"El año que viene vamos a tener que trabajar para que haya una nueva mayoría"
Por Boris Katurnaric, Juan Cruz Guido y Miguel Martínez Naon
Agencia Paco Urondo: El sábado se realizó el Foro por la construcción de una nueva mayoría popular y fue orador en la mesa de medios, ¿qué se planteó?
Edgardo Esteban: Sí, la verdad que fue una mesa más que enriquecedora para uno que trabaja en medios hace tanto tiempo y poder, de algún manera, expresar en este foro, que busca cómo construir estas nuevas mayorías, lo que pasa en las comunicaciones. Hoy leía una nota en el diario Perfil sobre un joven de treinta años que vive permanentemente pegado al presidente Mauricio Macri, sacándole fotos y anotando mensajes para lo que se llama “Snapchat”. Justamente ayer preguntábamos cuántas de las personas que estaban ahí participaban o trabajaban con la aplicación y prácticamente ninguno conocía esta nueva herramienta que aparece en las redes sociales. Entonces, cuando uno se pregunta por qué Mauricio Macri utiliza esta alternativa, descubre que el 67% de los jóvenes entre 17 y 24 años están activos y participando en estas redes. Por eso son necesarios estos foros, para empezar a analizar las nuevas alternativas de comunicación, principalmente para los que venimos de la vieja historia del periodismo, de lo que es la construcción de los trabajos en radio, televisión o lo que son las corresponsalías.
APU: ¿Cree que la incorporación de estas nuevas tecnologías pueda servir para equilibrar un poco la balanza ante la indiscutible hegemonía de ciertos grupos mediáticos?
EE: Hace dos viernes hubo un encuentro de referentes importantes sobre lo que son los blog en las redes tradicionales y no se conocían entre ellos. No trabajaban, ni construían alternativas comunicacionales conjuntas entre estos espacios que están tratando de trasmitir una voz alternativa ante esta hegemonía que están teniendo las grandes corporaciones mediáticas. Un situación que no se si llamarla fracaso pero sí, como decía García Linera, dificultades y falencias que hemos tenido los que acompañamos a los gobiernos progresistas en la región en lo que es el tema comunicacional. Esta alternativa de empezar a entender que hay nuevas estructuras comunicacionales y que tengamos que acostumbrarnos a trabajar con nuevas herramientas, no es menor a la hora de contrarrestar ese avasallamiento que hoy tienen las grandes corporaciones mediáticas. Hace unos días el multimedios Clarín anunciaba que se iba a separar y que por una lado iban a estar TN, Canal 13, Metro, Mitre, y, por el otro, las estructuras que en los 90 marcaron un camino de hegemonía y monopolio como fueron Fibertel, Cablevisión y, ahora, Nextel. Justamente de esa estructura vamos a sentir el cimbronazo de un ataque que va a buscar comprar y atacar a las pequeñas cooperativas que crecieron en estos 12 años de transformación que tuvo la Argentina. Desde esa perspectiva, hay que ver lo que pasa en la región, ver cómo nos comunicamos y empezamos a marcar herramientas nuevas para construir una nueva mayoría para que dentro de poco tiempo podamos, de igual a igual, disputar y recuperar el camino ganado a estos gobiernos de derecha que vienen por los intereses de las corporaciones y las empresas para hacer buenos negocios en detrimento de los pueblos.
APU: Teniendo en cuenta la situación del Mercosur con la asunción de Venezuela a la presidencia pro-tempore virtualmente detenida y una tensión en aumento con el reciente congelamiento de las relaciones diplomáticas entre Paraguay y Venezuela. ¿Cómo piensa que se puede destrabar este conflicto?
