ATP de Buenos Aires: una legión sin general

Por Iván Petrone

Este domingo finalizó otra edición de un clásico de febrero: el ATP de Buenos Aires. El trofeo de la Copa Claro se lo volvió a llevar David Ferrer, tras vencer a Fabio Fognini por 6-4 6-3 en 1 hora y 14 minutos. Con este logro, el español se consagra como el primero en ganar el tricampeonato en forma consecutiva, hazaña sólo alcanzada por Guillermo Vilas (campeón entre 1973-1977, 1979 y 1982), cuando el torneo tenía otro nombre y características.

El andar de los locales fue el esperado. El miércoles a la noche perdió la última esperanza del tenis nacional, Charly Berlocq. Nunca en la historia de la competición se dio esta circunstancia. De los 32 participantes del certamen, nueve eran argentinos. De esos nueve, tres lograron pasar a segunda ronda, donde fueron derrotados. Del Potro no fue derrotado en el torneo argentino porque, al igual que con la Davis, decidió no jugarlo. Más allá de las ganas, el presente del tenis argentino no permitía ilusionarse mucho más. Febrero de 2014 marca un quiebre definitivo, un quiebre que se venía anticipando, con el período de la Legión Argentina. Ya no es la época de un argentino jugando un domingo todas las semanas, ni la de estar invictos de local en la Davis. La derrota frente a Italia en Mar del Plata obliga a un repechaje para mantenerse en el Grupo Mundial. Si bien se perdió contra un Fognini inspiradísimo, era una empresa difícil para cualquier equipo cuyos jugadores top 40 debían enfrentar al número 15 del mundo. El año pasado se pudo ganar ajustadamente gracias a Berlocq, que en copa Davis rinde mucho más de lo que lo hace habitualmente. Este año no alcanzó. Tampoco alcanzó en el ATP de Buenos Aires, donde no hubo un juvenil que se colara en cuartos, tal como hizo Delbonis en 2013. Es posible que en septiembre, cuando se juegue el repechaje de la Copa Davis, tampoco alcance. La Torre de Tandil eligió descansar y entrenar a participar en el equipo argentino por tener profundas diferencias con los dirigentes. El presente no es de vacas gordas pero aún hay material para plantarse y dar pelea. Hoy en día tenemos 5 tenistas asentados en el top 100, uno de ellos en el top ten, y varios jugadores jóvenes que están desarrollando su potencial. Parece poco si se lo compara con el pasado reciente pero no lo es si se recuerda que estamos hablando del máximo nivel de exigencia.

Dos días antes de realizarse el sorteo del cuadro principal, Nadal, principal atracción de la edición 2014, confirmó que se bajaba del torneo por una lesión en la espalda. Temiendo la falta de nombres fuertes, Martín Jaite, director de la Copa Claro y capitán del equipo argentino de Copa Davis, llamó de urgencia a Ferrer, que estaba descansando en su casa y enfocándose en el ATP 500 de Río. El Frontón no dudó ni un momento y se sumó al certamen. Para bien de los espectadores, los temores de Jaite no se materializaron: a las semifinales arribaron los cuatro primeros preclasificados, Ferrer (5º), Fognini (14º), Robredo (17º) y Almagro (18º). Cuatro jugadores del top 20 en las canchas del Buenos Aires Lawn Tennis Club.

El partido final fue de alto nivel. Se trabaron en un duelo de fondo de cancha, con variedad de efectos y direcciones. El italiano demostró por qué es la sensación en polvo de ladrillo de la temporada pero Ferrer lo demolió con su clásico repertorio de garra y defensa. El primer set se inclinó para el valenciano gracias a un quiebre en un game donde Fognini no pudo hacer valer su primer servicio. El segundo set mostró al italiano más contrariado, fastidioso incluso al ganar los puntos debido a que Ferrer siempre obligaba a jugar una pelota más. Un game con varios errores no forzados del tano provocó un 5-3 para su rival, que no dudó al cerrar el encuentro con su servicio. Si bien desde el fondo de cancha había cierta paridad, el español mostró mayor consistencia y también fue muy oportuno para aprovechar el segundo servicio de su oponente (ganó el 72% de esos puntos).

Una semana después de llegar a Argentina, el campeón vigente revalidó su título, reteniendo los 250 puntos que obtuvo el año pasado. De esa manera, avanzó a la 4º posición en el ranking ATP, en detrimento de Juan Martín Del Potro. El tandilese, como de costumbre, eligió las canchas duras y esta semana intentó defender el campeonato en Rotterdam, Holanda, donde fue eliminado en cuartos de final por el inestable Ernest Gulbis.

Por otra parte, el finalista Fognini se mostró satisfecho por los resultados obtenidos en estos días. En lo que va de su visita por Sudamérica su record es 11-1: ganó los 3 partidos de copa Davis contra Argentina, 2 singles y un dobles; los 4 en Viña del Mar, donde fue campeón ante Leo Mayer; y 4 en Buenos Aires, hasta caer en la final. Actualmente, se encuentra en su mejor momento y espera mantenerlo en esta semana que comienza, en el ATP de Río de Janeiro, donde parte como tercer favorito y comparte cuadro con Nadal, Ferrer y Robredo.

Hoy continúa la gira sudamericana de polvo de ladrillo, cuya tercera parada es en las costas cariocas. Entre los 5 argentinos presentes en el cuadro principal se destaca la presencia de Juan Mónaco, séptimo preclasificado, que debutará contra el marplatense Zeballos.