Presentación del Observatorio de Violencia Obstétrica
Los datos arrojados hasta el momento, por el observatorio que fuera inaugurado en octubre del año pasado, no dejan lugar a dudas sobre la marcada incidencia que este tipo de violencia tiene en la escena del parto y sobre el cuerpo de las mujeres y sus hijos e hijas.
Se han constatado altos índices de trato deshumanizado, como el uso de sobrenombres y diminutivos (mamita, nena, gordita) que un 70% de las mujeres refiere, sumado a que más de la mitad de las encuestadas se sintieron juzgadas y no contenidas.
Asimismo, se registran alarmantes niveles de uso de medicalización e intervenciones muy por encima de los estipulados como justificables por la OMS, incluyendo el uso de maniobras que como el Kristeller están categóricamente desaconsejadas, lo que corrobora que se trata de problema de salud pública. Siendo tal vez el dato más estremecedor que la gran mayoría de las mujeres no fueron informadas adecuadamente, ni dieron su consentimiento para las prácticas que se realizaron sobre ellas y/o sus hijos e hijas, lo que implica una grave vulneración de sus derechos y autonomía en conformidad con las leyes que las amparan.
El Observatorio de Violencia Obstétrica es una propuesta ciudadana y autogestiva centrada en la recolección y sistematización de datos y estadísticas relacionados con la VO; el seguimiento de las denuncias; el monitoreo de políticas públicas, proyectos de ley y cumplimiento de leyes; la elaboración de recomendaciones a organismos e instituciones involucrados; la creación de espacios de difusión y debate con profesionales y ciudadanía en general; la promoción de la elaboración de estudios y proyectos de investigación; el apoyo y difusión de acciones de otros colectivos y agrupaciones en torno a la VO y la articulación del trabajo y acciones con otros Observatorios nacionales e internacionales.
Además de obtener un panorama de los hechos y situaciones de vulneración de derechos de las mujeres, los resultados del relevamiento servirán para efectuar sugerencias y recomendaciones a fin de implementar políticas públicas.
Durante estos meses de trabajo y gracias a la trayectoria de Las Casildas se han generado alianzas y redes tanto con organizaciones afines, como con instituciones y organismos relacionados a la temática. Como por ejemplo con la Casa de Santa Cruz, la Secretaría de Salud de Lomas de Zamora o IDEAL Quilmes, con el fin de generar acciones conjuntas tendientes a erradicar este tipo de violencia. Además, el Observatorio de Violencia Obstétrica cuenta con una red nacional de referentes en distintas provincias.