Táctica y estrategia para enfrentar a Milei
Comenzaré diciendo que según mi opinión, tenemos dos desafíos políticos imprescindibles si queremos ganar.
El primero es hacia dentro: terminar de alinear a los nuestros. Sindicatos, Gobernadores, Intendentes y empleados públicos en general, que van a ser los primeros perjudicados por el loco de la motosierra, deben dejar de dormir la siesta, dejar de rezongar contra el gobierno, y terminar con los dilemas ideo-sicológicos de los que van a “votar desgarrados”.
Hay que cortar con el discursos de los frustrados, indignados, enojados, y con las minorías intensas que piden de los candidatos autocríticas públicas e inmolaciones. Minorías intensas que vienen del progresismo de izquierda y la pretendida ortodoxia del morenismo.
En este sentido, nobleza obliga, aplaudo las palabras de Juan Grabois en el acto con Axel Kicillof: “Basta de boludeces. Massa no me cae simpático… y estoy poniendo la trucha diciendo que hay que votar a Massa!!! ….¡¡¡basta de pases de facturas y de boludeces, loco!!! ¡se acabó! la patria está en peligro!!! ¡¡¡se acabó el internismo!!! se acabaron las quejas!!! ¡yo el primero! ¡no tengo nada de qué quejarme!”
El segundo aspecto es nuestro mensaje hacia afuera, que tiene dos vertientes: una los electores de otras fuerzas: cordobesistas, provinciales, radicales, larretistas, etc. que no nos votaron en las Paso y probablemente tampoco lo hagan en octubre, pero si en un balotaje contra Milei.
La segunda vertiente y mas complicada de llegar es el votante y/o simpatizante de Milei que está fortalecido en su convicción de “destruir a la casta” y que cierto tipo de mensajes nuestros, no solo no le hacen mella, sino que los fortalecen.
La necesidad de una conducción amplia, sin sectarismos
Nuestro candidato ya lo viene diciendo de forma genérica: “vamos hacer un gobierno de unidad nacional”. Bien, hasta allí todos aplaudimos. El problema surge cuando tenemos que pasar de lo genérico a lo específico, e ir a convocar puntualmente a dirigentes de otros partidos.
Si me disculpan, voy a citar a Perón, porque si algo tuvo claro el Viejo, fue la necesidad de la unidad nacional.
Los siguientes son párrafos de su libro Conducción Política:
“Con sectarismo no hay conducción. El sectarismo es el primer enemigo de la conducción, porque la conducción es de sentido universalista, es amplia, y donde hay sectarismo se muere porque la conducción no tiene suficiente oxígeno para poder vivir.”
“No se pueden conducir los elementos sectarios. ¿Por qué? Porque cuando llega el momento en que la conducción debe echar mano a un recurso extraordinario, el sectario dice: "No; ¡ésa es una herejía para el sectario!"
“Entonces, los métodos y los recursos de lucha se reducen a un sector tan pequeño que presentan una enorme debilidad frente a otros más hábiles que utilizan todos los recursos que la situación les ofrece para la conducción. Por eso el sectarismo es la tumba de la conducción en el campo político.”
“La conducción es la lucha y el gobierno es construcción; pero en los dos prevalece esta misma regla, que ha de ser imperturbable, sobre todo cuando los hombres llegan a tener un gran poder y una gran autoridad. Algunos creen que gobernar o conducir es hacer siempre lo que uno quiere. Grave error. En el gobierno, para que uno pueda hacer el cincuenta por ciento de lo que uno quiere, ha de permitir que los demás hagan el otro cincuenta por ciento de lo que ellos quieren. Hay que tener la habilidad para que el cincuenta por ciento que le toque a uno sea lo fundamental. Los que son siempre amigos de hacer su voluntad terminan por no hacerla en manera alguna.”
Modelo Argentino, su testamento político, que conviene desempolvar
El 1 de mayo de 1974, Perón anunció lo que sería su testamento político: el Modelo Argentino para un Proyecto Nacional. Veamos algunas partes del mismo.
“El primer objetivo del Modelo argentino consiste en ofrecer un amplio ámbito de coincidencia para que, de una vez por todas, los argentinos clausuremos la discusión acerca de aquellos aspectos sobre los cuales ya deberíamos estar de acuerdo” .
“O profundizamos las coincidencias para emprender la formidable empresa de clarificar y edificar una gran Nación, o continuamos paralizados en una absurda intolerancia que nos conducirá a una definitiva frustración.”
“Los sectarismos no nos conducirán jamás a la liberación. (…) Encerrarnos en nuestras ideas
y procurar imponerlas por el peso de una fuerza circunstancial, significaría caer en el mismo error por el que han transitado aquéllos a quienes hoy enfrentamos”
“Alguna vez prediqué la armonía como categoría fundamental de la existencia humana; sigo creyendo en ella como condición inalienable para la configuración de la Argentina que todos anhelamos. Esa básica consonancia excluye la violencia e implica comprender que el único camino para la construcción fértil es partir de ideas, valores y principios, cuya práctica concreta no cercene el cauce de la paz.”
La convocatoria a la unidad nacional
Creo que hasta este punto estamos todos de acuerdo. Porque muchos suponen que convocar a la unidad nacional, es volver a juntar la CTA con la CGT, el PJ, el partido de la Victoria, La Cámpora, el Evita y algún partido provincial. No…, no es solamente eso. Todos juntos somos hoy el 28 o 30 %.
