Timerman: "A la derecha no le importa un juicio ni que se sepa la verdad"
El ex canciller argentino Héctor Timerman es una de las víctimas de la persecución política impulsada por el juez federal Claudio Bonadio. Al momento, el ex funcionario kirchnerista se encuentra con prisión preventiva que fue otorgada por problemas de salud. En una entrevista con Página 12 habló sobre la causa AMIA y la imputación por una supuesta "traición a la patria" realizada por el juez macrista.
De esta manera, explicó: "Nosotros rompimos normas del establishment internacional con el memorándum. Un país del tercer mundo como la Argentina no podía tener la audacia y la independencia para dirimir con Irán el acto de violencia y muerte que fue el atentado contra la AMIA. Estados Unidos, Alemania, Francia, el Reino Unido, China y Rusia firmaron un acuerdo con Irán. Ahora Donald Trump lo quiere terminar, pero nadie dice que quien firmó ese acuerdo con Irán, Barack Obama, es un traidor a la patria. ¿Por qué? Porque ellos son el selecto club de los que ponen las reglas".
Además, profundizó: "La derecha internacional utiliza el caso. No les importa un juicio ni que se sepa la verdad. Nuestro criterio, innegociable, siempre fue que tiene que haber un juicio, más aún teniendo en cuenta lo que nosotros vivimos durante la dictadura".
Timerman explicó que el objetivo del memorándum era "destrabar una causa que no podía avanzar. Y le aseguro que era muy difícil. Estaban los que pretendían que los imputados tomen un avión y vengan a entregarse. Eso no ocurrió en 19 años. Cristina me insistía en buscar alternativas y una posible era que el juez viajara a Teherán a tomar las declaraciones. En eso puso el acento la Presidenta".
"El enojo de la derecha internacional. Los fondos buitres, la derecha norteamericana e israelí siguen insistiendo en que fue Irán quién cometió el atentado, pero no permiten que dictamine la justicia. Y así estamos hace 23 años. La Argentina debe saber la verdad, no podemos ser alfiles de conflictos ajenos. La causa AMIA no puede ser un arma de propaganda sólo para castigar un país", sintetizó el ex diplomático.