Fernando Savore: "En Argentina hay 20 monopolios que son los dueños de todo"

Por Martín Massad y Juan Cruz Guido

AGENCIA PACO URONDO: A su entender, ¿resultan preocupantes los índices de inflación actuales a pesar de que parecerían estar en un proceso de desaceleración? 

Fernando Savore: La verdad que es una situación preocupante. El INDEC marca determinados valores, pero al volcarlo sobre la realidad de nuestros comercios, sabemos que los aumentos de los monopolios se han acrecentado un poco más. Por ejemplo, los lácteos aumentaron un 8% en los últimos 10 días. En el caso del aceite, tiene un 20% de aumento e inclusive con faltantes en góndola. De hecho, la familia argentina habitualmente consume aceite de girasol que es el que no encontramos en los mayoristas proveedores.

Otro caso es el de la yerba mate: en Argentina tenemos una gran variedad de marcas y tamaños, sin embargo, actualmente en los mayoristas hay muy pocas opciones de marcas de este producto. Incluso, muchas han cambiado su empaque de presentación, lo cual provoca que sean tomadas como un nuevo artículo y, por lo tanto, no están en la lista de Precios cuidados, por lo que en consecuencia se paga mucho más caro.

APU: ¿Considera que efectivamente hay menos variantes en los productos y, a su vez, esas variantes pertenecen a pocos monopolios que controlan el mercado de precios?

F. S.: Es exactamente así. En Argentina hay 20 monopolios que son los dueños de todo. Por ejemplo, la empresa que fabrica golosinas es también la dueña de 80% de la mermelada que consumimos. Es decir, que si bien podemos encontrar formatos distintos como envase de vidrio, bajas calorías, envase de plástico, etc., todas provienen de la misma empresa. Entonces, estas empresas son las que ponen el precio y también las que lo suben abismalmente.

Desde nuestro lado, siempre decimos que, si bien acompañamos la Ley de Góndolas, esta siempre estuvo en nuestros comercios porque el consumidor siempre va a encontrar marcas tal vez no muy conocidas, mal llamadas “segundas marcas”, porque en definitiva son empresas argentinas. Entonces, si bien por un lado, faltan productos de empresas monopólicas, por el otro tenemos las empresas argentinas que siguen produciendo y entregando normalmente. Por supuesto que estas empresas argentinas también aumentaron sus precios entre un 10% y 15% en lo que va del año, pero esto es contra un 30 % o 35% de aumento en los precios de los monopolios. Por ejemplo, el pan lactal que consumen los argentinos proviene de una empresa mexicana, la del osito. Ese pan de 600 gramos costaba $200, hace 25 días atrás lo bajaron a $190 pero tiene 550 g y actualmente lo subieron a $210. Mientras, en contracara, tenemos un montón de fábricas de pan lactal que tal vez son pequeñas y localistas, que tiene llegada dentro de la ciudad y no más, pero que producen un pan lactal de 600 gramos a $110.

APU: ¿Qué sucede con la calidad en estas marcas?

F. S.: Los monopolios también se encargaron de desprestigiar a nuestras empresas argentinas, pero el que evalúa la calidad es el consumidor. Esto sucede con el queso cremoso, los fideos, el pan lactal, etc., y se dan cuenta de que nuestra calidad es buena. En nuestros comercios recomendamos los productos y la gente luego evalúa la calidad y precio. Conocemos a nuestros clientes que compran lo que consumen en el día a día y ayudamos a que ese dinero que traen les rinda y puedan comprar todo lo que necesitan.

APU: ¿Existe alguna estrategia para que los comercios de barrio puedan tener “Precios Cuidados”?

F. S.: Es raro decirlo, pero la pandemia, el Gobierno nacional y los medios ayudaron a motivar a la gente para que realice sus compras en los comercios de cercanía a sus hogares. A raíz de esto, diseñamos e implementamos un modelo de trabajo que se llama “Compras pactadas”, en el que pusimos en valor únicamente la tarea del delivery, y explotamos la herramienta de cercanía con nuestros clientes. Confeccionamos una base de datos solicitando a cada cliente la dirección y el teléfono. La gente enviaba su pedido por WhatsApp y se lo acercábamos al domicilio, principalmente a abuelos y personas mayores, y muchos vecinos se han sumado a esta iniciativa. Además, hemos expandido el uso comercial de las redes sociales fomentando nuestras mercaderías. Esto nos permitió encontrar la forma de competir sanamente con el hipermercado. Esto está instalado a nivel país, en 60 mil comercios, cada comercio tiene su Facebook y, a su vez, forma parte de los grupos de Facebook barriales.

APU: ¿Cree que debería contemplarse el programa Precios Cuidados en los almacenes de barrio?

F. S.: Por un lado, tenemos el programa “Precios máximos”, que ya está por terminar. Con este programa tuvimos algunas dificultades, porque el mayorista nos vendía la mercadería al precio que teníamos que venderlo nosotros, es decir, que no conseguíamos el producto con un precio que nos permitiera una rentabilidad mínima. Se implementaron inspecciones a los mayoristas que, como consecuencia, retrotrajeron los precios al 6 de marzo de 2020, y por casi dos meses vivimos una meseta de precios sin aumentos, lo cual nos permitió brindar más ofertas.

Con respecto al programa Precios Cuidados, lo hemos planteado a nivel gobierno, pero la realidad es que son muchos productos y nuestros comercios no tienen la infraestructura necesaria para esas cantidades.  Además, dependemos de los mayoristas y no podemos negociar los precios, como los hipermercados, que lo hacen directamente con los monopolios.  

Hace dos semanas se lanzó el programa “Cerca de tu casa”, que contempla 23 productos, que si bien son pocos, son los que se consumen de forma más masiva en nuestros comercios. Lo importante es que en el programa figuran como productos genéricos, presentan gramaje y precio máximo, pero no la marca. De esta forma tenemos la posibilidad de abastecernos de nuestros mayoristas y, por otro, lado abrir el juego para que las pymes también sean parte.  Desde la Federación de Almaceneros de la provincia de Buenos Aires, entonces, la intención es triangular y conectar a aquellas pymes que fabrican alimentos en la Provincia de Buenos Aires con los 135 municipios y con las cámaras.