Se trata de convocar a quienes hasta hoy mismo, no nos quieren, y votan a otras fuerzas. Y esto ya es más difícil y más indigesto para muchos nuestros. Vuelvo a uno de los tantos ejemplos de la historia del peronismo.
Vicente Solano Lima, del 47 al 55 estuvo exiliado en Montevideo, por opositor a Perón. Cuando regresó justificó el bombardeo a Plaza de Mayo y se sumó a la “libertadora”. Sin embargo en 1973 - por decisión de Perón - Solano Lima, va a acompañar a Campora en la fórmula del Frejuli. Este es uno de los ejemplos de la amplitud de Perón, cuando se trataba de construir mayorías.
Ya hay algunas señales de dirigentes importantes de JxC que ven con espanto la posibilidad de que gane Milei.
Uno de los primeros en manifestarlo fue el Gobernador de Jujuy, Gerardo Morales. Ante el posible acercamiento Bullrich-Milei el 19 de junio pasado se manifestó en contra de cualquier acercamiento con el libertario y apuntó contra la ex-ministra de Seguridad: "Espero que no estén negociando la ley de venta de órganos", sentenció. El 19 de agosto dijo “Para algunos que andan pensando en privatizar la escuela pública… Cuidado. Se viene eso si gana alguna opción que ha ganado la elección en la provincia y a nivel nacional.” . También dijo que Milei, “es un desquiciado y tiene alma de dictador”. Con estas declaraciones, sería poco probable que Morales llame a votar a Milei en un balotaje.
Otro dirigente, no muy apreciado de este lado, Julio Cobos, dijo que “tendría que pensar mucho si el balotaje es entre Massa y Milei”. También se esta rebelando ante la idea de Macri de apoyar en la segunda vuelta a Milei.
El más reciente fue el armador de JxC Emilio Monzó, pidió un gobierno de unidad nacional luego de las elecciones: "Nos tenemos que juntar 10 figuras políticas y a partir del 10 de diciembre acompañar a quien gobierna". Y dejó implícito que en el balotaje votaría a Massa.
Consideremos que todavía no pasó octubre. Está la elección de Provincia de Buenos Aires de por medio, y radicales y larretistas, no pueden por prudencia, salir a decir “voto a Massa”. Pero, es muy interesante que ya estén dando este tipo de señales.
De nuestro lado, Sergio viene convocando a “un gobierno de unidad nacional. Y Axel esta semana dio un paso interesante, cuando inauguró un Ateneo Raúl Alfonsin.
Ahora bien. Cuando Axel o Sergio intenten reunirse a charlar con alguno de ellos, van aparecer los sectarios nuestros. Como dice Perón: “cuando llega el momento en que la conducción debe echar mano a un recurso extraordinario, el sectario dice: "No; ¡ésa es una herejía!” .
No tengo claro de que modo, se podrá plantear un acuerdo de este tipo. ¿Como, cuando, con quien?, serán definiciones que deberá tomar la conducción de la campaña. Pero, ya vamos a tener dos resultados electorales de por medio y mas claridad de los números de cada fuerza.
La objeción obvia a un acuerdo de esta naturaleza, es que Milei reforzará su discurso “anti-casta” agitando “allí los tienen, toda la casta junta en contra nuestro”.
Pero bueno, arrancando con un 30%, en suposición que Bullrich sale tercera, lo lógico es que Bullrich junto a Macri, terminen acordando votar a Milei. A nosotros, no nos quedan muchas mas opciones que buscar los votos del cordobesismo, de los radicales espantados y de los Pro-anti Milei.
Los votos en blanco, son votos enojados y es más probable que vayan a Milei. Los que no fueron a votar, generalmente votan parecido a los resultados de las Paso. Obvio que hay que ir a buscarlos y darle la boleta. Pero...eso no nos asegura una masa critica para ganar.
Claro, que estamos jodidos. Eso lo sabemos. La situación macro-económica que no pudimos controlar en los dos últimos años, no la vamos a poder resolver por arte de magia en dos meses. Pero se puede ganar. Tenemos el mejor candidato de los tres. Y además Sergio Massa una enorme vocación de vencer. El “deber de vencer” del que habla Perón en Conducción Política: “Debe crearse lo que yo llamo el deber de vencer, que va acompañado con la abnegación del individuo. El deber de vencer es indispensable en la conducción. Aquel conductor que no sienta el deber de vencer, difícilmente va a vencer en ninguna acción. Vale decir, que es un hombre decidido a vencer. Si no vence, debe saber soportar virilmente los golpes del destino.” Y Sergio Massa ha demostrado ya varias veces su vocación de dar pelea hasta el final.
Bueno, en mi próxima nota abordaré el tema mas complejo, como dar la lucha política con Milei y su masa votante. Como anticipo, recomiendo leer el reportaje a Esther Solano en Seul, investigadora radicada en Brasil que cuenta la campaña de Lula contra Bolsonaro y la charla de la licenciada Mariana Moyano, quien más sabe del fenómeno de los libertarios en Argentina y que lamentablemente no ha tenido espacio en la prensa nuestra.