Persecución a opositores: Milagro Sala declaró en la causa "Pibes Villeros"

Por Comité por la libertad de Milagro Sala
 
Milagro Sala declaró ayer en el juicio que se conoce como “Pibes Villeros”, en la última audiencia previa al inicio de los alegatos que comenzarán el próximo lunes. La dirigente social está acusada de ser jefa de una asociación ilícita, extorsión y fraude al Estado. Frente al Tribunal Criminal 3 que integran las juezas Alejandra Tolaba, Claudia Cecilia Sadir y Ana Carolina Pérez Rojas afirmó: “Me culpan de extorsión. Sé de donde viene la mano. Los denunciantes están apretados por este gobierno para declarar en mi contra”.
 
En relación a la acusación de conformar una asociación ilícita señaló: “Nosotros nunca nos juntamos para organizar delitos. Nosotros solo construimos”. En ese marco recordó que la organización Tupac Amaru comenzó con las copas de leche. “En ese momento Jujuy era primero en desnutrición infantil, primero en deserción escolar y éramos primeros en desocupación”. La diputada del Parlasur habló además del trabajo social que realizó la organización sin ningún tipo de ayuda o recurso.
 
El Ministerio Público de la Acusación sostiene que la Tupac Amaru era una organización criminal que se conformó para cometer delitos. En ese contexto, la dirigente social recordó que a través de 57 cooperativas asociadas a la organización se hicieron trabajos de cordón cuneta, pavimento, núcleos húmedos y construcción de viviendas en distintas localidades de la provincia. Además, se construyeron “26 polideportivos con canchas de básquet, fútbol, sala de primeros auxilios con silla odontológica, atención médica y clínica” agregó. Así mismo, dio cuenta de las fábricas en distintos puntos de la provincia, los centros educativos y otro tipo de actividades que se realizaron desde la Tupac Amaru.
 
Respecto a la Red de Organizaciones Sociales, recordó que: “se formó porque a las organizaciones que eran chicas no les daban nada, entonces nos juntamos. Decíamos que si la Tupac tenía para comer los otros también tenían que tener para comer. En la cuestión económica, la Red era independiente, manejaba su plata. Teníamos una comisión de capacitaciones, una de bolsones y una de finanzas. Mabel Balconte y Emilio Cayo integraban esa comisión y eran los encargados de pagar a las distintas organizaciones en la sede de la ODIJ”.
 
También criticó que durante el proceso no pudo ejercer el legítimo derecho a la defensa. “No entiendo la acusación. No tiene fecha, no tiene día, no se entiende de qué hechos concretos se me acusa. Además, desde el 30 de agosto, cuando me apartaron de la sala -en referencia al día en el que el Tribunal decidió excluirla del proceso tras el traslado dispuesto por el juez Pablo Pullen Llermanos desde el hospital en pijama- me fue difícil tener contacto con mis abogados durante las audiencias”. Es importante recordar que ese día ni siquiera pudo escuchar la audiencia en una sala contigua ya que desde el estacionamiento de tribunales fue trasladada a la localidad de El Carmen. Incluso el Ministerio Público de la Acusación advirtió en distintas audiencias la gravedad de la exclusión en relación a las nulidades del proceso.
 
Por último, Sala recordó que durante el primer año de su detención fue trasladada a una audiencia en la que el juez Isidoro Cruz, el fiscal Araya y el defensor oficial Troncoso, le ofrecieron denunciar falsamente al ex gobernador Eduardo Fellner, a cambio de mejoras en sus condiciones de detención. “Me dijeron que declarara que le dábamos plata de la Tupac a Fellner para que se la dieran a Cristina. Como me negué, a la semana siguiente detuvieron a mi marido”, denunció.
 
El próximo lunes comenzarán los alegatos. Luego, en fecha aún a definir, se conocerá la sentencia del proceso.