Vidal: “Que tengan causas judiciales dirigentes a los que queríamos armarles causas judiciales, es pura coincidencia”
Por Groncho Mars | Ilustración: Leo Olivera
“Ahora vamos por la presidencia de la Nación”, me dice Gregor y pego un salto de la silla pensando en que anda queriendo romper el Frente, en destituir a Alberto Fernández, y antes de que pueda decir algo me paso como 10 minutos explicándole por qué no tememos que ceder a la tentación de dividirnos, que eso le abre la puerta inexorablemente a la derecha más ultrajante para que regrese a los más altos cargos políticos en el país. “¿De qué estás hablando? Yo me refería a la presidencia del diario La Nación. ¿No viste que la Inspección General de Justicia reconoció a Esmeralda Mitre como heredera del fallecido Bartolomé? Ya tiene el 25% de las acciones, más otros que la apoyan llegaría al 35%. Y ya prometió que buscará influir para que el diario sea crítico, pero que sean respetuosos, ‘quiero que respeten a la vicepresidenta’, dijo. ¿Te imaginás a Sirven, Majul y otros teniendo que tratarla bien? Capaz que La Nación deje de ser un pasquín para volver a ser un diario de derecha”, cierra. “Y yo para qué me meto” pienso, pero no es lo que expreso. Lo miro fijo tratando de ignorar que está haciendo un esfuerzo muy grande para no estallar en carcajadas y le digo “mejor, empezar”.
Veo tu sombra contra la pared
El presidente Alberto Fernández anunció que se llegó a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para refinanciar el préstamo que el organismo le otorgó a Mauricio Macri. Martín Guzmán aseveró que se consensuó una “política fiscal que no inhiba la continuidad de la recuperación”. Reducción gradual del déficit fiscal y del financiamiento monetario, sin quitarle recursos a la economía para que no implique un ajuste. Mientras, se seguirá pidiendo la eliminación de los sobrecargos de la tasa de interés. “Fue el mejor arreglo que pudimos conseguir”, aseguró el ministro de Economía. Para La Nación, esta afirmación de Guzmán se quedó corta. “Ya no quedan dudas: el Fondo Monetario es peronista”. ¿Podemos decir que somos potencia mundial? Según Marcos Buscaglia, el FMI ahorcó monetariamente al gobierno de Mauricio Macri y benefició el regreso del peronismo, al cual “sólo” le exigiría un ajuste fiscal de 1,3 % del PBI, con requerimientos “más light”, sin pedirle reformas estructurales. “¡FMI, para qué te traje!”, sólo le faltó poner. Eso sí, se comió algunos detalles, como el preguntarse a dónde fueron a parar los dólares del préstamo. De esta nota se agarró Fernando Iglesias para tuitear “el mismo FMI que en 2001 volteó a De la Rúa y en 2019 estranguló a Macri le tira un salvavidas a este gobierno indecente”. Si a Twitter se la considera una realidad paralela, el diputado debe ser uno de los socios fundadores.
Mentira la mentira, mentira la verdad
“Juntos no va a negar el financiamiento que el gobierno necesita”, aseguró Patricia Bullrich, agregando que “el presidente está faltando a la verdad porque todavía no explicó como va a bajar el déficit”. A mí me gustaría saber cómo se puede mentir sobre algo que todavía no se dijo. Por un camino parecido fue López Murphy, quien declaró que “sería muy malo para la gobernabilidad que la oposición obstruya ese esfuerzo” aunque reclamó que haya demorado tanto. “Generó tanto desasosiego, produjo tanta angustia, creo que ese fue el gran costo, la demora de dos años”. No, Ricardo, lo que generó todo eso fue el acuerdo que se firmó en 5 minutos, sin pasarlo por el Congreso y nos endeudó por 100 años. “Nosotros nos hicimos cargo de nuestro acuerdo y este gobierno se tiene que hacer cargo del suyo”, retrucó la presidenta del PRO. “Trajimos un montón de brotes verdes y ahora le toca a ellos pagarlos”, completó por lo bajo. Otro que rompió el silencio fue Nicolás Dujovne. “Usamos los dólares para estar al corriente de la deuda mientras mejorábamos la posición fiscal. Llegamos al equilibrio en el día que nos íbamos e íbamos a tener superávit en los años siguientes", dijo, para luego quejarse de que “la sociedad argentina no acompañó la continuidad de un programa”. O sea, la culpa es nuestra por votar otra cosa justo el día en que sentían que la podían remontar. No, si este país no mejora porque no quiere. ¿Qué les costaba aguantar unos añitos más?
