Macri propuso a un hombre del FMI para un organismo clave
Por Nicolás Adet Larcher
El gobierno de Mauricio Macri propuso a Mariano Federici como nuevo presidente de la Unidad de Información Financiera (UIF) en reemplazo de José Sbatella, quién presentó su renuncia el viernes pasado. Federici tiene 42 años y actualmente se desempeña como abogado dentro del departamento jurídico del Fondo Monetario Internacional (FMI).
En 2010, el nombre de Federici se difundió en algunos medios por haber figurado como fuente de la embajada norteamericana para desprestigiar al gobierno de Cristina Kirchner a nivel internacional. El dato es revelado por los cables filtrados por Wikileaks en ese mismo año.
Entre 2007 y 2010, los cables revelan que Federici era la fuente más preciada para el gobierno norteamericano en materia económica, divulgando a Econoff (asuntos económicos de la embajada) información no del todo chequeada. El valor era notable, incluso, al citarlo la embajadora Vilma Martínez coloca entre paréntesis la palabra “proteger” a modo de que se tenga en cuenta la confidencialidad de la fuente. Algo similar sucedió con Martín Redrado cuando en 2007 la embajada solicitó que se proteja “estrictamente” su identidad por ser un informante privilegiado de la embajada.
El cable de diciembre de 2009, menciona al fiscal Raúl Pleé como el encargado de investigar los delitos financieros y detalla que el gobierno no se esmeraba en “perseguir el lavado como un delito grave”. Desde la embajada norteamericana, vuelven a citar a Federici y dicen que el mismo se “lamenta” porque “la oficina de Pleé no recibe el apoyo político que necesita para hacer su trabajo”.
Pleé fue denunciado en el año 2013 por el CELS y Memoria Activa por haber demorado la acusación contra los imputados por encubrimiento en el atentado a la AMIA. “Sin explicación (…) Pleé dejó de impulsar la causa y la Cámara se resistió a fijar audiencia hasta que quedó en evidencia”, expresaba el CELS en un comunicado. Antes de esto, fue relator de la Cámara del Crimen de la Capital Federal durante la última dictadura militar. Ya en el gobierno de Raúl Alfonsín, fue denunciado por organismos de derechos humanos por haber aceptado evidencias y testimonios de militantes torturados por militares en la causa de intento de copamiento del cuartel de La Tablada.
En el año 2007, Pleé fue acusado por obstaculizar avances en causas por delitos de lesa humanidad. Durante este año, cobró notoriedad junto a otros fiscales al convocar por la marcha de 18F en memoria del fiscal Alberto Nisman.
En ese mismo año, el embajador Anthony Wayne seguía en detalle el proyecto de ley contra el terrorismo financiero impulsado desde El Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) que buscaba imponerse en el congreso. Para conocer los detalles, desde la embajada recurrieron nuevamente a Federici quién no tenía pronósticos alentadores respecto al proyecto ya que “según sus fuentes en el gobierno argentino y el senado” Néstor Kirchner estaba preocupado por las elecciones de ese año y por posibles declaraciones del ex presidente en contra del GAFI.
En el último cable del año 2010, la embajadora Martínez critica la designación de Sbatella ante la UIF y lo califica como “un enemigo jurado del Grupo Clarín”. Este último cable, relata una historia respecto a lo que posiblemente podría haber ocurrido (siempre en palabras de Federici) ante la renuncia de Rosa Falduto quién se desempeñaba como titular antes de Sbatella. Según la versión de Federici “Alak llamó a Falduto y supuestamente le dijo que encontrara algo contra Clarín, específicamente sobre Magnetto”. El cable menciona en cada línea la aclaración de que siempre están tomando el testimonio de Federici para reconstruir una historia que no resulta del todo clara y que está plagada de supuestos.
En la redacción de ese mismo cable, se sigue solicitando la confidencialidad de la fuente de Federici, dato que tomaron en cuenta medios como Clarín y La Nación cuando en 2010 se filtraron los cables de Wikileaks. En un titular enorme, La Nación decía “Estados Unidos expuso sospechas sobre manejos financieros de los Kirchner”, sin mencionar a Federici en ninguna parte de la nota, tomando la información como proveniente de Estados Unidos cuando en realidad la fuente se encontraba en Argentina y no tenía datos concretos.
Federici no solo se limita a la asesoría a nivel nacional, también cumplió tareas de asesor a nivel regional para América Latina y el Caribe, siempre de la mano de los planes norteamericanos con los países del sur. También, formó parte de Sullivan-Cromwell como asociado extranjero, una firma de New York con negociados empresariales cercanos a Wall Street, magnates como Rockefeller y entidades como JP Morgan. Todo un valor a tener en cuenta.