Bolsonaro sobre la importancia del acuerdo: “¡Miren! ¡El perro tiene la cola peluda!”
Por Groncho Mars | Ilustración: Leo Olivera
“Te voy a decir algo que puede ser errado o poco estratégico, pero no puedo dejar de ser sentipensante”, me dice Gregor, “Venezuela fue nuestro Kamchatka contra el avance neoliberal. Parecía la más débil y aguantó donde nosotros no pudimos resolver la ecuación, ni Correa en Ecuador, ni después Evo y ahora tampoco el Frente Amplio en Uruguay. Pero a un costo altísimo por el desgaste. Yo no entiendo mucho de diplomacia. Por ahí es algo consensuado, ante las debilidades de todos los implicados tras el paso de la topadora conservadora. El tema es qué intervenciones y cuántos bloqueos más puede soportar Venezuela. La sensación es que en este momento, como aliados que crecimos contra el ALCA, nos hicimos a un costado mirando sólo nuestra conveniencia... Eso sí, ni se les ocurra encargarle la organización del 17 de octubre a Felipe, te lo convierte en el día de la Neutralidad activa ¿Vos qué pensás?”. Ustedes conocen lo que vengo escribiendo acá últimamente, pero hoy tengo ganas de preguntarle a este jovencito para qué empuja, si ya sabe. Mejor, arranquemos.
Mamá y papá están contentos, la nena hizo posición
No se si lo que oprime es la realidad o la forma en que la reflejan los operadores de prensa, uno no puede más que asombrarse ante los planteos que este personal calificado expone. Pasaré a detallarlos por orden de mérito, en una especie de podio donde se vuelve irrisorio el contraste. Días atrás, conversando en “la mezasa” con Jorge Lanata, Juana Viale trazó una línea imaginaria para plantarse y contestarle al presidente Alberto Fernández, quien había afirmado que “el más tonto de los ricos tenía mayores posibilidades que el más inteligente de los pobres”, con un contundente “a mí nadie me regaló nada”, algo que fue amplificado por muchos medios. Un poco más de una semana después, nos enteramos que la abuela Mirtha Legrand le había obsequiado, hace varios años, una lujosa propiedad en San Isidro. Y que ese sería sólo uno en la larga lista de regalos, ya que antes habían corrido la misma suerte un auto y su primer departamento en Barrio Parque. “¿Acaso vos te atreverías a afirmar que mi abuela es nadie?”, preguntó ofuscada la joven actriz, para luego aclarar que esos no eran presentes, sino algo así como un free pass para poder pertenecer a tan benemérita familia. “Es que bo no te esforzás por comprenderla”, dicen los amigos de Cayó la Cabra que justo pasaban por ahí, “qué culpa tiene ella de que a la abuela le haya sobrado esfuerzo”. Ah, una cosita más: La Nación, bancate que publicaste una nota y que se te enojen, no dejes el link original para que te lleve a la nota rectificatoria. Después de todo, lo que dijo el hermano es que hace seis años que tiene la casa, nunca negó que se la regalara Legrand. La segunda en la lista es una nota de Daniel Santoro en donde muestra su preocupación por “las filtraciones en las actas secretas de la AFI entre 2016-18”. Según el hombre con más libros en mesas de saldo en el mundo, las filtraciones estarían provocando “un pedido de repatriación masivo y urgente de un montón de espías”. Déjenme decir una cosa. Más allá de la situación para nada sencilla y sin ánimo de minimizarla, que alguien acusado de ser actor necesario en la banda de D´Alessio por realizar labores de inteligencia, espionaje e investigación criminal sin poseer ningún tipo de facultad legal para ello, siga escribiendo notas referidas a la AFI, sólo puede suceder en Clarín. ¿Se podría entender esta nota como defensa del gremio? Y ya que hablamos de defensa, la tercera nota es la presentación de Antonio “Jaime” Stiuso en el juzgado de Augé como vistima del espionaje macrista, por la posible aparición de una carpeta que contendría su legajo personal como exagente, en un allanamiento. Esta caradurez fue rechazada con buen tino por el juez Augé quien, en la confianza que genera el despacho, le habría contestado, en buen lenguaje jurisprudencial, que “espía que es robado por otro espía, que le vaya cantar a Laura Alonso o a llorar a la CIA”. Un bonus tracks para este podio, pero positivo: desde esta columna bancamos la llegada a las transmisiones de la selección de Ángela Lerena. Porque realmente nos gusta escuchar alguien que sabe de fútbol, algo que ha demostrado desde la línea de cal todos estos años. En cuestión de méritos, parecido no es lo mismo, no se si me entiende.
Porque un campéon, a veces cae
El segundo round del per saltum presentado por los jueces Bruglia, Bertuzzi y Castelli también terminó en empate. Primero, el Concejo de la Magistratura lo rechazó. Después, el procurador general de la Nación, Eduardo Casal, salió al rescate y dictamino a favor de los traslados. El martes le tocó el turno al máximo tribunal y estos acordaron no estar de acuerdo y pasaron la resolución posiblemente para la semana que viene. Eso si, ninguno de los otros 4 cortesanos se hicieron eco de las palabras de defensa del presidente Carlos Rosenkrantz, que sigue sin poder conseguir un acuerdo, lo que podría inaugurar una nueva serie de dichos de esos que empiezan con “está más sólo que”, con la que se suele rubricar ciertas faltas de amistades u otro tipo de cariño. Hablando de eso, Casal también tuvo que salir en defensa de la exdiputada Elisa Carrió. La Procuración General de la Nación emitió un dictamen ante la Corte Suprema a favor de que se retire una sentencia contra la líder de la Coalición Cívica, dictada en el marco de una demanda que les inició en el fuero civil el administrador general de la Corte Suprema, Héctor Daniel Marchi. Rebobinemos. Lilita había denunciado a Marchi y al juez Ricardo Lorenzetti por enriquecimiento ilícito. El exjuez federal Sergio Torres archivó la denuncia por “inexistencia de delito”, ya que las pruebas presentadas por la exdiputada tenían la contundencia a las que nos tiene acostumbrados y ahora Carrió se come una demanda por daños y perjuicios. Para colmo, la fiscal Fabiana León le envió un escrito a la Cámara de Casación ratificando que no existen registros técnicos de ningún tipo de los aprietes… perdón, de las declaraciones de los arrepentidos en la causa de los cuadernos y la Justicia en lo Contencioso Administrativo Federal rechazó el amparo presentado por el bloque de diputados de Cambiemos, considerando válida la sesión de la Cámara Baja del 1 de septiembre pasado. “La República” no debe haber estado muy, muy feliz esta semana.
