Bebe Kamin: "La burbuja en que se convirtieron los conciertos del Luna Park de Sui Generis, hizo que pareciera que no estábamos en la Argentina de 1975"
La Palabra Justa Rock - Radio Caput
Agencia Paco Urondo - APU
Episodio 32
14 de noviembre de 2025
En La Palabra Justa Rock, el programa de Agencia Paco Urondo que se emite semanalmente por Radio Caput. Lucia Buono y Mariano Nieva dialogaron con Bebe Kamin, director de Adiós Sui Géneris, película estrenada en 1975 que muestra los últimos conciertos del mítico dúo integrado por Charly García y Nito Mestre.
Adiós Sui Generis
"Todavía no pude ver la película restaurada, así que estoy muy ansioso por hacerlo. Esto lo tomo como una especie de milagro porque no debe haber muchas películas que después de 50 años renazcan y se coloquen en las salas para que la gente la vea. Lo que pasa es que esta película en particular tiene una condición bastante singular y es que quienes estuvieron en el Luna Park quedaron sellados por el fenómeno. Hubo una función especial en el Bafici de este año en el Cine Gaumont en la que se proyectó una copia que tengo de 35 milímetros, y ahí pude constatar que entre el público estaban aquellos que vivieron el recital y los hijos y los nietos de aquella generación. Luego, de ese material se hizo un proceso de mejora de la imagen y del sonido que fue lo más logrado a pesar de que no se aprovechó lo que actualmente conocemos como sistema de audio 5.1 Lo que si se aprovechó muy bien fue el rango dinámico es decir, ir desde lo más fuerte a lo más bajo dentro de la banda sonora. Hubo por detrás una productora que desconozco cual es, que se puso en contacto con los hijos de Torre Nilsson y de esa negociación salió esta nueva versión de 'Adiós Sui Generis'. Por lo tanto, creo que la película es parte de la herencia cultural y del momento histórico en el que vivíamos. Así que me alegra y me emociona mucho que un trabajo que hicimos hace tanto tiempo vuelva a estar presente en las pantallas".
Charly y Nito
"Tuve vínculos esporádicos con Charly García y Nito Mestre porque cada uno siempre estuvo en lo suyo. Sí nos cruzamos en diversos momentos con mucha amabilidad y humor porque somos como hermanos de obra. Siempre estoy con ganas de verlos porque tuve la suerte de poder compartir con ellos un trabajo tan importante. Estoy hablando de un prócer como Charly y de un notable vocalista y músico como es Nito por lo cual agradezco el momento en que decidí hacer cine".
La filmación
"Al principio no hubo resistencia por parte de Leopoldo Torre Nilsson sino que la hubo al final. La película en realidad fue una idea original de Jorge Álvarez un editor muy importante, representante de grupos de rock y organizador de conciertos. Él fue quien los convenció a Nito y a Charly para que hagan un concierto despedida en el Luna Park que él mismo se encargaría de conseguir. Lo que realmente pasó es que puso en venta las entradas para el concierto y se vendieron todas en una hora, entonces pensó que por ahí cabria hacer otra función el mismo día. Cuando se puso en venta el segundo turno y también se agotó inmediatamente, Jorge pensó algo pasa acá. Por eso, en una parte de la película Charly le pide a los chicos que por favor desalojen la sala porque afuera hay mucha gente esperando para ingresar. En ese momento Sui Generis era conocido relativamente, si tenía un público bastante adicto pero no numeroso, entonces Álvarez lo fue a ver a Torre Nilsson, 'Babsy' como lo llamábamos, y le dijo: algo pasa acá, pusimos en venta las entradas y quedó mucha gente afuera, por eso creo que valdría la pena hacer algún tipo de registro de los recitales, un documental por ejemplo. Yo en ese momento trabajaba con Leopoldo siendo el sonidista de sus películas, además ya había dirigido El Búho (1975) mi ópera prima, muy experimental que él había visto. Entonces con esa experiencia le pareció que cumplía con los requisitos para encargarme de la filmación, entonces reunió al equipo para avisarles que íbamos a rodar una película en una jornada y que la iba a dirigir Bebe Kamin. Yo me enteré ahí mismo, en la reunión a la que me habían convocado sin haberme adelantado nada. En ese sentido tengo que decir que el equipo de trabajo de Nilsson era muy profesional aunque llevé mi gente también, especialmente sonidistas.
