"Clarín" pregunta: "¿La Cámpora tomó el comando de la Bonaerense para infligirse un autogolpe?"
Por Groncho Mars | Ilustración: Leo Olivera
“En las tierras magiares de donde proviene mi familia”, dice Gregor, “si te vas a encontrar con alguien importante para pedirle algo, lo primero que hacés es ponerte de pie, apretás la mano que te extienden en forma firme y sin perder contacto visual, si tenés guantes te los quitás. Y si es una persona mayor le decís Csókolom, que quiere decir ´te beso en la mano`. Creo que presentarse con armas reglamentarias y negarse a pasar cuando se te invita a ser escuchado no es una forma muy elegante de dialogar para obtener lo que querés, a menos que ese no sea tu objetivo, ¿no cierto?”. No le contesto a mi pequeño amigo porque todavía estoy buscando en el mapa cuáles son las tierras magiares y porque me acabo de enterar que no sería de acá. Mejor arrancamos.
No sé para qué volviste, si ya te empezaba a olvidar
A pesar de ver abortado el “operativo retorno”, quienes conocen mejor a Mauricio Macri afirman que “volvió recargado” de Europa. “Es hora de sumar”, aseguran que dijo apenas bajó del avión para, luego, recluirse en la quinta Los Abrojos en donde pasará los 14 días de cuarentena preventiva. Lo que no quedó del todo claro es si esa frase la pronunció en la búsqueda de evitar conflictos dentro de Juntos por el Cambio o si quiso decir que se va a sentar a sacar cuentas de la cantidad de días en los que tuvo que “encerrarse” en forma protocolar luego de los viajes realizados durante la pandemia, que si mal no recuerdo le dan como para mes y medio. Según fuentes no confirmadas, la idea que tiene en mente el presidente de la Fundación FIFA es apuntar todos los cañones a una ruptura con el gobierno. El primer paso que dio fue tratar de comunicarse con Cristina Castro, la mamá de Facundo. “Éramos pocos en este desfile de hipocresía y llegó el mamerto de vacaciones de la Costa Azul, consternado… cerrame la 4”, posteó Leandro Aparicio, el abogado de la familia Castro como corolario a la captura de pantalla de la conversación con Darío Nieto, el no tan exsecretario de “Mufaza”, que me exime de todo remate. Lo cierto es que no la va a tener fácil el papá de Antonia para mantener unida la tropa, ya que se pueden percibir tensiones en los cuadros como Néstor Grindetti, Julio Garro y Diego Valenzuela, quienes avisaron que “nadie puede venir a imponer nombres, ahora se tienen que consensuar. Ya no hay dedo, de Macri menos”. Escuchar durante el 2019 a los cambiemitas hablar en exceso del “dedo acusador” de Alberto me permitió entender la lógica psicomágica de fondo y llegar a la conclusión, parafraseando al “bueno” de Lombardi, de que el “dedito de Mauricio” vendría a mostrar al PRO en el “estado vivo” con que se supo manejar.
Arlequines y payasos, este circo es un fracaso
Mientras que el cada vez más evidente vaciamiento de Vicentin y la “falta de reacción” del juez santafesino que lleva la causa no parece llamarles la atención, los integrantes de Juntos por el Cambio insisten en boicotear las sesiones en la Cámara Baja con el “noble objetivo” de evitar se sancione una reforma judicial que vendría a facilitarle a la vicepresidenta, según ellos, “total impunidad”, a través de la “alicaída herramienta de la virtualidad”. Es interesante preguntarse cómo este formato no es un escollo para legislar en lugares como CABA, Jujuy o Mendoza, donde son gobierno y pueden sesionar sin problemas. A menos que piensen que en dichos distritos no tienen cosas importantes para tratar y por eso se avanza de dicha forma. Lo cierto es que José Nuñez, uno de los diputados que quiso participar en forma presencial para luego no hacerlo al grito de “si no estamos todos acá, no vale”, dio positivo de COVID 19. Rápidamente se iniciaron la búsqueda de contactos estrechos, entre los cuales se encontraban los 36 colegas de su bancada que se acercaron al Congreso el martes primero con el mismo objetivo. Para mantener la coherencia hasta el momento exhibida, desde el frente opositor rechazaron someter a estos legisladores a testeos, con el peligro que esto conlleva ya que estos diputados regresaron a sus provincias, aumentando la posibilidad de contagios. Por suerte volvió a hablar Elisa Carrió, quien convocó “al diálogo para retomar la sensatez política y la cordura institucional” ¡Vaaamooos!, empezamos a gritar todos, por fin alguien que pone paños fríos y quiere que se restablezca el funcionar de las instituciones. Sin embargo, ahí nomás y como quien no quiere la cosa, afirmó que “hay soldaditas inmorales, fanáticas y que carecen de conciencia”. Si bien parecía estar realizando su vivo retrato, se refería a Fernández Sagasti. “Es joven, es de Mendoza, tiene empuje ¿pero que le pasó? Se hizo fanática” que vendría a ser, para Lilita, un sinónimo de kirchnerista. Es así como Carrió da otro paso para convertirse en la Jane Austen argentina, llena toda de sentido y sensatez. Mirá para que te lo marque la DAIA… Por el mismo camino andaría Alfredo Casero quien, luego de su participación estelar en las puertas del recinto legislativo los primeros días del mes, contó que comenzó a estudiar Derecho y parece que con las clases iniciales que tuvo ya le alcanza para aseverar que el accionar de Sergio Massa durante las últimas sesiones legislativas fue “un golpe de Estado”. Debo ser sincero y reconocer que cuanto más serio se pone Casero, más se parece al comediante divertido y exitoso que conocimos en la época de Cha cha cha. Finalmente, todas las bancadas de la Cámara Baja llegaron a un acuerdo para sesionar, en el cual se destaca que lo harán en forma presencial cuando toquen temas relevantes, pero no será en el Congreso. Algo que Massa ya les había propuesto la semana pasada, a lo que la gente de JxC se excusó diciendo que “no lo pudimos escuchar bien al presidente de la cámara porque lo tapaban nuestros propios gritos acusando que la sesión era un escándalo”.
