Eric Calcagno: estado paralelo y mafia judicial
Eric Calcagno, sociólogo, ex senador nacional y ex embajador en Francia, analizó en díalogo con AGENCIA PACO URONDO la reciente condena a CFK y las implicancias en el futuro próximo.
Agencia Paco Urondo: ¿Cuáles son las primeras consideraciones que pueden hacerse sobre el fallo de la justicia contra CFK en la denominada "Causa Vialidad?
Eric Calcagno: El lugar que antes ocupaba el partido militar mediante los golpes de estado de 1930 de 1955, la sazonadas del 62 y del 66, el golpe de Estado del 76, ahora lo hace del partido judicial del mismo modo que se enviaban durante decenios a militares sudamericanos a estudiar en la Escuela de las Américas torturas, desapariciones, etcétera, es decir, demasiado tiempo también se ha mandado a jueces latinoamericanos a Estados Unidos, a Miami, a aprender justamente proscripción de líderes populares, inventos de causas. Bueno es lo que se llama Lawfer que no es más que la persecución política con manto jurídico.
Recuerdo que había una especie de truco para averiguar los días de golpe de Estado que era el titular, un titular de la 5ta de "La Razón", que era se agrava la situación y entonces no sé si eso es un mito urbano, pero recuerdo que con mi familia vivíamos en La Plata, entonces siempre estaba eso de que uno ya venía a venir el golpe, porque el golpe de Estado -el cívico militar- nunca se da de un día para otro. El diario "El día" era justamente el del día después de se agrava la situación y se agrava la situación.
Entonces esto es extremadamente grave porque están condenando a Cristina Fernández de Kirchner sin pruebas, y ahí está lo complicado del debate porque uno puede decir, sí es culpable porque tal cosa, culpable porque tal otra, pero acá se condena a una persona sin pruebas, por lo tanto, lo que se está marcando es el poder que yo tengo como clase judicial, como parte del establecimiento en su faz jurídica. Yo te puedo condenar a vos aunque no tenga pruebas y todos los que siguieron el proceso que se le hizo CFK y a otros, pudieron ver cómo la defensa desarmó y destruyó cada uno de las acusaciones que eran realmente inconsistentes y ahora escucho que "ah no porque es fraude la administración pública", ¿Pero como? Sí las obras de Santa Cruz fueron votadas por el presupuesto, si los propios técnicos que pidió la acusación dijeron que se habían hecho las obras, es decir, que acá está claro que lo que nosotros estamos haciendo es bajo la apariencia de una medida judicial en el clímax de una persecución política... hace tres meses quisieron matarla.
Esto es periodismo de guerra. Esto es jueces de guerra. Esto es diputados de guerra, con lo que pasó en en las cámaras en Buenos Aires esto es, Intento de asesinato, digo, no nos habrán declarado la guerra y no nos dimos cuenta de puro mogocitos que somos, ¿por qué en el fondo qué es Cristina? Cristina por supuesto es una persona, es una mujer de Estado: dos veces Presidenta, una carrera parlamentaria ejemplar, pero también es un símbolo.
Hay muchas cosas que no están bien, pero Cristina como símbolo es la posibilidad de que esas cosas mejoren y es precisamente por eso que debe ser atacada y destruida, como hicieron las clases dominantes con los federales, con los indios, con los paraguayos, con los radicales en el 30, con los peronistas siempre, con los sindicalistas, con los estudiantes; es decir, nosotros vemos que hay una voluntad por mantener un modelo económico que se impone a sangre y fuego ya desde 1976, que es injusto, que se lleva a nuestras riquezas, que nos impone la deuda externa, pero que además no funciona. Es incapaz de reproducirse en el tiempo, omeostasis se llama la posibilidad que tienen los organismos de reproducirse en el tiempo y resulta que nos quieren poner un modelo económico basado en la herramienta externo, basado en el movimiento externo, basado en la desigualdad, pero que se cae constantemente. Entonces la única manera de que eso siga es que no haya alternativas -como decía Tatcher y los adoradores locales de Tatcher- lo que quiere es que no haya alternativas y Cristina representa precisamente esa alternativa, por eso, Cristina no debe ser para que ellos sí puedan ser y ese me parece que es el debate que estamos diciendo, esto no es un discurso de odio, esto no son haters. Esto es un discurso de poder. Es un discurso de clase, recordemos la frase de Rodolfo Walsh: cuando la oligarquía dice patria quiere decir clase, lo vimos en la Patagonia Rebelde, en ese episodio de 1922. Entonces, me parece que si nosotros logramos articular el pensamiento para entender de lo que estamos hablando, vamos a ver que tenemos que superar la cuestión esta de que el amor vence al odio, porque solo la organización vence al odio.
