Atacaron por segunda vez la movilización de mujeres en San Miguel
Por Daniela Moran
Con varias semanas de organización, la Asamblea de Mujeres del Conurbano Noroeste convocó a compartir una nueva movilización pacífica bajo la consigna nacional Ni Una Menos. En este marco cientos de mujeres y colectivos diversos se reunieron en la plaza central de San Miguel. Cerca de las cinco de la tarde, ya había comenzado una radio abierta con la presentación de música en vivo y a la espera de que lleguen las compañeras de otros distritos como José C Paz, Moreno y Malvinas Argentinas.
Durante el transcurso de la jornada efectiva de seguridad de la Municipalidad de San Miguel, junto a policías, se acercaron en varios momentos consultando a las mujeres que estaban en la organización sobre el desarrollo y consigna de la jornada. Cabe recordar que una semana antes, en la concentración por el 28M (presentación del nuevo proyecto ILE), en el mismo lugar quienes se encontraban acompañando la jornada se vieron violentadas por un grupo de personas identificadas con un pañuelo celeste que tiraron gas pimienta mujeres, niños, niñas y todos los que estaban en el lugar.
A minutos de comenzar a marchar por la calle Perón hacia la plaza Muñiz como estaba previsto, la columna de mujeres, lesbianas, travestis, trans y quienes acompañaban la acción tuvo que detenerse por la presencia de gas pimienta. Niños y niñas, bebes entre otras personas se vieron afectados por el gas y dispersaron su participación producto del temor. “Mientras marchábamos la idea era llegar a la plaza Muñiz. Yo estaba ahí con Clari, mi hija de 13 años. Estaba como resguardándola porque bueno, las pibas agitan, y ella quería estar adelante”, relató Sandra una mamá que estaba participando de la actividad junto a su hija y amigas. “En un momento salgo de la columna a comprar una agua y la veo a mi cuñada que me traía a Clari corriendo con la cara toda tapada. No paraba de llorar y tenía arcadas constantes”, repasó la mamá insistiendo en el temor que le causó esta situación.
La niña también conversó con FM La Uni, estaba indignada por lo ocurrido. “Me picaba muchísimo la garganta y los ojos. Y me daban arcadas que no podía controlar. Mi mamá me dijo que vayamos pero le dije que no que quería seguir en la marcha que todavía no había terminado. Habían tirado el gas para que nos vayamos”, conto Clari.
Por su parte, Carolina Abregú integrante de la Asamblea y del colectivo Furia Feminista aportó que “comenzaron a arrojar gas pimienta desde un edificio, obviamente frenamos la marcha y se produjo un momento de tensión”. Fueron varios minutos de desconcierto para quienes estaban disfrutando de expresarse mediantes cantos y consignas en una movilización colectiva. “Por suerte la organización pudo preservar a todes les compañeres presentes”, agrego la referente local feminista.
“Tenemos identificado el edificio porque todos miramos hacia donde y se verá como seguir este caso”, dijo Abregú y aseguró que desde el municipio de San Miguel “no hubo ninguna respuesta ante el hecho siendo que en el operativo hasta había secretarios de seguridad presentes. “No creo que hagan nada. En San Miguel reina el silencio”, expresó.
Con el correr de las horas la noticia fue tomando peso. La actividad concluyó ese día con la lectura de un documento escrito por la Asamblea que exigía a las autoridades locales destinar presupuesto y proyectos a erradicar el aumento constante casos de femicidios y violencia de género. Sobre la noche la organización compartió un comunicado oficial indicando lo ocurrido esa tarde “Fuimos nuevamente agredidas con gas pimienta en el Municipio de San Miguel”, y denunciaron “de forma directa al Municipio y al operativo de seguridad a cargo del Director Hugo Lamera, que se comprometió a que no iba a sucedernos lo mismo que el 28 de mayo pasado. Un operativo llevado adelante por fuerzas de seguridad que nos preguntaron en infinidad de veces sobre nuestro recorrido y que no respondieron en ningún momento a las agresiones que nos propinaron”.
“Fue muy desconcertante en el caso de la primera y hay que decirlo, porque nunca nos había pasado algo de esa magnitud. Es preocupante”, dijo en FM La Uni la concejala Marcela Vigueras del bloque de Unidad Ciudadana. “Es un lugar público y céntrico que está lleno de cámaras por todos lados. El ejecutivo municipal en ningún momento dio una respuesta clara para facilitar la detención de los agresores”, comentó Vigueras sobre accionar de la municipalidad ante el hecho.
En la sesión de hoy en el Honorable Concejo Deliberante, la concejala expuso esta situación ante el resto de los representantes locales. Anticipó a FM La Uni que para la próxima sesión hará un pedido formal de informe por lo ocurrido. “Sin duda la responsabilidad es del Intendente Jaime Méndez y el Secretario de seguridad Juan josé Esper porque son quienes están a cargo de la seguridad en el distrito y quienes espesaron que iban a hacerse cargo”, afirmó Vigueras.
El hecho, también trascendió a la Cámara de Diputados provincial. “Hemos podido consensuar y varios compañeros de distintas bancadas expresaron su repudio por ambos sucesos”, comentó la concejala señalando que la diputada provincial de Pilar, Lucia Portos se hizo eco de lo sucedido en el Municipio y acusó a Méndez y al ministro de Gobierno, Joaquín de la Torre, del ataque contra las vecinas. “Deberían garantizar la seguridad de las compañeras”, afirmó la legisladora.
La Asamblea del Noroeste sigue esperando una respuesta oficial, sin embargo continua movilizada y en acción intentando esclarecer esta situación. “No nos van a callar. Seguimos en las Calles”, expresaron. Similar a lo que piensa la niña Clari, víctima del último hecho. “Yo no me quería ir porque al patriarcado nosotras le convenimos miedosas y tristes”, afirmó y alentó “hay que agitarla, porque si nos mostramos así el patriarcado va a ir tomando más control sobre nosotras”.