Con las patas llena de barro de la caravana
El fin de semana partió desde Bahía Blanca una caravana de 100 personas que iban “por la hazaña” de “entrar de prepo” a la localidad de Monte Hermoso, donde eran esperados por los lugareños, quienes habían levantado un vallado en señal de resistencia. Al grito de “la propiedad privada o la vida de otro”, estos bahienses querían ingresar a la localidad vecina y verificar el estado de sus inmuebles de descanso, tras correr rumores de “destrozos, robos y usurpaciones”. Como gente que va decidida a todo, los “invasores” realizaron su movimiento ofensivo al grito de “somos propietarios, pagamos impuestos, tenemos derechos, pero no nos dejan entrar”. Ante tal poderoso ataque, los “defensores”, respondieron que “tu propiedad privada y sus impuestos terminan a donde empiezan la mía”, y si esta declaración de principios ya era confusa la completó el intendente Dichiara quien salió a avisar que se “estaba realizando máximos esfuerzos para contener a los montehermoseños que quieren ir a la entrada de la ciudad para frenar a estos no residentes para que no nos contagien”. Fue un día de alta tensión, pero parece que, para la noche, ambos lados se habían cansado de jugar a “galos y romanos”, concordaron un parley a mitad de la ruta 78 y se pusieron de acuerdo en que algo tenían que acordar. Después de todo, hablando de propiedad privada se entiende la gente. Algo sobre lo que Sergio Berni fue tajante al afirmar que “mientras el sea ministro de Seguridad, va a velar por ese derecho” y cada vez que abre la boca, muchos de este lado nos empezamos a desvelar. Por las dudas, unos cuantos le prendieron velas para que siga exaltando el derecho a la propiedad privada sin averiguar mucho si su obtención tiene la propiedad de privar a otros de sus derechos. Lo cierto es que los bahienses se volvieron a sus residencias principales con la promesa de ingresar luego del 14, 60 propietarios por día, por un plazo de 72 horas, y la justificación oficial. Y los locales se quedaron sacando cuentas de los días que faltan para que en Bahía Blanca, con la cantidad exponencial de casos, se vuelva a una etapa de mayores restricciones y los que fueron por la heroica, no puedan salir de esa ciudad. Mientras tanto, en Santa Fe, comerciantes y dirigentes salieron a la calle para dejar en claro que no quieren cerrar sus locales en las dos ciudades donde se ve, cada vez con mayor celeridad, duplicación de casos de COVID 19: Rosario y Venado Tuerto. Los que alzaron sus voces se niegan a cumplir con las nuevas restricciones, exigieron que el gobierno provincial redoble el esfuerzo sanitario y, al mismo tiempo, respete su “libertad de trabajar”. Cuando les marcaron lo complicado de compatibilizar ambos pedidos, se atajaron contestando: “Nadie dijo que fuera fácil. Somos los que pedimos, no los que tienen que contestar”.
