16 años sin Carlos Fuentealba: el vínculo de Burzaco con la Policía de Neuquén
En el marco de un nuevo aniversario del asesinato del maestro Carlos Fuentalba en manos de la Policía Provincial de Neuquén, en la localidad de Arroyito, la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) pidió la renuncia del ministro de Seguridad porteño, Eugenio Burzaco, a quien denunciaron como ex asesor de la fuerza de seguridad del ex gobernador neuquino Jorge Sobisch,señalado por su responsabilidad política en el crimen de Fuentealba. En este mismo sentido, la UTE exigió políticas de seguridad con perspectiva de Derechos Humanos y condenaron el operativo represivo realizado ayer, 3 de abril, por la Policía de la Ciudad contra trabajadores de la línea de colectivos 620.
“A 16 años de la represión que terminó con la muerte Carlos Fuentealba, desde UTE seguimos rechazando la designación de Eugenio Burzaco en el Ministerio de Seguridad de la ciudad, en reemplazo de Marcelo D´Alessandro, por tratarse de una figura caracterizada por un abordaje represivo del conflicto social”, señalaron desde el gremio.
“Burzaco fue jefe de la Policía Metropolitana, y durante su gestión se produjo la represión en el Parque Indoamericano que terminó con la muerte de tres personas, tras el desalojo de unas 350 familias. A su vez, trabajó en Neuquén asesorando a la policía del ex gobernador Jorge Sobisch, institución responsable del asesinato del maestro Carlos Fuentealba el 4 de abril de 2007”, recordó la institución sindical. Además, recordaron los vínculos de Burzaco con un exmilitar condenado por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura militar y puntualizaron que "fue vicepresidente de la Fundación Pensar, donde compartía actividades con Julio Cirino, quien encabezó un grupo de tareas del Batallón 601 durante la última dictadura cívico-militar y fue condenado en 2013 por crímenes de lesa humanidad”.
El recuerdo de Fuentealba
El 4 de abril de 2007, el maestro Carlos Fuentealba fue asesinado en manos del cabo policial provincial Darío Poblete en un operativo represivo en la Ruta 22 a la altura de Arroyito, tras una protesta docente. El asesinato del docente generó múltiples marchas a lo largo de casi dos meses en toda la provincia. Las protestas lograron algunas reivindicaciones, como el aumento salarial y una pensión para viuda del trabajador Sandra Rodríguez, pero no se concretó el juicio político requerido al gobernador Sobisch, quien había admitido haber dado la orden de reprimir.
Por el crimen, fue condenado el uniformado, el 8 de julio de 2008, a quien se le impuso la pena de prisión perpetua por el delito de "homicidio calificado". Posteriormente, el 12 de junio de 2011, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) denegó los recursos de Casación presentados por la querella para investigar a Sobisch como responsable político e ideológico del crimen.
En una entrevista con AGENCIA PACO URONDO, en 2021, la dirigente docente de CTERA, Sonia Alesso, recordó el trabajador de la educación y sostuvo que “Fuentealba fue un maestro comprometido fuertemente con el destino de su pueblo. En ese sentido, y sin ninguna duda, comprometido con los sectores populares, con una educación al servicio del pueblo y con su sindicato ATEN, en un contexto relacionado con lo que pasa en el país. Carlos sostenía las luchas de los gremios y la inclusión de los pibes y pibas de sectores populares para llevar adelante su reclamo.” Además, Alesso señaló que el nombre del maestro “se multiplica en nombres de escuelas, en calles, en marchas, y en murales a lo largo y a lo ancho del país. Es un activo de un pueblo y de un colectivo docente que no se resigna, y que aprendió de las Madres y las Abuelas que la única lucha que se pierde es la que se abandona”.
También se refirió al trabajador asesinado la dirigente gremial de la educación de Malvinas Argentinas, Raquel Villareal, en diálogo con este portal en 2022: “Los reclamos sostenidos por nuestro compañero en ese momento siguen en pie porque la defensa de la Escuela Pública es una bandera que levantamos cada uno de nuestros días y después de haber resistido un gobierno neoliberal como el de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal que vino para instalar políticas que buscaban destruir la Educación Pública. Su implementación provocó mucho daño. Nosotros en la provincia de Buenos Aires en el 2018 sufrimos la muerte en la Escuela 49 de Moreno de nuestros compañeros Sandra y Rubén a causa de la explosión de una garrafa, por desidia y abandono del gobierno provincial de María Eugenia Vidal. El neoliberalismo de Macri y Vidal vino a reducir el Estado, a aplicar un plan de ajuste y a abrir las puertas al mercado.”