"Es un llamado de alerta contra cualquier país que intente reestructurar su deuda"
Por Nahuel Placanica
Agencia Paco Urondo: ¿Qué impresión tuvo de la decisión de la Corte?
Mara Laudonia: La denegación de la Corte de tratar la apelación argentina sobre el fallo de Griessa pone a la Argentina entre la espada y la pared respecto a qué hacer con los acreedores que entraron al canje.
Argentina podría no pagarles si pone la plata en las cuentas respectivas el próximo 30 junio porque se lo pueden incautar. De esa manera, entraría en default con los acreedores que entraron al canje. Si acatase el fallo, que es pagar el cien por ciento, estaría haciendo una mejor oferta que al resto de los acreedores que aceptaron la quita, quienes podrían realizar planteos legales. El 7% que no entró, querría cobrar lo mismo que los buitres. Y el 93% restante, podría plantear por qué a ellos no les hiciste una oferta mejor. Eso puede provocar una ola de juicios que no se sabe hasta dónde podría a llegar.
Existe una cláusula que vence en diciembre, que le impide a la Argentina hacer una mejor oferta a cualquiera. De todas formas, aunque pensáramos este escenario ya en enero, la Argentina debería pagar la totalidad a los fondos buitres, un total de 15 mil millones de dólares entre capital e intereses. Eso representa más de la mitad de las reservas del Banco Central.
Estas medidas boicotean nuestra re-estructuración de deuda, aprobada en 2005 y 2010. Es un llamado de alerta al mundo ya que podría pasarle lo mismo a cualquier país que intente reestructurar su deuda de aquí en más.
APU: ¿Qué países se han visto ante la situación de acoso de los fondos buitre? ¿Cómo han encarado esa situación?
ML: Países en situación de juicio con los fondos buitre como la Argentina, que lleva once años de litigio, en este momento, no hay. Sí hay países con crisis de deuda que están re estructurando. Otros, que habían re-estructurado su deuda, tuvieron que pagarle el cien por ciento a los Buitre, es el caso de Gracia. Este país había re-estructurado con una quita muy fuerte su deuda con la mayoría de los acreedores. Hubo algunos fondos, se especula que son los de Eliot y Dark, que están cobrando el cien por ciento. En este caso, no están demandando a Grecia porque les están pagando lo que quieren.
Ahora, Grecia tiene una situación que es que hace seis años que no crece. Puede llegar el momento en el que tenga que hacer una nueva re-estructuración de deuda. ¿Cómo le vas a decir al que ya entró que vuelva a entrar, a tener una quita, si ya saben que cuando no entran les pagan el cien por ciento? Además, ahora eso está avalado por un fallo como el del caso argentino. Esto genera una situación que boicotea la posibilidad de los países de salir de una situación de quiebra.
A falta de un sistema internacional de quiebra de países, lo que rige es la arbitrariedad. El juez podría haber decidido que las cargas se repartieran entre acreedores y deudores. Pero no, se rigió por la legalidad del contrario y hoy argentina debe pagar el cien por ciento.
Cuando Detroit se declaró en quiebra, la ciudad hizo una convocatoria de acreedores con quita. En ese entonces, la Justicia de EEUU lo aceptó, entendiendo que era una cuestión de bien público. Si hay concesiones para un municipio, no sé por qué no se aplica el mismo criterio para un país.
APU: ¿Cree que existe un trasfondo político?
ML: No se puede decir eso con todas las letras. El juez se rige por el contrato legal que dice que Argentina tiene que pagar la totalidad, y Argentina no lo hizo. Lo que sí hay es mucho lobby. Esas presiones llegan a la Corte, no solo para este caso, en general.
En 2001, después de la crisis Argentina y una serie de crisis en varios países, como el caso de Indonesia, Ane Krueger, entonces número uno del FMI, intentó imponer un sistema de quiebras internacionales para los países, como existe para las empresas. El plan de Krueger incluía que la idea de que el FMI tenía que ser el veedor, con lo cual había gente que no estaba de acuerdo. Wall Street y el sector financiero boicotearon ese proyecto en tiempo de George Bush.
APU: ¿Cuándo aparece esta práctica que da origen a los fondos buitre?
ML: Nacen como los conocemos hoy hacia fines de los sesenta, principios de los 70. En esa época se modificó el sistema internacional de financiamiento. Antes eran los bancos los que directamente financiaban a los países. Después de la crisis de los petrodólares, los bancos empezaron a preocuparse porque los países estaban endeudados y no podían pagar. Por eso, armaron junto al FMI una especie de nuevo método de pago en el cual el FMI prestaba plata a los países y las deudas de los bancos se convertían en bonos, que luego podían ser comercializados en mercados secundarios. Ahora la deuda ya no era entre un banco y un país sino que estaba desparramada entre miles de tenedores de bonos.
De esta manera, los bancos sabían que si los países tenían problemas podían desprenderse rápidamente de los bonos o dedicarse a participar de otros negocios, como ser la colocación de asesoramiento para endeudamiento. Ya no se metían en préstamos directos. Así le pasaban la pelota al tenedor de bonos. Así, se arreglaron todos los Plan Brady en Latinoamérica. Se canjearon préstamos de bancos por bonos. A argentina le pasó eso en 1992.
Como los títulos de deuda cotizan de acuerdo a cómo le vaya al país, los fondo buitre toman esa deuda y esperan poder cobrar su ganancia litigio de por medio.