Primer Congreso Iberoamericano de Revisionismo Histórico

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Primer Congreso Iberoamericano de Revisionismo Histórico

16 Noviembre 2013

Por Carla Moriana

Tres jornadas para repensar la historia…en realidad para sentar las bases de repensar la historia. Algunos medios la tildaron de cacería de brujas o de arbitrariedad con la historia (ver nota). Lo cierto es que en la escuela aprendemos diferentes teorías sobre el origen del hombre, evolución o creacionismo, y ninguna desmedra a la otra, sino que ambas son formas de comprender de dónde venimos. Sin embargo cuando se trata de historia argentina parece que hubiera verdades absolutas, aunque seamos conscientes de las rupturas, los vacíos, la censura y proscripciones de la que está llena los episodios más oscuros de nuestra historia; más aún si hablamos de continuidad democrática, llena de golpes de estado y discontinuidades. De esto trato el Congreso de Revisionismo Histórico, de puntos de vistas diferentes, de la oportunidad de repensarnos. Sin hacer caso omiso de la historia oficial. Algunos parecen entender la historia como un bloque acabado, sin fisuras, como si las fuentes de la historia no tuvieran documentos perdidos, como si todo estuviera dado y escrito de una vez y para siempre, como una especie de biblia inmodificable. Sin embargo las universidades de ciencias sociales enseñan la existencia de tres diferenciadas corrientes en la construcción del conocimiento histórico: la historia oficial, el revisionismo histórico y la historia social; estas corrientes historiográficas son enseñadas en el nivel universitario para que puedan entenderse las posturas históricas.

Sin embargo no todos nos hemos especializado en historia y llegado al nivel universitario en esa especifica formación ¿Pero, por ello debe negársenos la posibilidad de pensar desde donde está escrito un relato histórico? Parece que todo lo leído en la escuela debe quedarse así: inmutable. Si este fuera el caso, aun seguiríamos creyendo que Alemania continúa dividida, no aceptaríamos la existencia de nuevos países entre otras cosas, y el conocimiento estaría estancado. Tampoco se trata de escribir una versión placida y conveniente de la historia, se trata de tener un panorama más amplio.

Lo planteado en el Congreso de revisionismo histórico no es ninguna novedad, por ello hay un número importante de estudiosos en el tema que son reconocidos como Pacho O´Donell, Hernán Brienza, Enrique Manson, Felipe Pigna, Víctor Ramos  en Argentina y en otros países. El Congreso solo enmarco y dio visibilidad a tendencias que existen y no pueden negarse. Muchas personas- al menos 400 presencialmente- han demostrado tener interés en el tema, aunque sea una minoría significativa, es derecho de nuestro libertad que existan este tipo de espacios de crítica.

La Historia Argentina tiene muchos interrogantes, y más aún la historia reciente, la democracia tiene una deuda con la historia y debe ser saldada. Principalmente una deuda pedagógica, que nos permita pensar la historia, criticarla, tomar postura, y no absorberla sin más; como si repetirla fuera una especie de idioma divino que debe ser memorizado sin oportunidad alguna de dudar. Este es el desafío y el que esté dispuesto, está invitado; a pensarse, a convertirse en sujeto de la historia y no en mero objeto del devenir.