Mafiosos, matones y vendepatrias: la herencia macrista en ARSAT
Por Alfredo Moreno* y Gabriel Baum**
“Misógino, autoritario, despŕecia el conocimiento,’la mejor escuela fue la SOCMA de Franco Macri’”, dice un compañero de ARSAT. “Es un viejo alcahuete de los Macri. Quienes le deben una grande y gratitud por siempre porque se comió una estancia a la sombra pagando pagando los platos rotos cuando el caso del contrabando de Sevel”, sostiene un ex-empleado del Grupo en los años 90 cuando el entonces joven Mauricio incursionaba en el mundo de la tecnología a través de Itron, en sociedad con Siemens.
El portal Nuestras Voces realizó una detallada historia de Raúl Martínez , un hombre de confianza de la famiglia, que ahora pretende cobrar doble indemnización para salir de Arsat donde se desempeñó como Presidente del Directorio hasta hace pocos días, cuando fue “desvinculado” por las nuevas autoridades designadas por el Gobierno nacional.
Formado en la escuela de Franco, Martínez fue (es) un todoterreno que acompañó a Mauricio en sus andanzas en Boca Juniors, en el gobierno de la ciudad y finalmente en la Nación, donde descolló secundando a otro hombre del Grupo en el Ministerio de Modernización en asuntos tan relevantes como el intento de imponer el voto electrónico para las elecciones nacionales, frustrado por la movilización ciudadana, donde descollaron tecnólogos e investigadores de las TIC.
La última -al menos por el momento- escala en su gestión pública lo muestra al comando de una masiva intervención en ARSAT, de donde no quiere salir sin hacer daño y cobrar una indemnización “acorde” con los servicios prestados…
Su predecesor en la empresa pública de TIC fue un cordobés llamado Rodrigo De Loredo, cuyo mayor mérito para la tarea resultó ser el yerno del entonces Ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, otro cordobés que será recordado tanto por sus amistades con los militares de la última dictadura como por su responsabilidad en el hundimiento del submarino ARA San Juan, cuando asumió el Ministerio de Defensa. La gestión de De Loredo comenzó una tarea de reformulación-paralización-subordinación que luego sería profundizada por Martínez, quien demostró que además alcahuete, matón, misógino, hombre de paja del Grupo, también aprendió rápido y resultó ser muy efectivo para destruir el patrimonio nacional y entregarlo al extranjero. La herencia macrista en ARSAT gestionada por el penoso De Loredo y el “pesado” Martínez puede resumirse en:
Área Satelital:
La discontinuidad, perpetrada por el gobierno de Macri, del programa de desarrollo de satélites geoestacionarios, establecido ṕor Ley 27208/2015, fue una política de entrega de soberanía y tuvo sus consecuencias, no fue simplemente “dejar de hacer”.
El 22 de julio de 2019 mediante la Resolución 2861/2019, el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) aprobó el Proyecto de Acceso a Internet Satelital a Domicilios de la Zona Cordillerana Sin Accesos a Internet Terrestre, consistente en brindar acceso a Internet satelital a los habitantes de la zona cordillerana, mediante la provisión y despliegue del equipamiento necesario para la recepción de dicha conectividad. Este servicio tiene bonificado el primer año a costa de ARSAT. Los fondos para solventar la ejecución del proyecto, así como la contratación de auditorías, provienen del Fondo Fiduciario del Servicio Universal. A consecuencia de la mencionada resolución, ARSAT deberá instalar 5 mil antenas de acceso a Internet de banda ancha satelital en la Cordillera de los Andes. En mayo de 2019, ARSAT compra a la empresa Hughes Network System 5000 antenas para ser instaladas en municipios de la zona cordillerana. Además, contrata con la misma empresa, el acceso satelital para dar servicio de internet. Es decir “paquete llave en mano”. Hughes de origen estadounidense, es la misma corporación que en el 2017 intentó quedarse con el área satelital de ARSAT. ARSAT no cuenta con la tecnología HTS (High Throughput Satellites) para brindar banda ancha, como especifica el ENACOM. Ahora, la empresa pública ofrece este servicio mediante el satélite Hughes-63 West de alta capacidad que se encuentra operando en territorio chileno.