Qué buenas horas, las horas que vi pasar
Sin embargo, la más bizarra de las manifestaciones volvió a producirse este domingo en el centro porteño, donde un grupo de anticuarentena realizó un ritual iniciático condenando al fuego sus tapabocas, acompañando el acto con el cántico de “quema de barbijos, quema de barbijos”. Eso le alcanzó a Clarín para afianzar su camino en la búsqueda de ser la nueva Barcelona al preguntarse este lunes, en bonito titular, si no fue “la Cámpora quien mandó a quemarlos para exponer a los anticuarentena”. La mala intención queda en evidencia con sólo recopilar las declaraciones que estos libertarios vinieron ofreciendo en cada marcha y llegar a la conclusión de que esta gente se expone sola y para quemarse no necesita de nadie más. Se rifaba una operación mediática esta semana y la agrupación cuyo secretario general es el “Cuervo” Larroque pareció tener todos los números. Porque pensar que quienes van a una toma son capaces de acercarse hasta al lugar donde van a realizarla con un manual de cómo llevarla a cabo, que encima figura quién lo edita, y que la dejen tirada por ahí para que lo recojan policías y periodistas, da para preguntar si a esos “elementos de aprendizaje” los imprimieron en la misma fotocopiadora que le hacía precio mayorista al chofer Centeno. Hablando de Berni, llamativa fue “la protesta” que llevó adelante la policía bonaerense por “mejores salarios”. Rápidamente hubo quienes salieron a apoyar a la fuerza que en los cuatro años de pérdida salarial del anterior gobierno ni siquiera presentaron una carta de queja, pero el que se destacó fue José Luis Espert quien se acercó para señalar de “que estaba a favor de la policía y en contra de los delincuentes. El reclamo de los policías es válido”, dijo y se convirtió automáticamente en el primer liberal antiestado que apoya un reclamo salarial. Igualmente, esperemos que Espert no “implosione” cuando se anime a llegar hasta las noticias policiales, sea el diario que sea: con tomar los del día siguiente de estas declaraciones le puede alcanzar.
La cosa no termina ahí, porque al día siguiente la “protesta salarial” de la Bonaerense rodeó la quinta de Olivos, con las armas reglamentarias en sus respectivas cartucheras. Algunos se preguntaban cómo es que, si el “sirenazo” era por el aumento de los sueldos y la “patronal” es el Estado provincial, no rumbearon para el lado de La Plata. A pesar de todo, salieron el vocero y el secretario general de la Presidencia y les anunciaron que Alberto Fernández invitaba a un grupo representativo a pasar. Los policías se negaron y exigieron que salga el presidente. Por suerte, esto que comenzaba a pasarse de castaño oscuro, empezó a ser repudiado por distintos sectores y la protesta se disipó. Hay que decir que hubo algunos "llamativos silencios". La que sí se expresó inmediatamente fue la autoproclamada "defensora de la República y de las instituciones", que reaccionó ante el hecho sedicioso con un rápido tuit que rezaba "cómo extrañamos a Vidal"...
Fasolita, querido, a ver cuándo venís por acá
Mientras la Sputnik V demostró ser segura y avanza en pruebas a gran escala, científicos estadounidenses acusan a Donald Trump de presionar para tener la propia en estos meses y temen que se aceleren los tiempos necesarios por una cuestión electoral. Pocos renglones le han dedicado aquellos que tenían serias dudas de la primera y grandes esperanzas en la segunda. A pesar de esto, cabe decir que no es en la única carrera en la que se encuentra involucrado el presidente de los EEUU. El noruego Christian Tybring-Gjedde (no me pida que lo pronuncie), miembro del Parlamento de su país lo nominó como candidato a recibir el premio Nobel de la paz. Adujo como razones los esfuerzos realizados para resolver los conflictos prolongados en todo el mundo, como la negociación entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos, aunque no aclaró muy bien cómo es que Trump lo suele lograr. La paz de los cementerios también puede ser llamada paz. Nos quedamos en medio oriente porque, teniendo en cuenta que la existencia de una vacuna que funcione en poco tiempo se parecerá a un milagro, si hay una tierra propensa a que éstos se realicen por prepotencia bíblica esa es Tel Aviv, donde esta semana “empezó a llover marihuana”. “Es como el maná, pero pega más”, se escuchó decir a unos creyentes transeúntes. Aunque algunos ya lo quisieran, no era el dron de dios el que producía este milagro sino una agrupación llamada “el dron verde”, quienes arrojaron a través del artefacto centenares de sobrecitos con cannabis y prometieron volver con más.
Mai onli frend di end
Sin embargo, la noticia que se lleva el destacado de esta semana es la que nos cuenta que en Francia se realizó una fiesta nudista en la pileta de la terraza de un lujoso hotel con 800 invitados de los cuales, días después, 240 habían dado positivo de coronavirus, provocando que el resto de los participantes queden aislados y en observación, mientras el pueblo de Hérault donde se encuentra el lujoso Cap d´Adge, pidió que cualquiera que tenga entre sus planes visitarlos posponga su viaje. Esto no hubiera pasado si no hubiesen rechazado a mi abuela, que enseguida les hubiera dicho “nenes, abríguense el pecho que se pueden pescar algo que los pueda enfermar”.