"Intervenir sobre las violencias es intervenir en la relación con el capital"

Por Redacción APU

Laura Sotelo, Jordana Secondi, Gabriela Carpineti son militantes sindicales. Intercalan su labor como delegadas con una militancia extra-gremial acompañando causas de violencia institucional en el marco de dispositivos de contención y acompañamiento con anclaje territorial, por ejemplo, el Bajo Flores y la villa 21.24.

De esa experiencia, proponen re-pensar concepciones sobre el sindicalismo y las prácticas mismas del mundo sindical, incorporando la dimensión de la lucha contra las violencias en los marcos del capitalismo.

Agencia Paco Urondo: ¿El hecho de ser trabajadoras docentes otorga una especial sensibilidad frente a casos de violencia institucional y su acompañamiento?

Jordana Secondi: Las escuelas se van constituyendo en espacios de referencia que se permiten ser sensibles a estas cosas y vehiculizar demandas. Las escuelas muchas veces son el espacio de resonancia de los reclamos.

APU: Concretamente, ¿Cómo acompañan los sindicatos esto?

Gabriela Carpineti: UTE y ATE están tomando la tarea de visibilizar la violencia institucional y ofrecer respuestas concretas a eso, a través de los compañeros y compañeras que están cotidianamente en el territorio. No es algo que se decida en una comisión directiva del sindicato y sólo después de eso se haga. Hay una generación de militantes sindicales que entienden que el sindicato es lo que se hace todos los días en los ámbitos de trabajo y organización cotidiana.  Esa es la mejor forma de apropiarse de las herramientas gremiales y reconstruir vínculos hacia adentro y hacia afuera de las organizaciones.

APU: ¿Es una forma de como se piensa lo gremial?

Jordana Secondi: Tiene que ver con cómo se piensa el sindicato. Si es una entelequia o lo construimos todos con las personas que nos vinculamos, los temas que discutimos. Tiene que ver con pensar a los sindicatos con otras dinámicas posibles.

Laura Sotelo: Si también dialogando ahí con las formas de producción del capital, y los sujetos históricos. Los trabajadores y las trabajadoras tenemos una misión histórica de disputar la relación con el capital. Dentro del montón de urgencias, productos de las violencias y los deshechos generados por el sistema capitalista, es donde surgen nuevos sujetos como la mujer que toman la palabra en la lucha.

APU: ¿Cómo piensan esta actuación por fuera de lo gremial?

Gabriela Carpineti: Una antropóloga argentina que vive en Brasil, Rita Segato, habla de la pedagogía de la crueldad. Sostiene que en la actual fase del capitalismo, hay que poder analizar y visibilizar la práctica de la crueldad. En ese sentido, la necesidad de niveles de explotación humana y laboral para garantizar tasas de rentabilidad altas y garantizar el proceso de acumulación de la riqueza, obliga a tener que vincular las violencias imperantes y a circunscribirlas en ese marco.

De esta manera, tanto la violencia de género como la violencia de los Estados son funcionales a la necesidad del capitalismo para reproducirse. Entonces, ¿Por qué es importante que los sindicatos intervengan en las violencias? Porque es intervenir en la discusión económica, en la relación con el capital.

APU: ¿Hay conciencia sobre esta problemática en el mundo sindical en general?

Jordana Secondi: Hay un proceso de construcción. Hay círculos más herméticos a permitirse a pensar otras cosas. En la medida que cada uno se deja atravesar por la realidad que el otro trae, es posible pensar cambios. Se trata de construir una conciencia colectiva.: