Lucila Puyol (Secretaria de DD. HH - Santa Fe): "Yo no me bajo de ninguna bandera"
Por Daniel Dussex
Lucila es integrante de H.I.J.O.S., también del movimiento de derechos humanos y del movimiento de mujeres, como abogada participó en varios juzgamientos a genocidas. Ahora se encuentra al frente de la Secretaría de Derechos Humanos de Santa Fe con la posibilidad de dar impulso a muchos de los reclamos que los organismos de DDHH vienen haciendo desde hace años.
Cuando se conoció su nombramiento, el Foro Contra la Impunidad y por la Justicia, la Agrupación H.I.J.O.S., Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas emitieron comunicados públicos en donde señalaron que esto era muy importante para el movimiento de derechos humanos. El colectivo de ex presos políticos, muchos de los cuales fueron defendidos por Lucila en los juicios por delitos de lesa humanidad, le hicieron un agasajo donde no faltaron los choris, pero la coca fue reemplazada por una bebida nacional y popular.
APU: ¿Cómo articulás tu militancia personal y colectiva con la función que ahora tenés en la Secretaría?
Lucila Puyol: Hay una apuesta que tiene que ver con transformar en políticas públicas esos reclamos, esos pedidos que desde hace años venimos haciendo los organismos de DDHH, pero además de los reclamos concretar propuestas pensando que estas políticas públicas tienen que ser de ampliación de derechos.
APU: ¿Cuál es el perfil que pensaste para tu gestión?
LP: Yo hice la propuesta de una Secretaría de Derechos Humanos de cara a la gente, de puertas abiertas. Esa propuesta fue aceptada. Con el gobernador Omar Perotti nos sentamos a conversar y hubo una aceptación de este planteo, además me gustó mucho cuando me dijo que el peronismo nace con los derechos sociales, mucho antes de la etapa trágica que nos tocó vivir en la dictadura. A eso hay que volver, a un gobierno que imprima fuerte la mirada en los derechos sociales.
APU: ¿Tu historia militante tiene que ver con este nombramiento?
LP: En mi caso tengo un montón de militancias que tienen que ver con los derechos humanos, los derechos de la mujeres y las diversidades. He trabajado y trabajo con los colectivos de los campesinos, con situaciones de desalojos urbanas y rurales... Cuando apenas me había recibido de abogada comenzaba el movimiento piquetero y he defendido a muchos de nuestros referentes históricos como "el Bachi" o Rubén Sala. Me parece que esa construcción de tantos años es la que llevó a que se me ofreciera esto porque también soy una militante política partidaria, soy afiliada al peronismo y pertenezco al espacio del Frente de Todxs.
APU: No sos un caso aislado, ya que en el gobierno Nacional hay otros integrantes de Organismos que también están en la función pública...
LP: Sí, una alegría muy enorme que esté Horacio Pietragalla como secretario de Derechos Humanos de la Nación, también es un HIJO.
APU: ¿Lo ves como una reivindicación generacional necesaria?
LP: Me parece que nosotros y nosotras, los hijos e hijas de desaparecidos, asesinados, ex presos políticos, exiliados y militantes de la última dictadura cívico militar eclesiástica, hemos venido construyendo en todos estos años una ética de la política, una ética de las formas de relacionarnos con otros y otras en las organizaciones sociales, de derechos humanos y políticas. Fuimos convocados y convocadas por esta ética, me parece. Por otro lado, lo siento también como un reconocimiento a casos como el mío que soy militante de la agrupación H.I.J.O.S., en donde uno de sus puntos básicos es la reivindicación de la lucha de nuestros padres y madres.
APU: ¿Estar en la función pública implica resignar algunas de las luchas colectivas?
LP: Yo no me bajo de ninguna bandera, no me lo han pedido tampoco. No creo que nadie me haya convocado no sabiendo quien soy y eso lo agradezco como un gesto de confianza, pero también quiere decir que este gobierno Provincial al igual que el gobierno Nacional tienen un anclaje importante en hacer de los derechos humanos una política de Estado.
