Kicillof vuelve a insistir con la ley impositiva, a pesar de los obstáculos del macrismo
Foto: Luciana Morichetti
Cansado de las dilataciones del macrismo, que también tiene sus internas entre María Eugenia Vidal y Jorge Macri, el gobernador Axel Kicillof decidió mandar a la Legislatura bonaerense el nuevo proyecto de ley impositiva que fue rebotado en el Senado a fin de 2019. Ahora, ingresará por Diputados, donde el peronismo tiene los números necesarios para aprobar el paquete de medidas. En el Senado será otra historia...
Según informó el Frente de Todos, el nuevo proyecto incluye cambios, por ejemplo, se modificó el el piso que se imponía para que los inmuebles urbanos fueran alcanzados por el aumento del 75 por ciento. Esa base pasó de 680.877 pesos de valuación fiscal a 3 millones de pesos. Es decir que sólo las propiedades por encima de los tres millones serán pasibles de pagar el 75 por ciento de aumento. De esta manera se redujo a un millón los bienes inmuebles que recibirán ese impacto.
Sobre el Impuesto Inmobiliario Rural el impacto del 75 por ciento sólo alcanza a unas 200 propiedades, por lo tanto quedará tal cual. Es uno de los puntos que objeta el macrismo, por su sintonía con los grandes productores agropecuarios.
Otra de las modificaciones pedidas por Juntos por el Cambio, y a la cual cedió el Ejecutivo, es que se retrotraiga el incremento estipulado de antemano para el pago de Ingresos Brutos por parte de quienes prestan servicios. En ese sentido, se estableció un porcentaje de 3,5 por ciento sobre la facturación.
También se retocó el proyecto original respecto a la base imponible de Ingresos Brutos para las Micro Pymes, que originalmente se estableció en 7.200.000 pesos, y que el oficialismo aceptó que quede finalmente en 10.400.000 pesos. El macrismo aceptó negociar esos puntos pero luego se retiró de la mesa de acuerdo, lo que obligó a Kicillof a insistir con el proyecto más allá de todavía no tiene el respaldo total del macrismo. En Cambiemos se juegan también las internas entre los diferentes sectores que quieren conducir a la fuerza en Buenos Aires y que ponen en cuestión el liderazgo de Vidal.