Economía negocia con el FMI un desembolso inmediato de casi 9 mil millones de dólares
A pesar de la derrota electoral en 2019, Juntos por el Cambio aún sigue aprovechando los beneficios que en 2018 el FMI le brindó al gobierno de Mauricio Macri. Sucede que los condicionamientos que el Fondo le viene imponiendo al actual gobierno podrán repercutir de manera directa en las próximas elecciones.
Se viven horas de definiciones entre Argentina y el FMI. La comitiva del ministerio de Economía, encabezada por el secretario de Política Económica, Gabriel Rubinstein, emprendió la noche del lunes el viaje rumbo a Washington con el fin de poder cerrar un nuevo acuerdo con el Fondo. Son momentos de definiciones importantes en materia económica para el país. La economía está urgida del desembolso de más de 8 mil millones dólares por parte del organismo de crédito internacional para poder pagar los compromisos de acá a fin de año.
Hasta ahora las negociaciones están trabadas por las exigencias que el FMI le quiere imponer a nuestro país. Entre las más importantes se destacan la baja del déficit fiscal y una fuerte depreciación del peso con respecto al dólar. Este último pedido viene siendo resistido por el ministro de Economía y precandidato a presidente por Unión por la Patria, Sergio Massa, pero los últimos días el dólar blue pegó una trepada importante y dejó a la brecha con el oficial en casi el 100%. Massa sabe que más devaluación es más inflación.
Acuerdo con el FMI
La economía argentina tiene como condicionante principal para su puesta en marcha y posterior desarrollo el exorbitante préstamo que el gobierno de Juntos por el Cambio tomó en 2018 con el Fondo Monetario Internacional. Nuestro país está atado a revisiones trimestrales por parte del organismo de crédito multilateral. Pasar esos exámenes cada tres meses implica cumplir con las condiciones que el FMI le impone a la Argentina de manera unilateral. ¿Cuáles son esas condiciones?
El Fondo le pide a la Argentina que baje el déficit fiscal y para eso es imprescindible dejar de subsidiar los servicios, ergo, los mismos sufren aumentos y eso pega en el bolsillo de los consumidores. Otra de las condiciones es la devaluación del peso con respecto al dólar, otra medida de tinte recesivo y con alto impacto en los hogares.
En febrero de 2022, el diputado y entonces jefe del bloque del Frente de Todos en la cámara baja, Máximo Kirchner, renunció a su cargo en desacuerdo con el pacto alcanzado con el FMI. Lo que adujo en ese momento el titular de La Cámpora era que el acuerdo con el Fondo es inflacionario. A meses vista de la firma del nuevo contrato ha quedado demostrado que las imposiciones del organismo de crédito han dado resultados negativos para la economía doméstica. Es que más allá de la multimillonaria deuda las imposiciones son restrictivas para el manejo de la economía.
Si el actual gobierno no llega a un acuerdo que beneficie a nuestro país en los próximos días, cuando falta muy poco para las PASO, la performance y la suerte del oficialismo en las primarias se verá en grandes dificultades.
Por todo lo antes expuesto y a pesar de la derrota electoral en 2019, Juntos por el Cambio aún sigue aprovechando los beneficios que en 2018 el FMI le brindó al gobierno de Macri. Sucede que los condicionamientos que el fondo le viene imponiendo al actual gobierno podrán repercutir de manera directa en las próximas elecciones.