Las autorizaciones dispuestas por el ENACOM a 25 satélites de bandera extranjera pertenecientes a las empresas Eutelsat, Hispasat, SES, Intelsat y Telesat o de sus subsidiarias en la región (Hispamar, Eutelsat Américas) ha reducido el mercado de ARSAT. Las autorizaciones se realizaron en base al Reglamento de Gestión y Servicios Satelitales aprobado mediante la resolución 3609 del año 1999. Este Reglamento establece en su artículo 22 que debe existir un Acuerdo de Reciprocidad mediado por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) entre las empresas que brindan servicios satelitales. La interpretación viciada para favorecer los negocios privados ha configurado el pool de empresas mencionado y no cumple con el principio de reciprocidad establecido.
En el 2018 el Ministerio de Modernización realizó una interpretación reglamentaria y otorgó autorizaciones en función de la posición orbital de la administración notificante ante la UIT (Unión Internacional de Telecomunicaciones), cuando el reglamento establece que la autorización debe ser en función de la nacionalidad del satélite. Hispamar, empresa satelital brasileña subsidiaria de la española Hispasat, brinda servicios satelitales que debían estar cubiertos por el satélite argentino ARSAT -3 discontinuado por el gobierno de Cambiemos.
El 29 de abril de 2019, el Boletín Oficial publica la Resolución 566/2019, por la cual la Jefatura de Gabinete de Ministros autoriza a la empresa Hispamar Satélites S.A. a proveer facilidades satelitales mediante el satélite geoestacionario denominado Amazonas-5, en la banda de frecuencias Ku, desde la posición orbital geoestacionaria de 61° de Longitud Oeste. Los otros dos satélites de la empresa brasileña, Amazonas-2 y Amazonas-3, lanzados en 2009 y 2013 respectivamente, fueron aprobados en el espacio satelital argentino en el año 2017.
Otras de las consecuencias de la discontinuidad del ARSAT-3 fue poner en riesgo la conservación de la posición orbital 81º Oeste. Los efectos colaterales de estas decisiones políticas, implican una pérdida de 7.000.000 de euros para el Estado Argentino en la contratación directa del satélite Astra-1H propiedad de la multinacional SES. La dudosa maniobra comercial donde se reubica el satélite Astra-1H en la Posición Orbital Estacionaria (POG) 81º tuvo que cumplir un cronograma de 12 pagos. El inicial de 1 millón de euros por la reserva del satélite, por la mudanza del satélite a la posición orbital acordada otro millón de euros, esta reubicación se produjo a fines del año 2018. Los cinco millones de euros restantes ARSAT deberá abonarlos en 10 cuotas mensuales de 454.545,45 y una cuota final de 454.545,50 euros. ASTRA-1H es un satélite lanzado al Espacio en el año 1999 con una vida útil de diseño de 15 años.
La Red federal de Fibra Óptica (REFEFO)
La REFEFO es una enorme red de comunicaciones de tecnología muy avanzada (OTN) que recién en estos momentos están comenzando a desplegarse en muchos lugares del mundo, en particular en Latinoamérica. Este tipo redes son elementos críticos e imprescindibles para poder desplegar redes 5G y poder desarrollar en nuestro país las tecnologías constitutivas de la Industria 4.0, así como la Internet de las Cosas. Esta fue otra parte de la “pesada herencia” que recibió el macrismo en ARSAT, y transformó en un gran negocio para la famiglia, amigos y socios. Así fue como congeló y pesificó las tarifas de ARSAT (con el dólar a $40) para mayoristas proveedores de internet hasta 2020. La presentación a cargo de nuestro protagonista Martínez, ya CEO de ARSAT, y su jefe político el ex Secretario de Modernización Andrés Ibarra, a principios de septiembre de 2019 beneficia a los intermediarios de la venta del servicio con nulo impacto en los precios del consumidor final. Esta medida profundizó el empobrecimiento de la empresa pública ya que los costos de mantenimiento de la red federal de fibra óptica están dolarizados.
En junio de 2016 Grupo Clarín compró las compañías Trixco SA, Skyonline Argentina SA, Netizen SA, Infotel SA y Callbi por 138.2 millones, obteniendo de esa manera frecuencias que no estaban asignadas a la transmisión de datos móviles (120 MHz en la banda de 2,5 GHz y otros 20 MHz en la de 900 MHz). En diciembre 2016 el gobierno de Mauricio Macri, por decreto 1340, estableció que el ENACOM sería responsable de la re-atribución de frecuencias (Refarming) del espectro fijando la compensación económica y uso compartido para las frecuencias antes atribuidas a otros servicios. El 20 de febrero de 2017 ese organismo autorizó la utilización de las bandas de 900 MHz y 2,5 GHz para servicios de telefonía móvil, las dos franjas adquiridas por el Grupo Clarín. La Resolución 1299-E/2017 del ENACOM indica que las obligaciones de despliegue que debe cumplir Clarín/Nextel para dar telefonía celular están sujetas al avance o no de la red troncal de fibra óptica de ARSAT. Servicios públicos y negocios privados….