APU: ¿Cuándo en la historia comienzan a detectarse estos de la justicia como estado paralelo?
EC: No es una novedad, a principio del siglo XX, un profesor de un jurista francés -no recuerdo su nombre en este momento- hizo un célebre estudio sobre la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos, a fin del siglo XIX, mostrando como cada vez que había algún presidente de norteamericano que quería poner alguna reforma social o cada vez que el Congreso, el Senado norteamericano, votaban leyes favorables a los trabajadores, siempre la Corte Suprema decía que eran inconstitucionales. Es decir, esta teoría del gobierno de los jueces es una perversión de la administración de justicia, pero está basada sobre una simbología también, muy poderosa que es confundir a la justicia, que es un valor con la administración de justicia que es una función.
Entonces esta gente que salió a decir que Cristina tiene que ir seis años presa y que no puede presentarse a ningún cargo, en realidad, lo que hace es meterse en un lugar donde el Poder Judicial no debe meterse pero eso lo hicieron con el acuerdo que iba a hacer se con Irán, lo que le costó la vida a Timerman y los tratados internacionales no son justiciables, este gobierno de los jueces también lo tuvo que enfrentar Roosevelt en 1930 en los Estados Unidos cuando quiso hacer el New Deal y la Corte Suprema de Estados Unidos decía que no.
Ese problema, tuvo que enfrentarlo Perón, en 1946 cuando quiso llevar adelante su proyecto político y acorde con las reglas y las normas estableció otra Corte de Justicia. Ese problema tuvo Néstor Kirchner con la Corte que le quería de especificar y revalorizar la economía y, sin ,se pudo hacer otra Corte.
Es cierto que tiene que haber una dinámica y un equilibrio entre los tres poderes: ejecutivo, legislativo y judicial, ¡pero cuidado! que cuando los jueces empiezan a interpretar las normas, las leyes que hacen otros, es decir, esto sí puede ser legal, esto no es legal, es muy posible que no estén designando la República sino sus intereses económicos, sus intereses de sector y cuando un sector, una parte del pueblo argentino, una parte de la sociedad argentina se toma por el todo se llama sedición.
APU: ¿Podemos hablar de proscripción al partido mayoritario, el peronismo, por parte de la Justicia?
EC: Sí, pero no es nuevo, por el Decreto 4161 la dictadura prohibió el peronismo y 17 años después volvió Perón. Debería haber un poquito de historia, deberían despreciar menos el país que intentan gobernar y nosotros tenemos que estar como hacen ustedes siempre alertas, movilizados, pensantes, sintientes en que lo que está sucediendo no es más que una parte más, un capítulo más de la historia argentina en la que por cierto no siempre ganan los malos, no siempre gana los que se apropian de la riqueza nacional y la fugan, los que nos dejan deuda externa, los que nos dejan pobreza y los que nos dejan desigualdad.
A veces la Argentina ha sabido tener gobiernos que le han representado con mucho valor y con mucho nivel y no, no siempre fueron peronistas, pero en este caso, me parece que acá está claro que es una apuesta fuera de la ley por parte de un poder que él mismo paga una sección del Poder Judicial que él mismo se ha puesto fuera de la ley, por eso el TOF ha entrado, ha dejado la legalidad republicana.
Arturo Sampay decía, después de Ferdinand Lassalle, jurista alemán, que están las constituciones formales y las constituciones reales, las constituciones reales son las que establecen cuáles son los verdaderos factores de poder. Entonces acá claramente los medios hegemónicos, el capital local en las empresas de servicios públicos, monopólicas, el capital extranjero en las empresas monopólicas extractivas o en el tema de la agronegocio los puertos privados, etcétera. Bueno, ese es el poder de Argentina lo que nosotros acabamos de escuchar es el proyecto que tiene el poder real para nosotros, el asunto es si lo vamos a aceptar y si no lo vamos a aceptar como nos vamos a preparar para efectivamente recuperar la Argentina para los argentinos y para Sudamérica, y para el mundo si es necesario. pero lo que también es cierto, es que ya frente a la amenaza de vida -que fue ese atentado- que si esa bala hubiera salido entrabamos en guerra civil, y no pasó nada, como si fueran cuatro o cinco personas dementes sin investigación.
