Vanoli: "Argentina es el país con mayor vulnerabilidad del mundo"
Por José Cornejo Pérez*
AGENCIA PACO URONDO: ¿Cómo va a reaccionar el dólar después de la elección si el resultado es que el oficialismo queda 7 puntos por debajo o la oposición cerca de 43?
Alejandro Vanoli: El dólar va a acompañar una inflación que tiene a pesar de la recesión un piso de 2% mensual. Además habra más presión cambiaria porque existirá menos oferta de dólares provenientes de la cosecha que tradicionalmente se liquidan entre abril y julio y menores ingresos especulativos del exterior, factores ambos que permitieron una pax cambiaria que se va erosionando. La conjunción de factores globales con factores locales incrementará la demanda de dólares. Siempre en años electorales hay una mayor demanda de divisas, pero se está instalando entre los inversores especulativos la realidad de un país que tiene una gran vulnerabilidad externa.
El informe de 10 atrás de la agencia de noticias financiera Bloomberg mostró que la Argentina es el país con mayor vulnerabilidad del mundo. Circunstancialmente hay un leve superávit de la balanza comercial por una recesión que deprime las importaciones, pero el déficit de sector externo sigue vigente y se agravará cuando la economía rebote si se persiste con una apertura importadora y financiera que nos llevó a la crisis. Si a esto le agregamos la incertidumbre política habrá volatilidad cambiaria y el Gobierno deberá mantener altas tasas, fuerte intervención en futuros e incluso intervención directa en el mercado de cambios para mantener un dólar anestesiado hasta octubre, mas allá de la política de tasas que destruye el aparato productivo. A pesar de las simpatías de Wall Street con Macri, hay una percepción que gradualmente se va instalando de que un gobierno de Alberto Fernández implica aplicar un plan consistente que recupere los equilibrios macro en el marco de un Acuerdo Político Económico y Social. Esto irá reduciendo gradualmente la percepción de riesgo, aunque el gobierno de Macri todavía tiene capacidad de daño por varios meses sobre la economía real.
APU: ¿Cómo explica que aunque el dólar esté congelado, los precios sigan subiendo?
AV: El gobierno instaló que las causas de la inflación era la emisión monetaria y el déficit fiscal. Lo cierto es que a un año del congelamiento de la cantidad de dinero en la economía y a una leve reducción del déficit primario, la inflación está por encima del 50% anual. Es claro que el diagnóstico monetarista es totalmente equivocado para la realidad de la economía nacional y que la inflación en Argentina tiene múltiples causas. El canal cambiario, por ejemplo, que el gobierno subestimó por casi tres años y la inflación de costos generalizado que produjo el gobierno con altas tasas de interés y tarifazos además del impacto del dólar sobre los precios. También queda claro que la depresión de la demanda genera recesión y no baja la inflación. El gobierno no revirtió las causas estructurales de la inflación más allá de reducir temporalmente sus efectos postergando tarifazos hasta octubre y acudiendo a medidas como Precios Cuidados que había denostado en el pasado. Incluso hay precios que no se trasladaron al consumidor por la recesión y que la libre exportación de alimentos genera presiones al alza en bienes básicos en el mercado interno. Lo cierto es que existen problemas de concentración de la economía y de una cadena de comercialización qué genera aumentos de costos, márgenes y precios. La inflación también tiene razones inerciales por ajustes de contratos por la inflación pasada y aumentos por expectativas, por eso un gobierno de Alberto Fernandez debe implementar un acuerdo social para desindexar, fijar una trayectoria más estable de la tasa de interés y el tipo de cambio y generar una recuperación gradual y ordenada de los salarios reales sin que se traslade a los precios.
APU: Recomenzó una carrera devaluatoria entre China y EEUU. ¿Eso afectará nuestro país?
AV: La guerra económica entre China y Estados Unidos continuará en los próximos meses y esto tendrá efectos devaluatorios en los países emergentes por el lado financiero y el mayor proteccionismo global. Esto afectará al comercio exterior argentino, el país tendrá un margen limitado para aumentar en el corto plazo las exportaciones debido al debilitamiento de la producción nacional . Tres megadevaluaciones de Macri en 3 años no generaron mayores exportaciones, mas allá de liberar exportaciones de alimentos y energía, por las políticas antiproductivistas. Por la continuidad de la apertura importadora habrá mayor presión sobre el déficit externo, como dije. Por lo tanto la conjunción de una mayor debilidad del sector externo comercial con un persistente desequilibrio de la cuenta financiera del balance de pagos incrementará las presiones cambiarias. En este contexto, el acuerdo Mercosur - Unión Europea implicará un mayor desequilibrio externo en el corto plazo lo cual es irracional dada la falta de competitividad de la economía nacional que se agravó durante la gestión Macri. La guerra comercial provocará una baja de tasas de interés a nivel global, con devaluaciones competitivas y suba de aranceles que generarán más inestabilidad en la Argentina a menos que se revierta integralmente la política del sector externo para evitar una sangría de divisas y generar las condiciones para volver a una economía productiva.
* Director Agencia Paco Urondo