“La pregunta es si todo fue posible por el silencio de muchos sectores sociales”
Por Santiago Asorey y Boris Katunaric
APU: Nos gustaría, en primer lugar, que nos cuentes de qué se trata la obra.
Griselda Galarza: Con Eduardo tenemos un recorrido anterior a este estreno con una obra previa también de Arístides Vargas, un dramaturgo argentino que fundó, en Ecuador, un grupo que se llamaba Malayerba; él se exilió en la época de la dictadura y la verdad es que toda su producción versa alrededor de los hechos que ocurrieron en las décadas del setenta al noventa. En este caso habla de la invasión de Panamá, pero no desde un lugar panfletario sino que intenta suscitar una reflexión un poco más emotiva, más profunda, en el sentido de que, básicamente, su pregunta es si todo lo que sucedió pudo ser posible también por la omisión, el silencio y la complicidad de muchos sectores sociales. En ese sentido, entonces, invita a una reflexión un poco más honda, a no quedarse afuera.
APU: ¿Como fue el descubrimiento, la entrada a la obra de Arístides Vargas?
GG: El estreno previo fue Nuestra señora de las nubes que habla del tema del exilio y esta obra habla de la invasión a Panamá pero tiene una mirada más universal. Es posible ver la obra y tejer analogías y comparaciones con otras situaciones. El descubrimiento viene por ahí. Con Eduardo Graham, que es el codirector, venimos de un mismo lugar de formación que fueron los talleres de Juan Carlos Gené, ahí circula un montón de material con el que uno tiene la posibilidad de conocer diferentes estéticas. Lo que lo caracteriza a Arístides Vargas es una utilización del lenguaje no realista, propone una estética que se abre del realismo, abre otra puerta, mucho más poética, más metafórica pero, al mismo tiempo, muy conectada con las realidades latinoamericanas. Es muy interesante encontrarse con ese material porque uno siente que invita a la reflexión cuando se encuentra con la realidad montada de forma muy cruda. Él toma otro camino y ese camino nos interesa mucho.
APU: Puntualmente, ¿en qué se centra la obra?
GG: La obra trata de la invasión a Panamá, es un grupo de amigas que se juntan todos los años y que, en algún momento, se dan cuenta que durante todos los años que se han juntado nunca pudieron hablar de un hecho puntual que es que una de ellas, en un momento en que se estaban tomando una foto un grupo de estudiantes al borde del canal de Panamá, a un soldado yanqui se le dispara la ametralladora accidentalmente, la mata y cae al canal. Esto es lo que se revela en el recorrido de la obra, la imposibilidad de hacerse cargo de un momento doloroso, no poder asumirlo ni en primera persona ni socialmente; es algo que tiene muchas analogías y resonancias con los que nos pasó a nosotros también. De eso trata puntualmente la obra. Invita a una reflexión donde uno no queda afuera, no está externalizado, no es que le pasó a otros, nos pasó a todos pero nunca pudimos hablarlo.
APU: ¿El problema de la fotografía, cómo aparece en la obra?
GG: Nosotros discutimos muchísimo si proyectar las fotos o no. Ellas se juntan a mirar fotos. Era un problema si las proyectábamos o no, si eran absolutamente referenciales o no. Lo pudimos resolver con Pablo Berger que es un fotógrafo que se incorporó al equipo y pudimos hacer fotos, pero que no sean realistas precisamente. Ves imágenes difusas muy trabajadas (no sé exactamente la técnica que habrá utilizado) como reconstituidas de alguna manera, resignificadas.
Foto de señoritas y esclusas
Sábados de Octubre a las 20:30 hs
Sábados de Noviembre a las 22:30 hs
Teatro Pan y Arte / Boedo 878