Montagne y el intercambio de favores con Macri

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Montagne y el intercambio de favores con Macri

13 Noviembre 2015

Por Boris Katunaric

APU: ¿Qué está sucediendo en la empresa Montagne?

Ariel Velázquez: Tenemos una situación que viene arrastrándose hace algunos meses. Hemos citado al ministerio de Trabajo. En concreto tiene que ver con algunos aspectos pertinentes a la seguridad e higiene en los lugares de trabajo, sobre todo en la cuestión edilicia. También hay otro tema que es una quita de salarios que, aunque suene raro, la empresa lo ha hecho y están vinculadas a los estándares de producción.

La producción no está contemplada en las leyes de trabajo y en nuestro convenio tampoco. Cuando la empresa pide producción lo que se hace es hacer un acuerdo de partes donde se establecen parámetros de producción para que los compañeros tengan un rédito económico por el esfuerzo extra.

Lo que hizo la empresa es levantar esos etándares de manera arbitraria para que los compañeros no puedan alcanzar esa cantidad de producción y que en este caso, implica una baja en el salario de los compañeros bajo estos premios por producción. Esto, en algunos casos, implica entre $3000 y $4000 pesos mensuales de rebaja del salario mensual. Lo que hay que tener en cuenta es que eso, como no está contemplado en ningún lado y es un acuerdo de parte que la empresa rompió.

APU: ¿Y en cuanto a la cuestión que mencionaba antes?

AV: La empresa ha puesto en riesgo a varios compañeros. Hace un tiempo se cayó un pedazo de techo, casi le pega a un delegado en la cabeza. Todo está denunciado en el Ministerio de Trabajo.

Por otro lado, algo que nos parece muy grave, que tiene que ver con que los miembros de la comisión directiva dentro de la empresa. Los delegados están siendo perseguidos, amenazados y sancionados. Además está creando una especie de colectivo de trabajadores para generar divisiones dentro del sindicato.

APU: Divide y reinarás.

AV: Exacto. Nuestro sindicato tiene 70 años de vida, tiene personería gremial y un grupo de personas que se identifican como Sindicato de Trabajadores de Montaigne, apoyados por la empresa, salen a caminar diciendo que el que para o toma una medida la empresa los va a echar. Lo que nos llama la atención es que, respecto a las cuestiones de seguridad dentro del ambiente de trabajo, la empresa dice que cuatro veces por año recibe inspecciones del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Nosotros tenemos pruebas de que eso es imposible de que eso suceda, tenemos filmaciones de los compañeros de la situación en la que estamos donde puede llegar a ser algo trágico. Además, la empresa, viene bajando línea y generando propaganda escrita con la consigna “si querés seguir trabajando votalo a Mauricio”

APU: Entonces, ¿se estarían intercambiando favores? ¿Mientras uno hace campaña el otro le reduce las inspecciones?

APU: Seguramente. Nuestro sindicato ha tenido una posición tomada junto con lo que implica esta fábrica respecto al trabajo que se genera afuera, esta empresa estuvo vinculada al caso de Cheeky, Montagne fue una de las denunciadas.

Tenemos una posición del trabajo precarizado, a veces se entiende que la precarización se da en los talleres clandestinos. También en las fábricas que tienen todo en regla también aparecen rasgos de precarización. Es parte de una lógica empresarial que le ha hecho mucho daño al país. Para nosotros una quita de salario es un ajuste.

APU: ¿Tomaron alguna medida por esta campaña que está haciendo la empresa por el macrismo?

AV: Hemos tenido las audiencias que nos brinda el Ministerio de Trabajo, nos sentamos con la empresa, le hemos puesto a disposición la estructura del sindicato desde el punto de vista militante, profesional, de recursos, para resolverlo. La empresa no quiso, denunciamos estas situaciones en el Ministerio, consta en las actas. Los abogados nuestros están avanzando en el plano legal porque, en lo de las cuestiones edilicias, la empresa dice que no pasó nada, entonces la respuesta obvia a eso es que nosotros no vamos a esperar que pase algo. Hicimos una actividad hace unos días, no un corte, pero sí una toma de la entrada de la fábrica bajo una protesta, los compañeros dentro de la fábrica pararon denunciando esta complicidad, porque esto es una situación de parte del empresariado argentino con el Gobierno de la Ciudad.