“El gobierno nos estigmatizó, nos persiguió, nos despidió y nos reprimió”
Por Soledad Allende
El sábado 7 de octubre en el Polideportivo Gatica de Avellaneda, se realizó el Encuentro Regional de la Agrupación Verde y Blanca de ATE, que contó con la presencia de alrededor de 600 personas.
El encuentro tuvo como principal objetivo de discutir estrategias de reunificación de la CTA, de resistencia al ajuste neoliberal llevado adelante por el gobierno, y la intención de la conducción del sindicato de reformar sus estatutos. Una reforma estatutaria que es considerada contraproducente por ésta agrupación para la fortaleza del sindicato, e inoportuna, dada la necesidad de los estatales de contar con organización y un plan de lucha que les permita resistir el ajuste, sobre todo en un escenario post elecciones que se prevé un clima hostil para los intereses de los trabajadores del Estado.
Daniel, “El tano” Catalano, secretario general de ATE Capital, conversó al respecto con AGENCIA PACO URONDO.
APU: ¿Cuáles son los principales desafíos para la agrupación Verde y Blanca en ésta etapa, respecto del ajuste neoliberal por un lado y de la organización de los trabajadores por el otro?
DC: El desafío que se plantea es el de reconstruir al movimiento obrero, y que esa reconstrucción nos posibilite a nosotros pelear para que haya un cambio de paradigma en el modelo económico. Son desafíos que realmente son muy grandes. Pero nosotros pensamos que si no logramos superar esta primera etapa donde podamos consolidar la unidad de los laburantes, nos vamos a tener la estructura para frenar al neoliberalismo, que viene avanzando con mucha fuerza, no solo en la Argentina sino en la región.
Los empleados públicos somos los más afectados, porque el gobierno decidió pelearse con los trabajadores públicos. El gobierno primero nos descalificó, nos estigmatizó, nos persiguió, nos despidió, nos reprimió, y ahora estamos atravesando la tercera reforma del estado. Lo que están haciendo con la refundación del PAMI, no es fácil, lo que están planteando respecto de las modificaciones en el sistema previsional.
Lo que vemos es un recambio generacional muy importante, con compañeros y compañeras que asumieron el desafío de la etapa de ir al frente y ser quienes encabezan la reconstrucción del país. Eso es producto de doce años de politicas de inclusion social.
Doce años de kichnerismo son doce años de creer en un proyecto de país. Hoy estamos cosechando eso, un colectivo de militantes jóvenes y de compañeras que asumen el compromiso de levantar las banderas de Néstor y Cristina.
APU: ¿Cuáles son las implicancias de la reforma del estatuto del sindicato en este contexto?
DC: La reforma estatutaria va a implicar una descentralización y atomización de los lugares de trabajo. Lo que van a hacer es agarrar los distritos, y dividirlos por cantidad de afiliados. Entonces lo que van a lograr es que las patronales o los funcionarios puedan operar directamente sobre el colectivo de trabajadores. Lo que se busca es una descentralización política, sin perder la concentración económica del sindicato. Miran el modelo chileno, el modelo de Panamá. Lo que están haciendo es romper todo el encuadre sindical. Así que estamos tratando de discutir y debatir en profundidad qué hacer. Sabemos que la descentralización no implica democracia sindical. Para que haya democracia sindical tiene que haber un compromiso de las conducciones para permitir la participación. Entonces no va a ser necesario discutir las minorías, si uno lo que hace es abrir el sindicato para que todas las voces valgan. Hay que tratar de que el estatuto actual sea respetado.