La desesperación de un despedido: tiene a su hija con discapacidad y necesita la obra social
Por Daniela Morán
Entrando en los festejos de fin de año, la empresa Finning CAT lanzó nuevos despidos bajo un preventivo de crisis que el gobierno nacional aprobó en el mes de noviembre. Los trabajadores denuncian que la empresa tiene "un plan de atacar derechos laborales y flexibilizar mano de obra". Además, aseguran que "ese preventivo es falso ya que la empresa obtuvo las mejores ganancias de toda Latinoamérica los en últimos dos años".
Durante el 2018, la multinacional despidió o incitó a tomar retiros voluntarios a 120 empleados. En diálogo con FM la Uni (91.7), Carlos Ruiz, trabajador de la empresa, comentó que la semana pasada siete compañeros de él aceptaron indemnización y cinco fueron reubicados en San Juan y Neuquén para no perder su fuente de ingreso. El resto espera la resolución de hoy por la tarde luego de la reunión con autoridades del Ministerio de Producción y la UOM.
“Todos los casos son importantes, pero este es particular”, aseguró el Ruiz y relató la situación por la que está pasando su compañero Javier Nogal, padre de Micaela, una joven discapacitada de 20 años. Ella padece de mielomeningocele e hidrocefalia, dos enfermedades muy complejas. A pesar de esa situación, y gracias al apoyo de su familia, Micaela concurre todos los días a la Universidad Nacional de Gral. Sarmiento para cursar la Licenciatura en Comunicación. “Para nosotros es un asesinato social que dejen al papá sin trabajo y a ella sin obra social”, resumió Ruiz al respecto y agregó que Micaela ya está en carrera dentro de la universidad y que “cada tanto la tienen que operar por la prótesis que lleva en su espaldita”.
Por su parte, FM la Uni se comunicó con Silvia González, mamá de la joven, quien comentó que hace 14 años que su marido Javier trabaja en Finning CAT y que nunca faltó a trabajar, ni se tomó licencia. “Estamos con mucha tristeza e indignación”, dijo Silvia y comentó la situación por la que pasa la familia. “Para todos es terrible quedarse hoy sin trabajo, pero nosotros tenemos una hija con discapacidad y es dependiente de silla de ruedas. Quedarnos sin trabajo significa que Mica se quede sin médico, sin estudios, sin nada”, describió.
“Por desesperación le escribí a todo el mundo”, relató Silvia. Y repasó: habló con la UOM local y con su referente en San Miguel, Diego Speche; lo mismo hizo con la obra social OSECAC, para que consideren su situación en el caso de que el despido se efectivice. “No he tenido respuesta”, se lamentó.
“Javier habló con recursos humanos y le dijeron que ya era tarde porque ya figuraba en la lista y que ellos no sabían de la situación de Mica. No sé quién lo puso en esa lista, pero quién lo puso también lo puede sacar”, afirmó.