"Va a pasar lo que ustedes quieran que pase"
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner cerró esta noche con un discurso por cadena nacional, en el palco levantado frente a la Casa Rosada, la celebración de la Semana de Mayo, oportunidad en que, ante una multitud, señaló su convicción de que el 10 de diciembre próximo, “cuando puedan decidir libremente el rumbo que va a tomar la patria, no tengo ninguna duda que seguirá siendo el rumbo del cambio y la transformación que hemos venido realizando en estos doce años de gobierno”.
“Lo más importante de todo –afirmó- es que hemos construido otra vez la patria, que tenemos patria y estamos orgullosos de ella, y no tengan miedo porque va a pasar lo que ustedes quieran, porque ustedes son los que están empoderados, ustedes son los titulares de los derechos”.
La Presidenta, acompañada de todo su gabinete, funcionarios y dirigentes de organizaciones sociales, en el palco levantado frente a la sede gubernamental, aseguró que “mientras sea presidenta voy a seguir defendiendo los intereses del país”.
Recordó que en los primeros años de la administración de Néstor Kirchner “las crónicas decían que era todo un veranito” pero subrayó que “vamos por doce veranos en la Argentina, y queremos también el verano número 13”.
“Este –advirtió- es un proyecto colectivo, no depende de una sola persona, depende de ustedes para que sea profundizado y llevado adelante”.
Afirmó que cree “sinceramente que hemos forjado una nueva identidad democrática, porque ya no es solo democrático porque haya acuerdo para elecciones libres, no solo porque pensamos que es bueno redistribuir el ingreso y la gente tenga buena calidad de vida: los derechos humanos se han incorporado definitivamente a esta nueva identidad democrática que nadie puede negar que ya forma parte de nuestra identidad constitutiva”.
Tras enumerar los logros de los últimos 12 años, la Presidenta dijo que “no ha sido fácil porque no nos lo han hecho fácil; no me quejo, porque cuando venís a cambiar el status quo y a cambiar a favor de las grandes mayorías, no esperes caricias, aplausos, sino palos, difamaciones, mentiras y calumnias”.
Advirtió a quienes tienen “legítimas aspiraciones de conducir el país, las provincias, los municipios, que siempre piensen que va a ser difícil cuando intenten defender los intereses de las mayorías”.
“Estos proyectos –afirmó- requieren de tiempo, esto no es ambición de poder, al contrario, quieren hacerle crreer a la gente que es bueno que cada cuatro años cambie todo, porque entonces todo sigue igual, y por eso, este proceso de transformación de doce años debe ser profundizado, debe continuar, y no es continuidad o cambio, por Dios, y los que quieren el cambio que nos expliquen a todos los argentinos qué cambio quieren”.
La Presidenta pidió a sus seguidores que “no vivan este 25 de mayo”, el último de su gestión, “con tristeza ni nostalgia, sino con alegría, porque van a venir muchos 25 de mayo más en que el pueblo se volcará a la plaza, en que el pueblo estará feliz y en el que todos podremos, más allád e las diferencias, reconocer que por sobre todas las cosas somos argentinos”.
Cristina recordó cuando asumió Néstor Kirchner, al cumplirse hoy exactamente 12 años de aquel acontecimiento, y afirmó que "los dirigentes seremos juzgados por nuestras conductas, nuestras acciones, nuestra eficiencia, pero fundamentalmente por los resultados de la política que aplicamos en el país".
"Dios sabe que lo que a él le sobraba era coraje, voluntad y decisiónpara levantar la autoestima de un pueblo que había sido humillado y pisoteado, y lo hizo dejando cachos de su vida en el camino también".
Recordó cuando habló en la Cumbre de las Américas para defender a Latinoamérica y agregó: "Quisiera ver cuántos presidentes se plantan como se plantó él en aquel 2005 en Mar del Plata" para "decir que en la integración regional, y no en la subordinación, estaba el futuro".
