la especulación inmobiliaria por lo que  -junto con la gran ola de desalojos en conventillos registrada este último año- se deja en evidencia cómo los acontecimientos se enmarcan dentro de un proyecto del Gobierno de la Ciudad que termina desdibujando los rasgos y particularidades que hacen de La Boca un lugar célebre de la ciudad y un barrio profundamente inclusivo desde lo social y cultural.

*Comunera del FPV en la Comuna 4.