APU: Hay algunos organismos de derechos humanos que tienen otro parecer, dicen que no se puede estar de los dos lados del mostrador. ¿Cuál es tu opinión respecto de esta otra mirada?
LP: Eso dependerá de quien sea la persona o funcionario y sobre todo lo que esté haciendo en esa función pública. A mi me parece que si nosotros planteamos que el Estado es el enemigo, nos estamos equivocando. Ese pensamiento tiene que ver con la mirada de un Estado liberal, no siempre es así. Si nosotras y nosotros pensamos que queremos construir un Estado nacional, popular, democrático y feminista, las personas que están en la función pública no pueden ser nuestras enemigas y lo pongo con nombre y apellido: Elizabet Gomez Alcorta es mi amiga, hace años que venimos militando y construyendo juntas políticas de derechos humanos, que venimos trabajando en las causas por delitos de lesa humanidad, reuniéndonos anualmente en el colectivo Mario Bosch que integramos abogados y abogadas de todo el país, pero que además militamos en el movimiento de mujeres. Nos encontramos en el último Encuentro Nacional de Mujeres, que por suerte cambió de nombre por Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans y no Binaries, nos encontramos allí, sé que es mi hermana de lucha y es hoy la ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad. ¿Cómo voy a pensar que Gómez Alcorta va a cambiar su forma de pensar y va a ser mi enemiga?
Obviamente los Organismos tienen que tener su autonomía, eso es otra cosa. Mi agrupación, H.I.J.O.S., no es Lucila Puyol. Es una agrupación que tiene su espacio para discutir, yo soy parte de ese espacio como una más. No me voy a correr de mi lugar de pertenencia. No me saco mi pertenencia a los organismos, ni a la militancia territorial, ni a la de mujeres, no. Tengo una función pública en donde trataré de hacer políticas en todo caso a gran escala, nosotras tenemos toda la provincia de Santa Fe que es muy larga y muy extensa.
APU: El término Derechos Humanos generalmente queda encorcetado en la violación de los mismos durante la última dictadura ¿Cómo será entendido en la Secretaría?
LP: La base en la que nos asentamos es Memoria, Verdad y Justicia, porque desde allí hemos construído todos los derechos humanos conseguidos desde la recuperación de la democracia en nuestro país y además, o juntos, son los derechos civiles y políticos, los derechos económicos, sociales y culturales, los derechos de incidencia colectiva, los derechos de todos los días.
APU: ¿Esto cómo se traduce en la gestión?
LP. Se traduce, en el trabajo contra la violencia institucional que es un punto clave en esta Secretaría. El trabajo con las personas privadas de su libertad sea en las cárceles, en las comisarías o relacionadas a la salud mental y los derechos humanos. Esta Secretaría tiene competencia para trabajar en conjunto con el área específica que se creó dentro de la Secretaría de Seguridad, la oficina de Investigación Criminal que creó el Dr. Marcelo Sain para trabajar los casos de trata. Fundamentalmente a esta oficina llegan muchos casos de trata de personas con fines de explotación sexual, sobre todo niñas y adolescentes, hay que profundizar ese trabajo conjunto donde la Secretaría quiere tener un rol importante. También trabajar la trata de personas con fines de explotación laboral. Otro aspecto donde la Secretaría tiene una competencia específica es en relación a la violencia de género en el ámbito laboral de la administración pública. Hay un decreto en tal sentido. Entonces aquellas personas, fundamentalmente mujeres, que sufran situaciones de acoso laboral, de violencia en sus ámbitos de trabajo, van a encontrar un espacio donde puedan venir a denunciar. Este tema es poco conocido.
APU: ¿En qué estado encontraste la Secretaría, luego de la gestión del Frente Progresista?
