"Escupida de fernet": la historia del punk cordobés
Por Facundo Vidal
Escupida de fernet es un libro escrito durante la pandemia del año pasado, nació casi gracias a la cuarentena del 2020. Estaba buscando unas cosas en casa (vivo en Posadas, Misiones hace casi cinco años) y me encontré una caja llena de cassettes con producciones independientes y también varios TDK grabados con entrevistas a grupos. En el año 2004 había empezado a armar una especie de fanzine sobre punk en Córdoba y había entrevistado a algunos de los integrantes de Los Viejos Putos -la primer banda punk de La Docta-. Del fanzine ese salieron dos números y cincuenta ejemplares fotocopiados de las que no me quedó ni una solo. Darío Peralta, de Los Bastardos, fue una gran fuente de información en esa primera etapa para lo que fue el prototipo de lo que años más tarde sería el libro. Luego la computadora donde tenía los archivos se me averió y todo quedó en la nada, nuevamente.
Los cassettes con las entrevistas quedaron ahí, guardados, pero resistiendo las mudanzas. Y cuando los encontré me pareció que podía estar bueno hacer un libro (con 37 años, ya estaba viejo para sacar fanzines) y comencé a ponerme en contacto con personas que habían formado parte del punk en Córdoba desde el comienzo y que antes no había tenido la oportunidad de entrevistar.
No solo cuento sobre los grupos cordobeses, sino también sobre las primeras visitas de grupos de punk rock de Buenos Aires, como Flema, Attaque 77, 2 Minutos, Fun People, Charlie Brown, Bulldog, Katarro Vandaliko, y varios más. Y de grupos internacionales como: Marky Ramone, U.k. Subs, Gatillazo, Dead Kennedys. Hay reseñas de discos de grupos, afiches, folletos, fotos, anécdotas, también cuenta con dibujos realizados por Lautaro Vidal (Tripodibujitos) quien se encargó de graficar algunas situaciones. Estoy muy conforme con cómo quedó.
Muchos de los que fuimos punkies de provincia, ya hemos crecido, pero el punk te va a perseguir siempre. Se convierte en una rebeldía inteligente, en un plan de cuestionar lo establecido y promover el pensamiento crítico. Yo defino a tres tipos de padres: los biológicos, los simbólicos y los culturales, y a estos dos últimos los relaciono con el punk. Los simbólicos representaban la revolución, la rebeldía; y los culturales el concepto del hazlo tu mismo. Si yo me quedara tan solo con lo que aprendí en la escuela, en la facultad, etc., sería un hombre gen. Por suerte pude acceder a fanzines, a bandas y sus letras que buscaban una apertura mental en los oyentes, contracultural. Siempre digo que es de celebrar que hayamos tenido en Argentina a un tipo como Nekro de FUN People y Boom Boom Kid, porque él venía concientizando sobre temas de los que no se hablaban, como por ejemplo el aborto legal, el veganismo, el cuidado del agua, etc. Sin ellos (me refiero a estos padres culturales del punk) habría quedado muy poco de mí, si tan solo reviera lo que aprendí en el colegio o universidad. Y al no future, lo interpreto como el goce instantáneo, es hoy. Me hace acordar a cuando iba a ver grupos y durante esas horas allí adentro, saltás, gritás, te emocionás. Afuera el mundo seguía con sus mierdas, pero al gozar del punk de un modo instantáneo, cuando salías te acogotaba menos.
Presentación
El 24 de abril pasado se realizó la presentación oficial del libro. Ocurrió en Bicicleta Bar, en la ciudad de Córdoba. No pude viajar pero estuve por streaming un ratito. Igual, lo mejor de todo fue que hubo representantes de la movida punk cordobesa de todas las épocas: oradores de los años 80, de los 90 y también de las bandas a partir del 2000. Fue una gran ampliación de información, de anécdotas, hasta hubo una exposición de folletos, fotos, afiches de todas las etapas. Salió todo bárbaro gracias a Tokarly Medina, cantante de Pinipunks, y Fede Sylvester, cantante de La Estafa, uno de los mejores grupos de los 90 en la city cordobesa.
Publicarlo fue como quitarme un peso de encima, también fue un viejo anhelo y una extensión del certificado de la adolescencia. Todo eso fue publicar Escupida de fernet, la historia del punk de Córdoba capital.
Uno de los capítulos cuenta sobre las primeras visitas de Flema a Córdoba capital. Aquí brindamos parte del capítulo sobre la segunda visita de la banda que lideraba Ricky Espinosa.
Flema en El nuevo rock argentino
“Y del otro show (Nuevo rock argentino en Estación Mitre Noviembre del 96, segunda presentación de Flema en Córdoba) era la primera vez que tocábamos o una de las primeras veces que tocábamos en ese tipo de festivales abiertos a diferentes estilos, estaba Actitud Maria Marta, estaba Turf, una banda de reggae que ahora no recuerdo el nombre, pero son muy conocidos. Bueno, la cosa es que viajamos en el micro, todos juntos, me acuerdo que nos pusimos re en pedo en el micro. Con los Turf todo bien, con Joaquin (Levington, cantante de Turf) nos conocimos ahí. La anécdota de todo esto es que con estos dos pibes de Chotacabras, que deben tener ya como 50 años, igual que nosotros, había uno que era muy grandote en la banda y había quedado una pica de la vez anterior. En un momento se aparecen en el andén del tren, el lugar donde tocábamos nosotros era un vagón arriba y nosotros estábamos atrás del tren, o sea, atrás del escenario, sería, y aparece un grandote y uno chiquitito, eran los de Chotacabras que venían a buscar a los de Flema y nosotros estábamos con los Flema, con los manager, con los plomos, eramos como 20 personas contra 2 que eran ellos...y bueno obviamente cobraron y el grandote se plantó, cobró pero se plantó, pero me acuerdo que al chiquito a la primera piña salio corriendo y se fue por las vías y le gritabamos "Lo dejaste tirado a tu compañero". Pero bueno, nunca mas supe de Chotacabras y la verdad que si te llegás a comunicar decile a los pibes que está todo bien. La verdad que ni me acuerdo por qué era que nos habíamos peleado. Pero bueno, vinieron de a 2 contra 20. Como cobró el grandote”.
Otra de las historias que recuerda Fernando Rossi de los primeros pasos de Flema por Córdoba: “Y otra cosa que me acuerdo es que cobramos unos mangos por lo de El nuevo rock argentino y por el otro show, también. Fui al kiosco a comprar y me dieron de vuelto unos bonos, que los había sacado creo que Angeloz (en realidad, Ramón Mestre era el gobernador de aquella época), todavía era algo nuevo lo de los bonos, no me acuerdo ni como se llamaban. Me acuerdo que estábamos medio en pedo y decíamos "¿y ésto qué es?". No los habíamos visto nunca, era raro que pagaras con pesos y te dieran vuelto en un bono. Y Cuando nos iban a pagar por el show, nuestros managers estaban preocupados por si nos llegaban a querer dar esos bonos, en dónde mierda los cambiábamos. Igual cobramos muy poco, pero bueno, nosotros éramos unos zaparrastrosos que $10 eran $10, para nosotros”.
El libro se consigue en CABA en Librería del Fondo, Costa Rica 4568
En Córdoba, en El Emporio libros, 9 de julio 182.
Instagram: escupidadefernet_libropunk y Liburu Urdina Ediciones