El Centro Nacional de Datos
El Centro Nacional de Datos fue construido por la presidencia de Cristina Fernández para prestar servicios estratégicos al gobierno, la industria y la sociedad, como tal, fue concebido y diseñado de acuerdo a los más altos estándares internacionales de desempeño, confiabilidad y seguridad. Una vez más, el macrismo dejó de lado los intereses de la sociedad y la nación, el CND pasó 4 años sin actualización tecnológica y duplicó su plantel profesional. Los servicios en la “nube” alcanzados al 2015 fueron fragmentados y descuidados por “prioridades de negocios”...entre ellos, el acuerdo de ARSAT con la red LoRa (Load Range o de largo alcance) permite implementar negocios de IoT (Internet de las Cosas) con el sector de los grandes acopiadores y exportadores de granos. La red tiene capacidad de almacenamiento y gestión de datos, recolectando información en el Centro Nacional de Datos de la empresa pública. Se estima en más de un millón de dólares el acuerdo ARSAT – CISCO para incorporar tecnología que permite configurar estos servicios en una nube privada.
La Televisión Digital Abierta fué otra de las grandes víctimas del macrismo. Luego de terminar con el Fútbol para Todos -incumpliendo una de sus muchas mentiras de campaña-, destrozó maravillas de la televisión pública educativa como los canales Paka-Paka y Encuentro, así como todos los medios públicos, y persiguió de todas las formas a las emisoras y periodistas populares y comunitarias. Como parte de este ataque a la cultura nacional, desde 2016 la TDA perdió también 8 de sus 94 antenas gigantes, instaladas por y a cargo de ARSAT, por falta de mantenimiento, y quedaron sin construir otras 15. Montadas sobre la REFEFO, estas emisoras daban servicio gratis de alta definición al 95% de la población, especialmente a jubilados y gente humilde, a través de decodificadores “set-top-box” que fueron repartidos por la ANSES. En 2016 quedaron 100.000 de ellos ya construidos y sin entregar… hasta las elecciones de este 2019. Ahí se distribuyeron 25.000 a través de punteros políticos.
ARSAT, como se ve, es una gran empresa de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, mucho más que los satélites que tanto nos representan y enorgullecen. La gestión del macrismo no la desmanteló, sino que la transformó en un botín más del saqueo de la Argentina, para hacer negocios, para fortalecer la dependencia tecnológica y potenciar al Grupo Clarín, parte relevante de su esquema de poder. El oscuro matón y misógino que se hizo cargo en el final, no es más que el horrible rostro de la decadencia de un régimen mafioso que no deberá volver. Nunca más.
Queda por delante una enorme tarea a la muy nueva gestión, encabezada por Pablo Tognetti y en la que están comprometidos los trabajadores de ARSAT, en todas sus diferentes áreas y niveles. Deberá retomar el Plan Satelital como se ha anunciado hace pocos días, así como transformar la REFEFO en la columna vertebral del sistema de telecomunicaciones argentino y constituirse en instrumento clave para asegurar la conectividad de todos los habitantes con calidad y a precios accesibles.
Una mención muy especial merece el Centro Nacional de Datos que tiene por delante la enorme tarea de potenciar los servicios en la nube, implementada sobre la base del CND, para que los organismos municipales, provinciales y nacionales dispongan de aplicaciones de gestión gubernamental y procesos de big data. La construcción de una plataforma de gobierno digital requiere, como prerrequisito, capacidades de almacenamiento y cómputo a gran escala que están potencialmente disponibles en ARSAT, requiriendo solamente la decisión política y una inversión inicial mínima, que por cierto se puede recuperar y pasar rápidamente a una situación de autosostenimiento y superávit sobre la base de la venta de servicios a una amplia variedad de usuarios.
* Ing. Proyectos TIC ARSAT Profesor TIC en UNMoreno
**Investigador del LIFIA y Profesor en UNLP