EE: Bueno, me parece que parte de este proceso de lucha que uno vive acá en la Argentina es lo que está padeciendo la región y Venezuela en particular. Una situación de hostigamiento con un gran dosis de hipocresía ya que mientras las grandes estructuras mediáticas están preocupadas por Venezuela, poco hablan del gobierno de Temer (Michel, Brasil), de la crisis económica e institucional de un gobierno débil que es muy similar al que tuvo Paraguay luego de Lugo (Fernando), donde el parlamento operó en complicidad con la justicia y la corporaciones mediáticas. De esa perspectiva poco se habla y, en cambio, se cuestiona a un gobierno que fue elegido por el voto popular y que tiene un proceso de cambio. Hace pocos días, el Tribunal Electoral planteaba los tiempos que se necesitan para llamar a un plebiscito o hacer una compulsa como pide el Congreso y los partidos de derecha. Pedido que, de todas maneras, se está respetando a pesar de que no existe una causa justificada. Es simplemente un gobierno que tiene un proyecto distinto al de la oposición que, por cierto, es muy similar al que se está desarrollando en la Argentina y justamente en Brasil.
APU: Hay un análisis que refiere a que esta “encerrona” que le están haciendo a Venezuela dentro del Mercosur, busca excluirla del organismo para luego negociar en conjunto el ingreso al nuevo ALCA que representa la Alianza del Pacífico.
EE: Lo que ha marcado Macri con el tema de la Alianza al Pacifico es definitivamente volver a esa perspectiva de lo que fue el ALCA en los años 90 con el Consenso de Washington. La primera cumbre del ALCA fue el 12 de diciembre del año 1994 y se tardó 20 años para que los presidentes democráticos de la región, en la cumbre de Mar del Plata del año 2005, le dijeran que “no” a esa etapa. Pero esas estructuras de poder son las que ahora están destruyendo el país, dilapidando la industria nacional y las economías regionales inundando el mercado interno de productos importados. Falta que entre dulce de leche de un país europeo para que estemos completos en esta apertura que no tiene compasión ni respeto por todo lo que se había logrado en estos últimos años. Me parece que está marcando esa pauta. Ya hoy no se habla del Mercosur, ni de los legisladores del Parlasur y se ha tratado de desprestigiar ese parlamento que en Europa tan bien funciona como representación de todas las naciones de una región. No se habla de la Unasur o de lo que significa la Celac, todos estos lazos de unión y de integración que tuvimos en el último tiempo y que ellos pretende destruir. Yo creo que es un proceso de transición y, como dice Garcia Linera, fue el final de una ola y ahora hay que empezar a reconstruirse para ver como nos levantamos, como empezamos a generar ese camino de esperanza que tanto se vio en la Argentina durante 12 años. Por eso creo que no hay que bajar los brazos ante estos gobiernos que tienen poco vuelo. Hay que plantarse como fue lo que ocurrió con Hebe de Bonafini o lo que significaron las protestas y ruidazos por el aumento desmedido en las tarifas, y marcarle al gobierno que hay un pueblo que no esta dispuesto a retroceder en todo lo obtenido.
APU: A partir de esta jornada del Foro que se desarrolló, ¿pudieron acordar una agenda en común para la construcción de esta nueva mayoría?
EE: Estos movimientos, yo lo estoy viviendo, se gestan semana a semana. Ya mañana tengo otra reunión y así se va replicando entre todos los compañeros que estamos trabajando y colaborando para generar este tipo encuentros. El sábado me sorprendió la cantidad de gente que había, el Aula Magna de la Facultad de Sociales estaba desbordada. No solamente de estudiantes, había gente que se acercó a ver, a acompañar y escuchar a los referentes que hablaron. Por eso creo que es un proceso que tenemos que ir construyendo y estar movilizados porque el año que viene vamos a tener que trabajar para que haya una nueva mayoría, una unidad en función de lo vivido. Es necesario, entonces, generar un espacio de diálogo y de autocritica, pensar lo que nos pasó y hablar de las debilidades que tuvieron los gobiernos progresistas. Empezar a estar juntos y escucharnos para ver que nos une y que nos fortalece y darle alternativa a los nuevos referentes que tenemos que construir para enfrentar al actual gobierno en elecciones.