Complicidad civil: condenaron a dos exdirectivos de Ford en causa de lesa humanidad
En un fallo histórico, el Tribunal Oral Federal 1 de San Martín condenó al exjefe de Manufactura de la empresa Ford Pedro Müller a 10 años de prisión y al exjefe de Seguridad de la planta Héctor Sibilla, a 12. Además, sancionó a Santiago Riveros, extitular de Institutos Militares del Ejército, a 15 años. A los tres los encontró responsables de los delitos de detenciones ilegales y tormentos agravados, ocurridos durante la última dictadura militar.
La causa Ford da cuenta de un sistema de complicidad entre empresarios, personal jerárquico de la empresa, gobierno militar y miembros del Ejército. El histórico fallo dio por demostrada la necesaria participación de civiles en los secuestros y torturas contra obreros de la planta que la multinacional tiene en General Pacheco.
En diálogo con AGENCIA PACO URONDO, Pedro Troiano, detenidos durante 1976 (y querellante en la causa) describió: "Nos levantaron en camionetas de la empresa y nos torturaron adentro del predio de la fábrica", aseguró. Fueron detenidos 24 trabajadores, que permanecieron entre 30 y 60 días desaparecidos en la planta de la empresa. Luego, fueron puestos a disposición del Poder Ejecutivo nacional.
La causa se dilató muchos años. Por esa razón, no fueron juzgados Nicolás Courard, expresidente de Ford Argentina, y Guillermo Galarraga, exgerente de Relaciones Laborales, quienes murieron en la impunidad.
Mediante un comunicado, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) celebró el fallo y recordó: "El 7% de los civiles acusados por delitos de lesa humanidad son empresarios. La dictadura fue la oportunidad que vieron algunos directivos de empresas para resolver de manera represiva los conflictos laborales y aumentar sus ganancias. Pusieron a disposición de los militares recursos materiales, como autos e instalaciones, dieron listas de personas, y de esa forma pasaron a ser un eslabón más en la estructura del terrorismo de Estado".