Muy grave: los cortes de carne aumentaron en promedio un 75% en 2020
El observatorio de precios del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) analizó los movimientos en los precios de la carne. En lo que va del 2020, los cortes de carne subieron en promedio 75%, 40 puntos más que la inflación promedio del año.
A la cabeza de los aumentos sobresalen cortes como el asado (93%), vacío (87%), matambre (85%), tapa de asado (79%) y tapa de nalga y bola de lomo (74%). En esos casos, se trata de una duplicación de la inflación de los últimos 12 meses. Hasta cortes populares como la picada especial o el pollo entero tuvieron subas muy importantes, superiores al 55%.
Con esos precios, no sorprende que 2020 haya cerrado con el consumo de carne por habitante más bajo en mucho tiempo. Cayó un 2% en relación al último año macrista, caracterizado por el ajuste sobre las clases populares, y un 13% en relación a 2009, el peor año de la etapa kirchnerista.
El CEPA ensayó algunas hipótesis del por qué de ese aumento fenomenal en un alimento tan sensible para la mesa de los argentinos. La principal: "La decisión del Gobierno de Mauricio Macri, en 2016, de eliminar los ROE (Registros de Operaciones de Exportación) que se habían establecido en 2008 para regular la exportación de productos alimenticios sensibles y para evitar que posibles incrementos en la demanda mundial impactaran de lleno en los precios internos, junto con la aparición de China como principal comprador de carne vacuna", describió el centro de estudios económicos.
El aumento de las exportaciones fue notable durante el gobierno de Mauricio Macri, donde las ventas al exterior de carne pasaron de las 19 mil toneladas a las 75 mil toneladas. Ese aumento y la ausencia de políticas que separen el precio internacional del local, impactaron sobre el mercado local. Hasta el macrismo, un alto porcentaje de lo producido (entre el 80% y el 90%) se consumía en el país, a precios razonables. Ahora, ese número cayó al 70%.
Concluyó CEPA: "Estos elementos indican la necesidad de parte de la política económica de desacoplar o desenganchar el precio internacional del precio local, para evitar que el aumento de las demandas de carne o la suba del precio del maíz signifiquen un traslado inflacionario al mercado local, a la par de medidas que permitan controlar los aumentos arbitrarios y excesivos. La inclusión en precios cuidados de 4 cortes de carne vacuna y la posibilidad de ampliación a 12 resulta una buena respuesta para esta última de las situaciones".