La caída de Buryaile: interna formoseña y vacío de la Sociedad Rural
Por Carlos Alberto Roble*
El dirigente formoseño siempre fue un representante del “campo” que se visibilizó en los medios concentrados en el debate por la 125.
Pero Buryaile se va peleado con todas las entidades rurales, como Federación Agraria, la propia Rural, CARBAP y en Formosa con el dirigente radical de la FAA, Rolando Ziesseniss, y el referente de los productores bananeros, Pánfilo Ayala, a quien nunca recibió como a los sembradores de frutas y verduras del país que terminaron regalando sus producciones.
Y también porque Etchevehere quería que ese ministerio fuera de la Sociedad Rural. Así se lo dejaron claramente explicitado al Presidente cuando lo recibieron con la alfombra roja y aplausos a rabiar en la anterior exposición del sector más rico del país. Para acceder a la cartera que dispone las políticas agropecuarias del país la Sociedad Rural retuvo soja en los silos especulando con los precios y un dólar más alto, como se prevé para los próximos meses.
Se afilió al radicalismo recién cuando fue propuesto candidato a gobernador en una entelequia que llevaba a otros dos aspirantes al mismo cargo, desvirtuando la ley electoral que rige en Formosa.
Buryaile no “se va”, lo echaron. Ya el Presidente lo había sacado de la pista en plena interna con el senador nacional por Formosa, Luis Naidenoff, quien fue el “ungido” para ir por una tercera reelección.
Además, en el seno del gabinete Macri trató a Buryaile de “versero” por los limones y el biocombustible que no pudo vender a Estados Unidos. Se va con diez millones de hectáreas bajo el agua, en estado de emergencia y sin ninguna solución.
El balance de Buryaile deja también un aumento del 54% del impuesto inmobiliario rural que impuso la gobernadora Eugenia Vidal en Buenos Aires; más de mil tambos cerrados en Córdoba y Santa Fe durante su gestión.
Y se va lejos, a Europa, adonde Macri manda a los que ya no quiere ver. Pero Buryaile deja un saldo a su favor porque deja Agroindustria después de arreglar sus deudas con el Banco Nación en un oscuro procedimiento con Melconian.
Sin embargo, Buryaile si bien deja bien sus bienes personales se le escapa su capital político en Formosa y está cada vez más remota posibilidad de ser candidato a gobernador en el 2019.
Mientras tanto Etchevehere, no solamente es un militante furioso del macrismo, sino que Macri lo pone porque tiene mucho en común con la mayoría de los ministros: causas judiciales pendientes.
El nuevo ministro de Agroindustria está involucrado en varias. En una de ellas se lo investiga por “administración fraudulenta” contra el Estado y en otra por “reducción a la servidumbre” de varios de sus empleados de su campo.
El camino del cambio está plagado de mentiras, sostenido por los sectores poderosos del país.
* Abogado y militante formoseño.