Causa ESMA IV: condenas para 8 genocidas
Luego de una demora de más de dos años, finalmente, el Tribunal Oral Federal N° 5 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires dictó, por primera vez, penas de prisión a 8 genocidas en el cuarto juicio por los delitos de lesa humanidad cometidos en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA), que fuera convertida en centro clandestino de detención y torturas durante la última dictadura cívico militar.
El juicio ESMA IV, como se lo conoce públicamente, es el cuarto en ser celebrado en el contexto de la Megacausa ESMA, que es una de las mayores causas judiciales por la que juzga los crímenes cometidos por el terrorismo de Estado, dada la cantidad de hechos ocurridos, el número de víctimas e imputados y las declaraciones testimoniales.
El primero de los juicios se realizó en 2007 y este último, que sufrió varios aplazamientos y es considerado el más grande porque involucra a 816 víctimas, llegó finalmente a concretarse de forma virtual, a pesar de las eventualidades. De los 10 acusados, nunca antes juzgados, que formaban parte del expediente en 2018, año en que comenzó este proceso, solamente 8 de ellos llegaron a esta etapa, ya que Néstor Eduardo Tauro, excabo de la Armada, falleció durante el transcurso de la causa, y el contraalmirante Horacio Luis Ferrari, quedó fuera de este expediente, luego que la Corte convalidara el pedido de recusación de los jueces Daniel Obligado y Adriana Palliotti, por peligro de parcialidad.
Ahora, después de más de dos años y medio de espera, se logró concluir el juicio oral y público con la lectura del veredicto en una audiencia que se realizó a través de la aplicación Zoom y se trasmitió por el canal YouTube del Consejo de la Magistratura, debido a las condiciones impuestas por la pandemia de COVID-19.
De esta manera, el Tribunal integrado por el presidente Daniel Obligado y las vocales Adriana Palliotti y Gabriela López Iñíguez, dictó prisión perpetua para Raúl Armando Cabral, exagente de la Policía Federal; Miguel Conde, expersonal civil del Batallón de Inteligencia 601 del Ejército Argentino y Carlos Mario Castellví, exoficial de la Armada, por ser considerados “coautores de los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada, imposición de tormentos agravados, homicidios agravados y sustracción, retención y ocultamiento de un menor de diez años en diferentes hechos”.
Por otro lado, se impusieron penas de 15 años para los ex suboficiales de la Armada Ramón Roque Zanabria, Jorge Luis Ocaranza, José Iturri y Carlos Néstor Carrillo, condenados por los mismos delitos que los anteriores, pero al ser partícipes secundarios su pena fue menor.
Por último, el Tribunal condenó a seis años (pena dada por cumplida) de prisión al exconscripto de la Armada Claudio Vallejos, a quien consideró “partícipe necesario del delito de privación ilegítima de la libertad agravada en un caso”.
En todos los casos la Justicia rechazó, entre otros planteos de las defensas, la nulidad por “violación del plazo razonable” ya que tuvo en cuenta que los hechos juzgados en el proceso "son constitutivos de crímenes de lesa humanidad" y que "por ende son imprescriptibles".