Y yo los miro sin querer mirar
“Es el plan pegatina, se juntaron el hambre y las ganas de comer”, se mofó Carlos Melconian. “En cambio, el que hicimos con Mauricio… ¡caramba, que coincidencia!”, se sorprendió el expresidente del Banco Nación. Aunque me gustaría aclararle que el de Mufaza fue, más bien, el plan fugatina. “Es fundamental que a corto plazo el BCRA deje de vender dólares”. Alguien, tímidamente, le preguntó para qué. “Para que mis socios puedan subir el precio del dólar blue como si fueran aviones”. Pillo, Melconian, habló de suba en los pedidos de dólares oficiales, pero se le “olvidó” decir que muchos de los dólares ingresados al Banco Central el año pasado tuvieron que ser usados para pagar las cuotas de la deuda que generó Juntos. Lástima que al periodista de Infobae “se le escapó” ese detalle. Por suerte se hizo presente la palabra autorizada de Alejandra Darín quien dejó entrever una molestia: “En la Asociación de Actores cayó mal este acuerdo con el Fondo, nadie nos consultó nada”. ¿En serio, Martín, te tomaste todo este tiempo para llegar a un arreglo y no los consultaste? ¿En qué estabas pensando? ¿Y si se entera Kristalina y lo tira para atrás? Pero quien está atento a lo importante del asunto cual si fuera Crónica contando desde diciembre cuántos días falta para que llegue el invierno, es Clarín, que tituló “Cristina Kirchner y La Cámpora ya llevan tres días de silencio sobre el acuerdo con el FMI”. Ya los veo poniendo un contador en la tapa…
Abriendo de par en par, tu pobre corazón
Las quejas sobre el arreglo por la deuda con el Fondo salieron desde las mismas fuerzas oficialistas. “No me parece bien que Macri y su banda queden impunes”, afirmó Amado Bodou, aunque se refirió al acuerdo diciendo “que no puede haber uno bueno con una situación tan grave”. Lo de Claudio Lozano fue un poco más raro. “Estoy en contra del acuerdo con el FMI pero no pensé en renunciar al Banco Nación”, declaró. Puedo aceptar, compañero, la primera parte de esto si tengo en cuenta que usted considera que se pone en marcha un ajuste de 9000 millones de dólares. Lo que no me queda claro es por qué tiene que salir a declarar lo segundo, si nadie se lo estaba pidiendo. Quizás lo suyo fue anticipatorio porque al ratito nos enteramos que Máximo Kirchner renunció a la presidencia del Frente de Todos en Diputados. “Sería más que incorrecto aferrarse a ella cuando no se puede acompañar un proyecto de una centralidad tan decisiva”, aseveró. Esto fue leído como una fuerte jugada contra la Casa Rosada desde el interior del bloque. “Nadie puede estar contento de tener al FMI de vuelta”, bajó los decibeles Martín Guzmán. Aníbal Fernández los volvió a subir haciendo lo que mejor le sale en estos días: tuitear y luego borrar. “Antes de que la pudra la oposición, lo hacemos nosotros”, pareció ser la consigna. Y dio algo de resultado, ya que a los de Juntos se los vio bastante desconcertados. Lástima que a nosotros, también.
Sofocado por el sueño y la presión
Si bien hubo críticas oficialistas hacia el accionar de Máximo, desde la izquierda lo felicitaron y lo invitaron “a tomar las calles”. “¿Me estaban esperando a mí para hacerlo? ¡Con razón no arrancaban nunca!”, habría sido su respuesta. “La renuncia confirma que el acuerdo con el FMI es un nuevo pacto de coloniaje y significará un duro ajuste contra el pueblo trabajador”, dijo Nico del Caño. Me gustaría saber en qué parte de la carta de dimisión dice eso. Manuela Castañeira lo llamó “a pasar de las palabras a los hechos”. Nadie le atendió el teléfono. Capaz que lo hagan cuando ellos pasen de las palabras a los hechos. Hasta la abstención, siempre. “Las internas del oficialismo impactan en el gobierno de nuestro país. En este caso es peor: lesiona la autoridad presidencial y quita credibilidad y estabilidad”, tuiteó Julio Cobos, el hombre que cuando fue vicepresidente votó no positivo contra el sector que supuestamente representaba. Por suerte, Infobae y TN revelaron la verdad de la milanesa: Máximo renunció para acumular poder e ir por la gobernación de la provincia de Buenos Aires. Como si no lo habría podido acumular siendo jefe de la bancada peronista. El que salió con los tapones de punta fue Guillermo Moreno. “Cristina tiene que renunciar y pedir perdón”. Uff, menos mal que no pidió que renuncien los dos y nombren una asamblea peronista que, probablemente dirija él, que es el más peronista de todos. Ah, ¿dijo algo parecido? Viene tranca, Moreno.