"Contra todos los pronósticos él también se plantó contra el default", evocó, para señalar que "se plantó y obtuvo la reestructuración de deuda soberana más importante de la historia del mundo".
Acotó que sólo una mínima porción de acreedores no ingresó a las múltiples reestructuraciones de deuda por lo que "quedaron aleteando muchos buitres, más bien algunos pocos poderosos que manejan medios de comunicación y organismos no gubernamentales que proliferan por todos lados y uno nunca sabe de dónde sacan los fondos aunque lo imaginan!.
Esos fondos buitres, alertó, "atacan al país y decían que ibamos a arreglar porque decían que tenían secretos que iban a revelar" y entonces la Presidenta pidió que "no tengan miedo, pueden difamar a mi hija, maltratar a mi hijo, decir de mí cualquier cosa, pero quédense tranquilos que mientras sea presidenta voy a seguir defendiendo los intereses del país y proponiendo pagar a todos los acreedores de manera justa, equitativa e igualitaria".
"No tengo nada de qué avergonzarme -agregó- no tengo ninguna cuenta en el exterior que me puedan descubrir: le descubrieron a otros miles de cuentas y sin embargo no salieron ni informes, ni investigaciones ni programas".
Por otra parte señaló su esperanza de que "a partir del 10 de diciembre los mismos dirigentes sindicales pongan la misma fuerza y enjundia para obtener todos los aumentos y beneficios que los trabajadores han logrado en estos doce años".
"Espero" que esos sindicalistas "sigan pidiendo y luchando como lo hicieron en la gestión de Néstor y en la mía, porque si no lo hacen, voy a decir a los trabajadores que cambien de dirigentes, para que sigan teniendo los mismos derechos, los mismos beneficios que hemos tenido en estos años".
Mencionó su emoción al haber asistido hoy al Tedeum en la Basílica de Nuestra Señora de Luján, cuya reconstrucción fue el primer llamado a licitación que hizo Néstor Kirchner. Dijo que en el año 2003 la Cruz Mayor de la Basílica había caído y literalmente "quedó clavada en la tierra" y afirmó:"Muchas cruces más encontramos y una por una las fuimos levantando y colocando en su lugar".
Señaló también su orgullo por la inauguración del Centro Cultural Kirchner "que a algunos parece que les molesta que lleve el nombre del ex presidente, aprobado por el Parlamento Argentino" y se preguntó "por qué no hacemos una cosa: si les molesta, por qué no hacen uno mejor y más grande y le ponen el nombre que quieran".
"En estos doce años -agregó- hemos ido derrumbando una por una las mentiras, los mitos, que decían que si los trabajadores ganaban bien no iba a haber inversiones, o que no se podían hacer más universidades o que no se podía apartar de lo que decía el Fondo Monetario Internacional, y miren lo que está pasando en Europa y en el mundo".
Afirmó que "hay un mundo nuevo, hay actores nuevos, hay realidades diferentes" y que "no tiramos de ningún carro, porque nos queremos subir al carro para conducirlo nosotros, los argentinos, y este es el empoderamiento de este pueblo, el haber derribado los mitos".
"La gente no vota para atrás, vota para adelante, para el futuro, para mejorar", sostuvo para declarar que "tengo mucha fe en Dios y en el pueblo y quiero agradecerles a todos y cada uno de los argentinos, a los que me quieren y me votaron y a los que no me quieren como ustedes ".
Afirmó que quiere darle "las gracias a los 40 millones de argentinosporque yo se que aún en el fondo, en un pedacito, saben que las cosas que hicimos, las decisiones políticas que tomamos, eran las más importantes para todos, y todos, con una mano en el corazón, piensen cómo estaban en mayo del 2003 y les pido a todos los argentinos que se pongan la mano en el corazón y piensen si están un poco mejor que en el 2003 o están peor".
Fuente: Télam, Prensa Argentina, producción propia.