Santiago Asorey: “Hay que construir puentes entre las distintas islas del peronismo”

Los periodistas Javier Perpiñan y Alberto Froilán del canal de streaming de Desmagnettizados entrevistaron a Santiago Asorey, uno de los editores de AGENCIA PACO URONDO. En este marco conversaron sobre la realidad actual del peronismo y reflexionaron sobre la historia del movimiento nacional.  

DES: ¿Después de la muerte de Juan Domingo Perón no hubo ningún dirigente que sea fiel a la doctrina del líder?

S.A:  Es difícil decir que en la década ganada no hubo doctrina. Un proceso industrialista, con la creación de cinco millones de puestos de trabajo. Ascenso social para amplios sectores de la población. Lo que habría que analizar es cómo fueron los últimos años de la experiencia del Frente de Todos que llevó a esta situación de crisis del peronismo.

Tiendo ver una situación de claroscuros en el peronismo. Por un lado, hay muchas discusiones interesantes de valorización de la obra de Juan Domingo Perón y por el otro una crisis del sistema de conducción.

La semana pasada ustedes entrevistarón a un compañero muy valioso que decía “el peronismo está muerto”. No coincido. El peronismo está en crisis y en un debate. Pero no me animaría a decir que está muerto el peronismo, de ninguna manera.

DES: ¿Cree que el progresismo se “comió” al peronismo?

S.A: En los últimos años se sobredimensionó una agenda que no era la agenda de las mayorías. Además, hay que agregar que en la pandemia hay algo que se quebró entre lo que un gobierno peronista debería hacer y lo que hizo. Un gobierno que decía ser peronista de la boca para afuera pero no tenía un concepto doctrinario.

Hay un ejemplo histórico que tal vez sirva para ilustrar. En el año 1997, el economista peronista Eduardo Curia escribió un libro muy interesante ¿El peronismo en crisis? En su texto Curia se oponía a la convertibilidad de Cavallo. En ese libro advierte la crisis de doctrina, de ese peronismo. En tanto la política económica de Menem no expresaba las banderas históricas del peronismo. Hay algo de esa discusión que vuelve una vez más, el peronismo ante una crisis de concepto de fondo.  

DES: ¿Cuál sería la parte esperanzadora?

S.A.: Hay un concepto de Perón que habla del autoperfeccionamiento del pueblo. Las organizaciones libres del pueblo pueden corregir sus errores y aprender del proceso histórico. En la historia del peronismo se ve continuamente. Por ejemplo, nosotros desde Agencia Paco Urondo, siempre reivindicamos al dirigente gremial José Ignacio Rucci. El primer dossier lo hicimos en 2011. Algo impensado en ese momento. Eso fue fruto de una comprensión histórica que nos precede, y viene del aprendizaje también con la militancia de los 80. Muchos compañeros nuestros fueron formados también por la experiencia que legaron los militantes de los 80 y 90.

La militancia de los 80 es poco reivindicada, siempre se habla de los 70. En los 80 era muy difícil porque la JP tenía que reconciliarse con los compañeros de la ortodoxia. Montoneros con los de Guardia de Hierro. Debían reconciliarse para pensar en una organización movimentista y eso existió en los 80.  El conocimiento se hereda, el pueblo y las organizaciones libres del pueblo toman ese aprendizaje. Eso nos da la posibilidad de que podemos corregir nuestros errores. Hay algo de las discusiones que tenemos hoy que tienen que ver con eso.

DES; ¿Cómo analiza el proceso de fragmentación del peronismo y los múltiples liderazgos?

S.A.: La organización vence al tiempo, tal vez sea un momento para plasmar una conducción colegiada, una mesa. No hay un solo liderazgo, sino que hay varios, me preocupa la atomización del peronismo. Parece que hablamos con lenguajes distintos los distintos militantes peronistas. Hay que ver como salimos de eso.

La tarea es dejar de señalarse entre compañeros, sino ser puentes entre distintos espacios del peronismo. Si yo digo “tal compañero es socialdemócrata” lo dejo en ese estante y no me sirve de nada. Lo estoy empujando hacia fuera.  

Mucho más interesante me parece el concepto de cuando Guillermo Moreno intenta peronizar a otros compañeros. Al final queremos un gran movimiento, no un círculo de peronista doctrinarios.