Morrissey: "Las Islas Malvinas pertenecen a Argentina"
En 26noticias.com.ar I Morrissey pasó por Córdoba y ante el público argentino declaró: "Las Islas Malvinas, todo el mundo sabe que pertenecen a la Argentina". Las declaraciones del inglés se sumaron a las de su colega Roger Waters.
“Escuchen, ustedes saben, por supuesto, sobre las Islas Malvinas. Todo el mundo sabe que pertenecen a la Argentina. Así que por favor no le echen la culpa a los británicos", dijo el artista de 52 años. Y fue más allá: "Nosotros (los ingleses) sabemos que las islas les pertenecen”, declaró ante la multitud. Fue ovacionado.
El músico tocó ante unas 3.000 personas en el Orfeo. Los medios de la provincia destacaron su show, “la pose altanera, ese sarcasmo innato, que se tradujo en un movimiento de cejas antes de arrebatar cada verso, el look sobrio y candente de camisas de vestir muy desprendidas”.
Pasadas las 21.30, una vez agotada la perfomance entre gótica y experimental de la telonera Kristeen Young, y luego de la proyección de unos cuantos videos de sus artistas favoritos sobre el telón, Morrissey subió a escena vestido con camisa negra de raso y jeans azules.
Los miembros de su banda, por su parte, lo hicieron levemente travestidos con corpiños negros, aunque el guitarrista Boz Boorer estaba travestido del todo. Esta vez, el solista y sus secuaces evitaron su habitual saludo en fila y se pusieron a rockear sin más. En primer término, no bien el vocalista lanzó un "socorro, socorro", sonó First of the gang to die, canción del disco renacentista You're the quarry, que sentó bases de la mejor forma para la alternancia entre clásicos solistas y otros tantos de The Smiths, el grupo con el que Morrissey alcanzó estatus de ícono de la provocación y el desencanto.
Con sonido aceptable, escenografía austera (apenas dos pantallas que proyectan la foto de tapa de sus Greatest hits; es decir, Morrissey con los ojos cerrados y bastante más joven) y una iluminación certera para acompañar climas, la lista equilibró, además, medios tiempos con temas más guitarreros. Entre los primeros brillaron Everyday is like sunday (gran momento del show), Let me kiss you, You have kill me, I'm throwing my arms around Paris; y entre los "más arriba" Black cloud y el ya citado tema de apertura. También hubo lugar para oscuridades y exotismos con Maladjusted y I will see you in far off places, respectivamente.
Los himnos de The Smiths fueron los que más se celebraron: There is a light that never goes out, I know it's over, Please, please, please, let me get what I want y How soon is now? que llegó sobre el cierre.