Si algunas veces me adelanto y otras voy atrás
Días atrás se llevó a cabo una multitudinaria movilización de organizaciones políticas, judiciales, gremiales y sociales que se expresaron frente a Tribunales para exigir “el fin del lawfare” y la reforma judicial. Para Clarín, hubo un duro discurso en las voces de las artistas K Luisa Kuliok y Cristina Banegas. Bueh, en Luisa te creo, tiene un montón de esa letra en un apellido tan cortito. Pero en Banegas… A menos que supongan que se llama Kristina. Tras la manifestación, desde la alta magistratura no hubo comentarios ni reacciones. A pesar de que la Corte Suprema se llamó nuevamente a silencio, no veo que el gran diario argentino le esté contando los días sin salir a dar su opinión sobre los reclamos y denuncias recibidos. Lo que primero se da como tragedia, se repite luego como comedia. Así que si hubo marcha… ¡Días después tuvimos contramarcha! “El objetivo real que tienen es destruir la independencia de los jueces”. A propósito de éstos, comenzó el Argentina Open y puedo asegurar que hasta ahora no vi a ninguno de los magistrados a los que les gustaba ir a sacudir la raqueta en Olivos asistir al Buenos Aires Lawn Tennis a ver algún partido. ¿Raro, no? Si bien se observó entre los asistentes a la contramarcha a no pocos miembros de Juntos, desde esa alianza salieron rápidamente a despegarse de su organización cuando vieron que no pasaban de unos cientos. Esto, en la República de Morondanga no pasaba.
Lo que me queda es todo este temblor
Como si fuera poco, murieron una decena de chicos por cocaína adulterada pocos días después de que Cristina Kirchner avisara que el lugar que no ocupa el Estado se lo apropia el narco. Sergio Berni se movió rápido para sacarla de circulación y advirtió a aquellos que compraron esa sustancia en las últimas 24 horas “que la descarten”. Esto disparó cientos de memes de gente que se descubrió coincidiendo con el ministro y que entró en pánico preguntándose si después de eso podían seguir sintiéndose progre. Aníbal volvió a ser Aníbal (tómese unas vacaciones de Twitter, ministro) y Patricia Bullrich… quiso sacar tajada y le fue bastante mal. “Ministro Aníbal Fernández: explique el salto del 495 % en la importación de fentanilo en el último año. Usted sabe que estas sustancias terminan en el narcotráfico. ¿No le suena similar a lo que sucedió con la efedrina?”, tuiteó. Rápidamente le contestaron: “Tu cuadro está en dólares, no en cantidades. Se disparó porque lo usan con los internados en terapia con ventilación mecánica. Se volvió escaso (mucho más caro) y se usó mucho más. ¿Ahora podes dejar hacer el ridículo?”. Difícil, no sería Patricia. Mientras tanto, Soledad Acuña declaró “vamos a eliminar la palabra protocolo de las escuelas. A partir de ahora, no hay más palabras raras”. “¿Qué es una palabra rara? Es una incógnita, no puede tener un protocolo especial, no tiene identidad, está eliminada”, habría ampliado.
