Falló prueba de escrutinio: Landau ampliará la denuncia
Fracasó el primer simulacro del sistema de digitalización y transmisión electrónica de telegramas que fue realizado el pasado sábado 29 de junio por el Correo Argentino y la empresa venezolana Smartmatic. Esto solamente confirmó lo que expertos en la materia y dirigentes opositores habían expresado en varias oportunidades. Este sistema es el que se llevará adelante en las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) el 11 de agosto.
El apoderado del Partido Justicialista Jorge Landau, representante del frente opositor mayoritario que llevará a Alberto Fernández y a la ex presidenta y actual senadora Cristina Fernández de Kirchner, expresó que hoy ampliará una denuncia ante la Cámara Electoral: “El sistema actual ofrece todas las garantías para la alternancia y queremos que se mantenga para evitar cualquier posibilidad de manipulación de votos”. “Nunca hubo problemas o dudas con el sistema actual. Ahora nos encontramos con que quieren innovar y es muy grave lo que está pasando porque ni siquiera tienen un listado de los establecimientos con acceso a internet”, dijo a Página 12. "Un cambio como este no tiene asidero y debería pasar por el Congreso, no por un concurso de precios".
Por su parte, el Correo Argentino junto con la firma que ganó la licitación asegura que los problemas de carga y transmisión que tuvieron en el primer simulacro “son normales” y se resolverán para la próxima prueba. Esta ya se encuentra pautada para el 20 de julio, menos de tres semanas de las elecciones.
En dialogo con Página 12, el programador Javier Smaldone expresó: “El problema es que se quiere hacer un cambio importante, que puede tener un impacto grande en el escrutinio provisorio y, a su vez, en la opinión pública, y se empezó a pensar recién en noviembre del año pasado para implementarlo por primera vez en una elección presidencial y en el cien por ciento del país”. Además expresó que la implementación de este nuevo procedimiento es muy arriesgado y apuntó a fallas de testeo ya que se basaron en cuestiones comunicaciones y de desorganización. “Smartmatic no ganó una licitación, sino un concurso de precios, y la calificación técnica que obtuvo fue más baja que la del resto de las compañías. (…) Los problemas que hay no se pueden resolver de acá a 40 días”, exclamó.