El salario mínimo sigue sin cubrir las necesidades para no ser pobre
Esta semana Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) publicó los principales indicadores inflacionarios con respecto al mes de mayo. La Canasta Básica Total (CBT) se incrementó un 2,4 por ciento y la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que mide el umbral de la indigencia, un 2,8 por ciento, ambas detrás de la inflación mensual que marcó un 3,3 por ciento. Sin embargo, una familia integrada por dos adultos y dos menores, con salarios mínimos, no alcanza a superar la línea de pobreza.
A partir de mayo dicha familia necesita 64.445 pesos para superar dicha condición. La inflación mensual se vio afectada en especial por la suba en transporte y salud, 6 y 4,8 por ciento respectivamente. Los alimentos estuvieron en línea con la CBA, compuesta por una selección de aquellos bienes alimentarios capaces de garantizar calorías nutricionales necesarias para el hogar del tipo de familia mencionado.
A nivel interanual, el Índice de Precios de Precios al Consumidor (IPC) mostró una evolución del 48,8 por ciento, mientras que la línea de indigencia (CBA) y pobreza (CBT) estuvieron por encima: 53,4 por ciento en el primer caso y 49,6 por ciento en el segundo. De esta manera, el hogar tipo señalado no logra superar la línea de pobreza. El salario mínimo vital y móvil alcanzó los 24.408 pesos en mayo, tras el incremento pautado del 35 por ciento desde abril de este año a febrero de 2022. Representa un 38 por ciento del valor de la CBT y un 89 por ciento de la CBA.
Si se suman otros aspectos que integran el consuma de una familia trabajadora, como el esparcimiento, según la Junta Interna del Instituto de Estadística y Censos, se requieren ingresos equivalentes que rozan los 100 mil pesos, 99.930 puntualmente.