Nuevo disco de Juan Vila: transformando al folclore como un axolote
Fotos: Kiki Herrera
Axolote se trata de la segunda propuesta de Juan Vila, destacado compositor, charanguista, guitarrista, percusionista y cantante bonaerense. La misma reúne diez obras originales de música popular contemporánea, nueve compuestas por Juan Vila y una de ellas por Víctor Jara, con arreglos corales propios de Vila. “De alguna manera, con este disco quise jugar con la idea de poder hacer ‘un Artaud para el Folclore’. No pretendo con esto adjudicarme la inmensidad del clásico de Spinetta, sino reconocer su influencia en mi búsqueda: la experimentación con los límites del estilo, su forma, su armonía, incluso su duración; todo esto a veces condensado en instrumentaciones a veces mínimas, y a veces más grandes, como hizo el Flaco en los 70”, afirma el músico.
En cuanto al nombre de esta propuesta, el axolote o axolotl es una especie de anfibio que vive únicamente en México y que tiene propiedades atribuidas a sus poderes místicos: cambiar de forma, de color, y poder regenerar miembros perdidos, etc. Es una criatura que preserva su capacidad de transformación porque mantiene rasgos de su estado de larva, como una reserva de infancia que le garantiza la metamorfosis, para así no quedar apresado en formas estables una vez alcanzada la “edad madura”. Con esta misma idea el artista trabajó durante dos años hasta reunir el repertorio que forma parte de este disco, y que podría considerarse como folklore en transformación.
“Busqué siempre anudar la música contemporánea de raíz folclórica (Carlos Aguirre, Juan Quintero, Fandermole, Raúl Carnota, Liliana Herrero, entre otros, han sido maestros fundamentales para mí) con la música contemporánea y el jazz (desde Spinetta hasta Chick Corea y Olivier Messiaen). Siempre me sentí interpelado por una música que preserva su raíz vital, su suelo, sus sabores y colores, sin por eso perder la experimentación sonora, armónica y tímbrica que uno puede encontrar en el arte contemporáneo”, dice Juan Vila.
Todas las obras del álbum Axolote tienen una riquísima variedad y experimentación sonora y un profundo sentido poético en sus letras. Como músico, licenciado, docente e investigador académico, el artista tienen un amplio conocimiento, experiencia y recorrido en el estudio en la Música de todos los tiempos y estilos y en los múltiples instrumentos y sonoridades autóctonas y contemporáneas, Esta virtud ha dado a este disco un gran valor que le da un sello autoral propio de alta categoría artística.
A esto se suma un compromiso social y humanístico, ya que una de las canciones de este repertorio ("La zamba sin nombre") está dedicada a la memoria de Esther Ballestrino, fundadora de Madres de Plaza de Mayo, luchadora incansable, y una de las primeras y más emblemáticas víctimas del terrorismo de Estado argentino. “La letra de esta zamba está llena de referencias a su vida, por empezar al pañuelo, que es un elemento simbólico muy fuerte tanto en la zamba como en la política argentina. Tardé muchísimo en terminarla, casi dos años. Terminé de componerla durante la pandemia, en 2020, y con Diego (un hermano fotógrafo y cineasta) decidimos hacer un video de la zamba. Encontramos un galpón gigantesco y lúgubre de una fábrica de zapatos abandonada y rodamos allí el videoclip. Como no teníamos mucho presupuesto, y no teníamos más que el equipo de filmación y la locación (que no es poco) decidimos conseguir muchas bolsas de arena, y filmar planos sobre objetos que íbamos consiguiendo que hicieran alusión a la vida de Esther Ballestrino: un cuaderno (por su docencia), un microscopio (por su profesión de química), un guardapolvos, anteojos, un pañuelo, etc. Lo más bello fue que tuvimos la posibilidad de estrenar el videoclip en un festival que originalmente iba a tener lugar en el Centro Cultural Conti (ex ESMA), pero por la pandemia se hizo virtual. Y en ese festival participamos de un conversatorio sobre “arte y memoria” y allí estaba nada más y nada menos que Mabel Careaga, la hija de Esther Ballestrino y militante de años. A ella le mostramos el video, y entre lágrimas, pudimos darnos la satisfacción de cantarle a Esther a través de su hija, quien nos hizo una devolución muy amorosa”, cuenta el bonaerense
Otra de las canciones con fundamento y compromiso es la "Chacarera del desmonte", compuesta en la Patagonia durante los incendios del año 2022. Es una denuncia el extractivismo que daña a la Madre Tierra, generando incendios intencionales y desplazando comunidades.
“Del mismo modo que el axolote, creo que lo que llamamos folklore no está cristalizado en una época, en una narrativa o en un lugar: tiene movimiento y está en constante transformación. Pero no por eso pierde el arraigo. Como el axolote, el folklore tiene su hábitat propio y siempre está buscando ser cantado y bailado. Como compositor siempre me sentí interpelado por una música que preserve una raíz vital en su propio suelo, sus sabores y colores, sin por eso perder la experimentación sonora, armónica y tímbrica que uno puede encontrar en la música y el arte contemporáneos”, asegura Juan.
Además de músico, Vila es Doctor en Filosofía (UBA) y Magister en Creación Musical, Nuevas Tecnologías y Artes Tradicionales (UNTREF). Es docente e investigador, especialista en pensamiento latinoamericano y pensamiento ambiental contemporáneo, habiendo dado cursos y conferencias nacionales e internacionales sobre estos temas. Dirige un grupo transdisciplinario de filosofía llamado La Filosofía Salvaje. Tiene publicado un libro en la editorial Teseo (2015) titulado La Paradoja de la racionalidad, acerca de la relación entre la mente humana y la mente animal.
Para este disco (financiado en parte gracias a un subsidio del INAMU), Juan Vila formó tres ensambles: el Ensamble Axolote con quienes toca habitualmente (formado en su mayoría por alumnas y alumnos de la Licenciatura de música de la UNTREF), el Ensamble Folk (conformado por músicos profesionales muy destacados, como el guitarrista de jazz Ale Demogli, el pianista y acordeonista Emiliano Khayat -Tonolec-, y la percusionista Nige Achy -SISA-) y el ensamble coral con quienes se hicieron dos arreglos de 3 y 4 voces.
En octubre y noviembre de 2022 Juan Vila viajará a Chile, financiado por el Ministerio de Cultura de ese país, para grabar su tercer disco, junto a un ensamble de música contemporánea de Valparaíso.
“Para mí, hacer folclore es, por un lado, salir al encuentro de estas danzas, ritmos y armonías que vienen de antiguas tradiciones populares, y por otro lado, ponerlas al servicio de lo que se tenga para decir aquí y ahora”.