"La trata laboral es una práctica muy extendida en las patronales del campo"
Por Nahuel Placanica
AGENCIA PACO URONDO: ¿Cuál es el objetivo por el cual se creó Renatea?
Guillermo Martini: Es una creación de la ley 26727, nuevo Estatuto del Peón Rural. Surge para reemplazar al Renatre, que era un organismo público de derecho privado que manejaban el Momo Venegas con la Mesa de Enlace, que tenía como objetivos la capacitación y la registración de trabajadores. Lo que hace la ley es convertir ese organismo privado en público. Que se rige de acuerdo a la norma del derecho público. Recupera la potestad del Estado de intervenir en el control del trabajo informal en el marco del empleo rural que es el más precario por varios motivos: dispersión, usos y costumbres, temporalidad del trabajo, etc.
APU: ¿Qué balance hacen de este tiempo de gestión?
GM: Muy positivo. Logramos armar una estructura nacional con cerca de 700 trabajadores. El Renatre tenía 200 empleados. Pero se movía con 5 sociedades anónimas que hacían diferentes tareas. Logramos cosas importantes: instalarnos a nivel nacional, ganarnos la confianza de los trabajadores. Recibimos 20 denuncias por día. Nosotros buscamos trabajadores no registrados y nos hacemos cargo de la calidad de vida de los trabajadores. También nos ocupamos de trata de personas y de casos que puedan incluir trabajo infantil o adolescente.
APU: En el caso de trata de personas: ¿Qué característica tiene en el sector rural?
GM: Está muy extendida. La patronal tiene el concepto de que el trabajador no lo es. Por eso puede dormir en cualquier lado, comer en cualquier lado, se le puede cobrar la comida. Hablamos de trata cuando el trabajador no tiene ningún tipo de defensa respecto a promesas que le hicieron. Los llevan a lugares sin saber dónde está, además le retienen la documentación, con lo cual no se puede ir si así lo desea. No puede elegir irse si así lo quiere. Muchas veces, incluso, queda con deudas con el empleador. Para nosotros es trata cuando un trabajador no tiene plata en el bolsillo. Si no la tiene en Capital Federal, no pasa nada. Si estás en el medio del monte no te podés mover de donde estás. Dependés de tu empleador. Y la trata está penada por la ley. Nosotros denunciamos esos casos ante la Justicia.
APU: ¿Cómo se evita que una persona que ustedes “liberan” de la situación de trata no vuelva a caer en la misma situación?
GM: Hay muchos casos donde eso ocurre. A diferencia de la trata sexual, la trata laboral es una costumbre arraigada en la práctica patronal. No es que se secuestran personas y se las lleva de un lado a otro. Es una generalidad. Trabajamos con mucha firmeza en esos casos. Hemos logrado que la Justicia castigara por primera vez a un empresario mendocino por trata laboral. Tenía en esa condición a 14 trabajadores tucumanos. Después logramos que esos trabajadores tuvieran un empleo registrado.
APU: ¿Cómo son los procedimientos de inspección?
GM: Tenemos poder de policía. Podemos entrar a los lugares de trabajo sin necesidad de orden judicial. Por supuesto, no podemos romper un candado. Muchas veces nosotros llegamos a partir de denuncias de los propios trabajadores. En esos casos, vamos junto a otras áreas del Estado. Después hacemos operativos permanentes.
APU: ¿Cuál es la situación del trabajo infantil?
GM: Es otra práctica totalmente extendida en la patronal. En los últimos meses hemos encontrado 50 casos de trabajo infantil en 20 inspecciones. Más de un caso por inspección. El trabajo infantil está penado por la ley.
APU: ¿Han encontrado colaboración del gremio UATRE?
GM: En muchos lugares combinamos con las seccionales locales. Hay casos donde trabajamos perfectamente, como es el caso de las provincias del norte. Después, no tenemos ninguna relación y no la queremos tener, con la conducción nacional de la UATRE, partiendo de la base que el gremio sostiene que no es su tarea combatir el trabajo no registrado. O teniendo en cuenta que dice que el trabajo infantil es una costumbre en el campo. No hay punto de contacto con la conducción del gremio.