LP: Estamos analizando las diferentes áreas, hay un personal al que le interesan los derechos humanos y por eso se ha quedado, pero también algunos que se fueron cuando esta Secretaría fue vaciada de contenido. Estamos viendo si podemos recuperar a esos trabajadores y trabajadoras. Hay áreas que no se han abordado con la intensidad y la seriedad necesaria. Cuando decimos "una Secretaría de puertas abiertas", es porque estamos invitando a todas las organizaciones de derechos humanos, políticas, sociales y gremiales para sentarnos a discutir políticas que tengan que ver con su sector, pero también a escuchar denuncias y demandas. Ese espacio físico acá no existía. En el caso de las políticas en las que supuestamente la gestión anterior avanzó más, como son las políticas de Memoria, nos encontramos que se firmaron cinco convenios para digitalizar la información sensible que hay en nuestro Archivo Provincial de la Memoria que fueron muy difundidos a través de los medios, y sin embargo los archivos siguen sin digitalizar. Otro tema que me llamó la atención es que cuando comenzó a funcionar esta Secretaría, antes del gobierno del Frente Progresista, había una fuerte actividad en el Centro de Denuncias, un lugar donde la gente tenía la seguridad que podía venir a denunciar, había un permanente flujo de personas en la mesa de entrada. Cosa que en los últimos años dejó de suceder. Ha habido otras instituciones que reemplazaron eso porque acá no se consideraban, o no estaba el personal para hacerlo.
APU: Hubo un reclamo de los organismos de derechos humanos por las modificaciones que se hicieron en la ex comisaría 4ta., el sitio de memoria.
LP: Sí, por suerte están detenidas ahora.
APU: ¿Se podrá volver atrás con las modificaciones que se hicieron? ¿En el presupuesto está contemplada esta posibilidad o no?
LP: Como es de público conocimiento, el presupuesto lo hizo el gobernador saliente, Miguel Lifschitz, quien no aceptó que se esperara a que lo hiciera el nuevo gobierno que iba a asumir. Lo que hay en el presupuesto es el de una Secretaría de Derechos Humanos achicada. En este sentido, las obras que se hicieron en la ex comisaría 4ta. que es un sitio de Memoria, son obras que no fueron consensuadas con los organismos de derechos humanos ni con la Comisión Espacio de la Memoria que si bien se formó con posterioridad, ya al asumir Hermes Binner como gobernador les prometió a los organismos que les iba a entregar la comisaría, por lo tanto siempre supieron que ese era un sitio de memoria y siempre trabajamos desde los organismos para que la policía se fuera, cosa que se logró, pero lamentablemente se hicieron obras que rompieron la estructura originaria. La verdad es que desconozco si eso puede volver a su estado original y si hay que poner mucho dinero para recuperar lo que se rompió, lo que se dañó y lo que se modificó.
APU: ¿Tiene competencia la Secretaría para reclamar eso?
LP: Sí, la tiene. Pero hoy ya hay una Comisión por lo tanto no debe ser una decisión de la Secretaría. La 4ta. ya es un sitio de memoria, la parte que se ha modificado tiene que ver con el circuito por el cual llevaban a las víctimas dentro de la comisaría y si se piensa hacer visitas guiadas para contar esa historia hay que tener el lugar como era originalmente.
APU: ¿La Secretaría actuará como querellante en los juicios por delitos de lesa humanidad?
LP: Esperemos que sí, esa es la propuesta que tenemos. Constituirnos en querellantes de las causas es un reclamo de los organismos y las organizaciones. Pero no sólo queremos actuar en las causas por estos delitos, sino también en los juicios por trata de personas o femicidios, que son parte de esta realidad actual.
APU: ¿Cuál es tu mayor desafío como Secretaria de Derechos Humanos de la Provincia?
LP: Lograr que sea un lugar de puertas abiertas para la gente. Que cada vez que alguien sienta que se está violando algún derecho, se diga tengo que ir a la Secretaría porque allí me van a ayudar.