Los medicamentos aumentaron un 257 por ciento desde 2015
Los precios de los medicamentos subieron un 257 por ciento entre mayo de 2015 y febrero de 2019. En el caso de los más consumidos por los jubilados, como los que se recetan para tratar la hipertensión y otras afecciones cardiovasculares, los aumentos acumulan más del 540 por ciento. En cambio, la jubilación mínima tuvo en el mismo período una recomposición de sólo el 172 por ciento.
Los datos figuran en un informe realizado por el Centro de Economía Política (CEPA), el Centro de Estudios Políticos para adultos mayores (Ceppema) y la Asociación Latinoamericana de Gerontología Comunitaria (Algec), que pone el foco en el impacto de la inflación sobre remedios esenciales para las personas mayores de 60 años.
A este terrible escenario de aumentos, se suma que el gobierno de Mauricio Macri les restringió la cobertura del PAMI. Hoy, para tener la cobertura del 100 por ciento de PAMI en los medicamentos, es necesario reunir lo que los autores del informe llaman “condiciones extremadamente extraordinarias”, como ingresos inferiores a 1,5 haberes previsionales mínimos, no estar afiliado a un sistema de medicina prepaga, no ser dueño de más de un inmueble ni tener un vehículo de menos de diez años de antigüedad.
Entre los aumentos acumulados desde mayo de 2015 a hoy, se destacan los del Atenolol y el Sintrom, con aumentos de 560 por ciento. Ambos son medicamentos esenciales para tratar enfermedades cardiovasculares. En la Argentina, las enfermedades crónicas no transmisibles son la razón de más del 70 por ciento de las muertes, según los datos oficiales del Ministerio de Salud de la Nación. Dentro de ese grupo, las afecciones cardiovasculares son la principal causa de mortalidad para la población general; lo mismo pasa entre los mayores de 65.
“Al quitar el PAMI y el Remediar, la limitación de la entrega gratuita de medicamentos puso en grave riesgo no sólo la salud de las personas mayores, sino también la calidad de vida de aquellas que presentan patologías crónicas”, advierten los investigadores en su informe.
La pérdida del poder de compra de las jubilaciones también es grave en relación con el elemento más básico para la salud, el del una buena alimentación. Entre diciembre de 2015 y febrero de 2019, es decir bajo el gobierno de Mauricio Macri, la inflación acumulada de la canasta nutricional fue del 311 por ciento (cabe recordar que el haber mínimo fue recompuesto en sólo el 172 por ciento).