"El ejercicio de un privilegio": las disculpas de Verbitsky por ser un "vacunado VIP"
Por Enrique de la Calle
El periodista y referente de los derechos humanos Horacio Verbitsky pidió disculpas luego de haber recibido de favor una vacuna contra el COVID en el ministerio de Salud, que conducía Ginés González García, y haberlo contado en una columna radial de modo jocoso. "Fue un error grave, del que me arrepiento, y por el que pido disculpas. Asumo sin excusas la parte que me toca y acepto todas las críticas recibidas", escribió en el portal que dirige, El Cohete a la Luna.
"Si lo hice y, sobre todo, si luego lo conté sin que nadie me lo preguntara, es porque no advertí que fuera algo incorrecto, el ejercicio de un privilegio", describió Verbitsky.
Su relato sobre cómo se vacunó luego de recibir un favor de de González García generó un verdadero escándalo que puso la lupa sobre la posible existencia de un "vacunatorio VIP", destinado a conocidos del ex ministro. El presidente Alberto Fernández echó a Ginés por el hecho ni bien se conoció la declaración radial de Verbitsky. "Lamento tomar esta decisión pero es un hecho inaceptable", aseguró el mandatario.
Por ahora, no hay mayores precisiones sobre quiénes recibieron la vacuna de favor, pero trascendieron los nombres de algunos empresarios como Florencio Aldrey Iglesias (es un hombre muy poderoso en Mar del Plata) y sus familiares, Lourdes y Dolores Noya Aldrey, Seza Manukian, Félix Guille y uno de los CEO de Clarín, José Aranda.
Además de esos empresarios, también fueron vacunados en el ministerio de Salud los legisladores nacionales kirchneristas Jorge Taiana y Eduardo Valdés, quienes aseguraron que recibieron la Sputnik V porque debían participar de un viaje junto al presidente. Más allá de esas explicaciones, Fernández bajó del avión a los dos dirigentes peronistas.
"Habrá quienes duden, porque a lo largo de tantos años se fue estructurando un estereotipo sobre mí que excluye actos ingenuos o simplemente estúpidos. Se presume que siempre actúo en forma racional y se buscan motivaciones ocultas, que en este caso han llegado a extremos delirantes, como que fue un regalo de cumpleaños a Cristina, para que el gobierno se desembarazara de Ginés", siguió Verbitsky en el texto con el que decidió explicar su participación en el escándalo público, que golpea sobre la política sanitaria del gobierno nacional en medio de una pandemia sin precedentes.
Y concluyó: "Pero nada de eso me justifica. Por el contrario, debilita mi reclamo de un trato igualitario y de cuidado especial a los más vulnerables. Lo más decente que se me ocurre es reconocerlo y pedir perdón".