La Cámpora repudió las represiones en Neuquén y Jujuy
01 Septiembre 2013
COMUNICADO I La represión policial que sufrieron las personas que se manifestaban afuera de la Cámara de Diputados de Neuquén nos recuerda inevitablemente a Teresa Rodríguez y Carlos Fuentealba, víctimas de la represión de una policía que sigue recurriendo a prácticas violentas y abuso del poder.
A esto se suma la represión por parte de la policía de Jujuy a empleados estatales que reclaman por la suba de sus salarios. Hace 20 días, el vicegobernador de esa provincia, Guillermo Jenefes, en un discurso que nos rememora a una Argentina que supimos dejar atrás, amenazó a los estatales con utilizar el aparato represivo provincial como respuesta ante el reclamo sindical. Jenefes, que votó en contra de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual cuando era senador, dijo que “si es necesario, vamos a reprimir”. La amenaza no tardó mucho en concretarse y los compañeros que reclamaban por un aumento de sueldos fueron brutalmente reprimidos por la policía.
Durante los últimos diez años el Gobierno Nacional, primero con Néstor y ahora con Cristina, ha garantizado que no se reprima la protesta social. A este Gobierno jamás le ha importado incluso pagar costos políticos fogoneados por una derecha mediatica que exige represión para luego ser la primera en criticarla, sin importarle el costo humano mientras pueda llevar agua para su molino.
En una Argentina que crece, ampliando derechos y cuyas políticas tienen pocos años de desarrollo, resulta inadmisible que sectores que representan el pasado oprobioso, apelen a prácticas que nuestro pueblo repudia. Somos conscientes que esos mismos sectores saben que el regreso al pasado está a la vuelta de la esquina, es por eso que creemos necesario que las organizaciones del campo popular estemos alertas porque la derecha está agazapada, y su propuesta es rendición o caos.
Por esa razón repudiamos los actos de violencia cometidos por la policía de Neuquen y Jujuy y nos solidarizamos con los militantes heridos.
A esto se suma la represión por parte de la policía de Jujuy a empleados estatales que reclaman por la suba de sus salarios. Hace 20 días, el vicegobernador de esa provincia, Guillermo Jenefes, en un discurso que nos rememora a una Argentina que supimos dejar atrás, amenazó a los estatales con utilizar el aparato represivo provincial como respuesta ante el reclamo sindical. Jenefes, que votó en contra de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual cuando era senador, dijo que “si es necesario, vamos a reprimir”. La amenaza no tardó mucho en concretarse y los compañeros que reclamaban por un aumento de sueldos fueron brutalmente reprimidos por la policía.
Durante los últimos diez años el Gobierno Nacional, primero con Néstor y ahora con Cristina, ha garantizado que no se reprima la protesta social. A este Gobierno jamás le ha importado incluso pagar costos políticos fogoneados por una derecha mediatica que exige represión para luego ser la primera en criticarla, sin importarle el costo humano mientras pueda llevar agua para su molino.
En una Argentina que crece, ampliando derechos y cuyas políticas tienen pocos años de desarrollo, resulta inadmisible que sectores que representan el pasado oprobioso, apelen a prácticas que nuestro pueblo repudia. Somos conscientes que esos mismos sectores saben que el regreso al pasado está a la vuelta de la esquina, es por eso que creemos necesario que las organizaciones del campo popular estemos alertas porque la derecha está agazapada, y su propuesta es rendición o caos.
Por esa razón repudiamos los actos de violencia cometidos por la policía de Neuquen y Jujuy y nos solidarizamos con los militantes heridos.