Cuidado, porque cuando los poderosos empiezan a violar las leyes que ellos mismos han fijado, ahí las constituciones reales tienden a modificarse. Obviamente Cristina Fernández de Kirchner es hoy nuestra líder del Movimiento Nacional sea cual sea, la corriente de opinión o la línea interna, la cual uno puede adquirir, no hay espacio ni motivos para discutir su liderazgo. Creo que tiene que ser nuestra candidata para el 2023, si ella quiere, si lo desea porque después de todo, aunque no parece es humana y que en nosotros también tiene que poder descansar un poco de su trabajo. Pero la proscriben a Cristina y nos proscriben a todos, yo no me veo votando otro partido que nos lleve como candidata Cristina Fernández.
APU: ¿Cuál es tu análisis de la propuesta de una reforma judicial? ¿Debe ser el paso siguiente?
EC: No puede haber una reforma judicial sin una reforma de todo lo demás, de la vida nacional. Cuando Néstor Kirchner hace la política de derechos humanos que lleva adelante, esa política de derechos humanos es consistente con la política económica que lleva adelante, esa política económica es consistente con la negociación con el Fondo Monetario Internacional y esto con la distribución del ingreso, la reapertura de paritarias, la recuperación de una política internacional independiente, así que no es una reforma de la justicia que tenemos que hacer ahora si queremos hacer una reforma de la justicia, no nos olvidemos que primero tenemos que modificar la cantidad de jueces de la Corte Suprema porque de lo contrario por más que hagamos la mejor reforma posible que es lo que se hizo en el segundo mandato de Cristina... la misma Corte Suprema la va a declarar inconstitucional.
Entonces si nosotros queremos obtener un resultado tenemos que construirlo. Para mí: 24 jueces supremos, jueces y juezas obviamente paridad de género, uno por provincia y entonces ahí también, además, vamos a poder ser federales. Tenemos que a los interrogantes que nos plantea el establishment, mediante los problemas que nos tira nosotros tenemos que contestarles desde el lado nacional buscando siempre superarlos, lo que hacía Néstor: duplicaba siempre la apuesta. ¿Por qué? Porque quizás no tenía nada que perder... han proscribido a Cristina: ¿Que tenemos para perder hoy?
APU: Nuevamente los medios hegemónicos son un arite fundamental en la condena a CFK, junto con la justicia. ¿Cuál debe ser la respuesta del Campo Nacional y Popular?
EC: ¿Qué hay que hacer contra los medios hegemónicos? Ser mejores que ellos, no es muy difícil. Faltan recursos eso sí, y eso es importante, pero no creen ustedes que la agencia Paco Urondo no puede ser una buena o una excelente agencia de comunicación local nacional e internacional; Tiempo Argentino que es autogestivo no puede ser también un buen diario, todas esas redes, todos esos blogs que existen, todos esos diarios de los pueblos, también representan, todas las cooperativas de cable que todavía existen y que no han sido fagocitados por el Grupo Clarín.
No hay que inventar nada, hay que darle bola, darle fondos, no para que vivan de la pauta sino porque gracias a esa inversión si puedan desarrollar plenamente su personalidad y su propuesta y entonces ahí veremos qué prefiere el consumidor, al cual nosotros, llamaremos ciudadano. Si prefiere esas noticias prefabricadas que vienen de afuera o si prefiere ver en las agencias como la de ustedes y muchas otras más, los colores del pueblo con los colores de su aldea. Nosotros no somos una reserva, tenemos espíritu, creatividad, juventud y buenas ideas. No somos clarines, no queremos ser Clarín y no le tenemos miedo a Clarín.
APU: ¿Siempre hubo Lawfare?
EC: Y pasó con Sócrates que lo juzgaron en Atenas porque lo acusaban de corromper a la juventud con sus preguntas, lo acusaron de corrupción y le hicieron tomar la cicuta. ¿Y eso no era Lawfer?, ¿No fue Lawfer la crucificación de Jesús?
¿No fue Lawfer toda la quema de brujas que hubo durante el Renacimiento?
El Lawfer, no es más que la dimensión jurídica que se le quiere dar a determinado poder, porque la rotación de dominación está compuesta de dos cosas: la violencia y el consentimiento, entonces yo necesito que el poder que se ejerce sobre la sociedad tenga suficiente violencia como para que me obedezcan y suficiente consentimiento como para que crean que yo voy a tener esa violencia todo el tiempo, es el esquema de los poderes coloniales. ¿Qué más lawfer que ese? Que decir que hay personas superiores a otras. Entonces el lawfer o la guerra jurídica, nos la han declarado. Por lo tanto deberíamos pensar un poquito esta cuestión del lawfer, de la guerra judicial, que es también una construcción simbólica.