Las cosas que dije no tienen sentido
Javier Milei se recalentó con el Papa Francisco porque éste dijo “hay que contrarrestar la evasión de impuestos con la simple rectitud de muchos contribuyentes”. “Siempre parado del lado del mal. Si a alguien le da un ataque de caridad y sale con una pistola a robar para financiarlo ¿lo bendecís?”, tuiteó el diputado. “Si le roba a uno de sus financieros amigos que le permiten sortear su sueldo ¡pues claro que lo absuelvo!”, parece que se rió el Papa en los pasillos del Vaticano. Mientras tanto, Patricia Bullrich fue denunciada por la compra de equipos de seguridad para el G20 que llegó tarde y con sobreprecio. Le preguntaron a la Pato sobre el tema y la exministra contestó: “Pichetto es mi candidato a vicepresidente”. Se que la tiro al lateral, pero no puedo dejar de pensar que si ellos gana sus PASO va a ser algo así como el antiperonismo peronista contra el peronismo peronista. La que por fin pudo diseñar un discurso para tratar de explicar los videos de “la Gestapo judicial” fue María Eugenia Vidal. “No armé una causa judicial contra el pata Medina, él está siendo juzgado por una causa que nada tiene que ver con los videos donde se ve a gente de mi gobierno armando una causa judicial contra el Pata Medina”, habría sido su explicación no explicativa. Para la próxima, que le pida ayuda a Pérez quien, de Cristina a Cristina, le reclamó con una carta a la vicepresidenta que no haya escrito ninguna estos días. Tu mach.
Mundo arjo de argentum y dolor
Alberto Fernández se fue de gira y parece que le fue bastante bien porque se trae financiamiento por 23 millones de dólares y apoyo en el acuerdo con el FMI. Me encantó cómo Infobae tituló los últimos movimientos del presidente: “Tras su reunión con Xi Jinping, Alberto Fernández cerró su gira por China con una visita a la cuestionada empresa Huawei”. Le tiran tantos petardos al país oriental que pienso si la asociación de todo lo chino con mala calidad no la inventaron ellos. Ahora, lo de Diego Guelar en este diario reflejando su paso por Rusia titulando “Hijos de Putin” es para que lo revise el INADI. O por lo menos el VAR. Por suerte le cedieron un espacio a Cristina Pérez quien equilibró las cosas advirtiéndonos que “el delirante entreguismo al neo comunismo zarista encarnado por el ex agente de la KGB con sus ínfulas imperialistas sería un desatino para el equilibrio diplomático”. Referirse a algo uniendo comunismo y zarismo es como intentar dirigirse hacia fuera yendo por adentro. No queda más que explotar. Increíble que en este portal sigan usando el slogan de “hacemos periodismo”. Eso sí, no superan al gran diario argentino. “Desconcierto y preocupación en Estados Unidos por el viaje de Alberto Fernández a Rusia”, “En EE.UU. ven la gira de Alberto Fernández como un avance de China en Argentina”. Nadie puede decir que estos muchachos no traspiran la camiseta. La de la embajada, digo.
Mai onli frends, di end
Una vez más llegamos al podio de las noticias más destacadas, esta vez de los últimos 15 días, teniendo en cuenta este modo vacaciones en que están saliendo los informes. Es decir, cuando nos obligan a salir de la pile y ya no la podemos esquivar. Gracias al esfuerzo de AM, mi diler de noticias falopa, podemos decir que en el tercer lugar tenemos a “Una mujer ató a su esposo y lo llevó a vacunarse contra el covid”. Crónica, te amamos. “La letra con sangre entra”, me decía mi tío mientras me daba en los dedos con la regla porque no prestaba atención a lo que me estaba explicando. En el segundo escalón, “Lo conoció por Tinder y la recibió disfrazado de Batman”. Parece que el tipo la invitó a cenar y nunca se quitó la máscara. ¿Esto le pasaba a Bruno Díaz? Lo cierto que la chica terminó su historia confesando “Charlamos, hablamos, pero sabía que no iba a tener sexo en la primera cita con una persona que estaba disfrazada de Batman”. Mavále, ni siquiera con el de verdad. Y en lo más alto del podio, “Un médico antipfizer, un exmontonero y el hijo de de la titular del INAI, detrás de la marcha al Lago Escondido”. Como si no le alcanzara a Clarín el título para establecer un manual de descalificación gratuita y creativa, en la bajada agregaron “quiénes son los k que protestan por ‘el derecho al agua’ que nadie se robó”. No, sólo cercaron el lago y te corren a los tiros si querés pasar, nomás. Y como pasaron tantos días, les dejo un delicioso bonus track: “LN+ anunció el regreso de Majul y sus propios televidentes pidieron que no vuelva”. En su punto más álgido, Luisito.