“Mutable”: primer disco del dúo Musso y Sehinkman
Gustavo Musso, saxofonista de Escalandrum y Esteban Sehinkman, tecladista de Pájaro de fuego y productor del Real Book Argentina, se unen por primera vez en este álbum para crear una atmósfera futurista sobre grandes clásicos del jazz. La mutabilidad es una condición natural de la música, en especial en el universo del jazz.
En este territorio, tanto la forma de interpretar un repertorio como la elección de los instrumentos para ejecutarlo, pueden cambiar a través del tiempo.
Los músicos se encuentran en este disco para recorrer a su manera las melodías, armonías y solos concebidos alguna vez por referentes absolutos del género como Duke Ellington, Charlie Parker, Miles Davis y Dizzy Gillespie, entre otros.
La ejecución del EWI (Electronic wind instrument) en los ágiles dedos de Musso, y los sintetizadores llenos de detalles de Sehinkman, se amalgaman para crear una atmósfera futurista, con vistas renovadas hacia las fuentes del jazz. La tecnología no es el único bastión de esta propuesta ya que los músicos también expresan ideas melódicas y armónicas propias, deconstruyendo obras que conocen desde hace décadas.
El recorrido del disco atraviesa versiones de “Caravan”, “A night in Tunisia” o “Cherokee”; algunas baladas como “In a sentimental mood” o “Blue in green”; clásicos como “Smile” (Chaplin) y “On the sunny side of the street”; y aproximaciones al bebop con temas emblemáticos como “Parker’s Mood”, “Donna Lee” (Parker) y “Oleo” de Sonny Rollins.
AGENCIA PACO URONDO: ¿Cómo surgió el proyecto de hacer el disco y cuál fue el puntapié inicial? ¿Querían reversionar clásicos del jazz y para eso usaron instrumentos electrónicos o por el contrario, los standards se volvieron el vehículo para experimentar esta sonoridad moderna?
Gustavo Musso: El proyecto surgió desde un acercamiento hacia un nuevo instrumento para mí, el EWI (Electronic Wind Instrument) con características similares al saxofón desde lo expresivo y la digitación, pero con sonidos de sintetizador. Después de trabajar durante un par de años con el EWI me pareció un buen momento para plasmar un material nuevo.
Obviamente Esteban, especialista en estos sonidos sintetizados, era la persona indicada para realizarlo. Ante mi propuesta y el sí, comenzamos a intercambiar melodías y armonías. Como punto de partida hicimos un tema de Charlie Parker, llamado “Parker’s Mood”. El resultado nos sorprendió y continuamos trabajando sobre más temas jazzísticos conocidos por los dos, y así fue surgiendo Mutable. En algún momento imaginamos introducir temas originales, pero nos pareció que eso podría ser una segunda etapa de este dúo.
Esteban Sehinkman: Continuando lo que cuenta Gustavo, empezó como un proyecto de verano, en contexto de pandemia y cuarentena, y terminó con el armado de un disco que resultó apasionante. Aprovechamos las características de la época para mejorar las condiciones de grabación a distancia, cada uno desde su estudio casero. Pasamos varios meses enviándonos archivos musicales por mail, ida y vuelta, hasta que se armaban los temas como queríamos. Después de hacer 3 o 4 temas enteros, se empezó a definir la estética “mutable” que caracteriza al álbum.
APU: Ambos tienen un recorrido y un desarrollo inmenso en la música. Esta propuesta de volver a los clásicos, desliza la idea de algo cíclico. Y haberlo hecho de una manera tan singular, tan arriesgada, sugiere algo así como un "volver para atrás, para ir hacia adelante". ¿Coinciden?
G.M.: En lo personal, los standars siempre son parte de mi gusto, además de mi práctica musical. Creo que existen versiones maravillosas, inmejorables de esta música. Tengo ya dos discos solistas reversionando este género, la única forma de continuar era con otra perspectiva más actual, y con completa libertad sonora. A la fecha de hoy no encontré ningún material de las características de Mutable. El género jazz propone una permanente libertad, que como punto de partida son sus melodías y armonías tradicionales.
E.S.: En mi caso, si bien soy muy cercano como intérprete y oyente a los standards y al jazz de todas las épocas, nunca antes había pensado en abordar y grabar un repertorio de estas características. La mayoría de mis discos contienen música original, es casi una declaración de principios. Hasta que apareció la propuesta de Gustavo, y fue una sorpresa, ya que encontramos la vuelta de tuerca necesaria para aproximarnos a este repertorio cuasi sagrado.
Mutable avanzó y se concretó -más allá de los temazos elegidos- gracias a la exploración tímbrica que encaramos. Allí fuimos encontrando paisajes sonoros novedosos, que nos motivaron a seguir construyendo este universo. Por otro lado y retomando tu pregunta, hay quienes dicen que el futuro está en la tradición.
APU: ¿Qué clásicos está dando la música del presente para abrir las puertas a nuevas versiones en el futuro?
G.M.: Creo que la música es un devenir constante. La esencia de la música como la de las artes es el bienestar. Las distintas formas musicales en las regiones darán distintos resultados. El ritmo principalmente tomó mucho protagonismo actualmente. Hay agrupaciones que solo tienen instrumentos de percusión. Creo que la evolución de estos parámetros va a dar una nueva música, que combinada con la música clásica y actual, más la inclusión de nuevos sonidos electrónicos, será lo que continúe hacia el futuro. Con estos elementos combinados no podría hablar de temas particulares sino de una nueva forma musical general.
E.S.: Por lo general, los músicos de jazz tienen un detector de standards del futuro. Pienso en músicos como Herbie Hancock tocando Nirvana, Brad Mehldau haciendo Radiohead, o Miles Davis versionando a Michael Jackson, cada uno en su época. Habrá que estar atentos y escuchar lo que sale de ahí para tener una respuesta certera.
El disco Mutable se puede escuchar en Youtube