Yo era un hombre bien, tenía perro y mujer
En el ámbito internacional, Jair Bolsonaro promulgó una ley que agrava las penas para el maltrato animal en Brasil y lo hizo de una singular manera: al firmar el documento, alzó a un perro que puso su huella sobre el papel. No es que lo decidió de un día para el otro, el primer mandatario manifestó dudas con respecto a la reglamentación. “Si la promulgo, me criticarán que la pena es muy alta. Si la veto, los animalistas me van a pegar también”, habría confesado en una transmisión en vivo. “Esto es mucho más difícil que diferenciar a un niño de un enano”, habría declarado en off. Es que realmente estamos hablando de una situación donde había un ser que parecía no saber lo que estaba haciendo y se dejaba usar como parte de una puesta de escena, naturalizando algo que la mayoría de los humanos comprenderían como fuera de lugar, equivocado. Después estaba el perro, que se encontraba muy asustado. Mientras tanto, parece que la Justicia Electoral brasileña tratará de evitar que las noticias falsas contaminen las próximas elecciones, para lo que prometió perseguir a las “milicias virtuales” así como a su “financiación”. “Es una ardua tarea la que nos espera. En un principio pensamos que era algo titánico, casi imposible, pero al ver al presidente firmando el acuerdo con un perro nos dimos cuenta que era más probable detener a las fake news que intentar hacerlo con las ridículas, ya que todavía no se encuentran penadas por la ley”, habrían declarado en los pasillos integrantes de este máximo tribunal. Las noticias falsas es algo de lo que también se ha quejado Donald Trump, después de haber dejado en claro que nunca miente sino que presenta “hechos alternativos”. Lo cierto es que, luego del debate presidencial, el presidente de los EEUU le contó al mundo que él y su esposa Melanie dieron positivo por coronavirus. “Justo a tiempo”, dijeron algunos de sus asesores, pensando que esto lo alejaría por unos días de la campaña y le permitiría no seguir perdiendo votos. Mientras ambos se mantenían “aislados” en una lujosa habitación que consta de seis cuartos con sala de terapia intensiva, el resto del mundo conoció tres partes sobre la salud del mandatario, una especie de “te quiero mucho, poquito, nada”, pero al revés. El primero afirmaba que su estado era muy preocupante y habría salido de la propia Casa Blanca, nada menos que del jefe de gabinete, Mark Meadows. El segundo lo dio el médico que lo atendió, Sean Conley, quien dijo que el presidente de los EEUU “se encontraba bien”. Y la tercera la brindó el mismísimo Donald Trump, a través de un video por la red Twitter. “Va bien, creo”, dijo, y si bien algunos hicieron fuerza por ese “creo”, el magnate consolidó esa confusión que siempre tiene para aportar saliendo en un coche para saludar a sus seguidores presentes en la entrada del hospital Walter Reed, quienes se acercaron para manifestarle su apoyo. El que no dejó lugar a las confusiones fue su par chino, Xi Jinping, quien le envió su deseo de “pronta recuperación a él y su esposa”, a lo que Trump habría reaccionado tocándose el izquierdo, madera sin patas y cruzando los dedos. Y al tercer día, al igual que Jesús, se dio el alta, regresó a la residencia presidencial y saludó la partida del helicóptero quitándose la mascarilla, en una acción que resume todo un desafío. “¡Volveremos pronto a la campaña!”, tuiteó unos segundos después Mr. President, y recién ahí nos enteramos que en estos días no lo había estado. Y si todo esto no era totalmente confuso, su médico reconoció que el mandatario “todavía no está fuera de peligro”. “Creo que esto es un colapso de la verdad”, afirmó Andrew Norris, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de California en Santa Bárbara. Y ahora el que hace fuerza por ese “creo”, es Trump.
Disis di end
Sin embargo la noticia destacada de la semana es la que nos cuenta que Egipto anunció el descubrimiento de 59 sarcófagos de 2600 años de antigüedad en perfecto estado de conservación. En esta sección podríamos tener un apartado que se llame “¿Qué más podría pasar en este 2020?”, ya que además de los efectos generados por la pandemia del COVID 19 tuvimos que sortear las fechas de profecías del fin de mundo, versión maya, su rectificación gregoriana y la oculta en la Torá, la desaparición de Anabelle del Museo Warrent, a lo que ahora se le suma la aparición en Misiones de un Terminator en su versión de cabotaje, con todo lo que esto significa. Hacía este recuento de sucesos con la única intención de pedirle a las autoridades egipcias que por lo que más quieran, por nada del mundo se les ocurra abrir esos sarcófagos en lo que queda de este año, pero como ya lo hicieron, sólo resta rogar que no se les ocurra leer jeroglíficos en voz alta o abrir cualquier cosa que hable del más allá. Esta gente ni en pandemia aprende algo de las películas.