Cuando terminamos la filmación un poco accidentada por varios motivos, empecé a armar un poco la película y me dí cuenta que no llegaba a cumplir con el objetivo de hacer un largometraje porque en Argentina tiene una duración de 60 minutos o más. Por lo cual hablé con Babsy y le dije que necesitaba que me diera un tiempo más para el rodaje. Finalmente aceptó y me dio tres días de filmación, Torre Nilsson quien para mi es como un padre cinematográfico, tuvo muchos hijos en la dirección como Leonardo Favio, Mario Sábato y Eduardo Calcagno quienes empezaron a hacer cine gracias a él porque siempre nos empujó para adelante.
En esos tres días que tenía para filmar grabamos todas esas escenas que se ven y que no son parte del Luna Park. Por ejemplo, 'Nena' que se filmó en un estudio de grabación con Norma y Mimi Pons, la parte en que Nito corre por el césped y nada en una pileta y 'Mr Jones, o pequeña semblanza de una familia tipo americana' que incluye esa cena con los cuatro personajes delirantes que son los músicos de la banda que se hizo en un estudio cinematográfico con maquillaje y vestuario".
Contexto
"Yo tenía una edad cuando se filmó la película que no era la de los adictos a Sui Generis, era un poco más grande. Lo que pasó fue que me puse inmediatamente en contacto con la música, entendí la onda y me encantó haberlos escuchado. Tenían un punto de contacto con la corriente folk norteamericana de cierta atmósfera y características íntimas, pero también las letras tenían su poesía. Después empecé a pensar que hacer porque lo lógico hubiera sido poner cámaras, filmar al grupo y montar las canciones pero no me convencía, entonces concluí que lo más interesante era la relación que se establecía entre el artista y el público. Por eso, planifiqué una filmación donde ciertos temas estén focalizados en el grupo y otros no porque las cámaras estarían dispuestas para que registren a la gente. Recuerdo que las canciones de Sui Generis las cantaban todos quienes estaban adheridos a esa onda no solo musical, porque hay que tener en cuenta que el momento que se estaba viviendo era pésimo, una época donde reinaba la AAA (Alianza Anticomunista Argentina) preanunciando el golpe militar del '76. Y uno de los tantos sectores castigados por aquellos tiempos más allá de sindicalistas y políticos fueron la gente joven quieres eran reprimidos sin motivos. Iban caminado por la calle y los paraban los 'falcon verde' que eran los reyes de la calle que iban con gente armada hasta con ametralladoras. En ese contexto el Luna Park se terminó convirtiendo en una burbuja donde reinó todo lo contrario, la alegría, el baile, los gritos y la participación. Es como que de repente no estábamos en la Argentina de 1975. Sino en el lugar donde siempre hubiéramos querido estar, y eso le dio una energía a todo, inclusive al equipo técnico. La gente estaba entregada al clima de traer de vuelta la vida en vez de estar pendiente de la muerte".
Raymundo Gleyzer
"Yo fui amigo de Raymundo Gleyzer. En mi primera película antes mencionada que se llamó 'El Buho', la cámara la dirigió Raymundo a quien ya conocía de antes y que además fue uno de los primeros desaparecidos por la ultima dictadura el 27 de mayo de 1976. Gleyzer fue militante del PRT (Partido Revolucionario de los Trabajadores), gran camarógrafo y referente de un montón de gente que estaba relacionada con el cine y la política. Quizás, él representaba a un sector digámosle pensante por lo cual significaba alguien muy peligroso para el enemigo. Un tipo muy cálido, gran padre de su pequeño hijo Diego, muy solidario con todos aquellos que estaban atravesando alguna situación difícil y con antecedentes importantes en cuanto a la filmación. Había realizado la película 'México, la revolución congelada' (1971) en un momento de aquel país donde mostrar este tipo de cosas representaba un verdadero riesgo. Raymundo además, fue cameraman de canal 11 y corresponsal en las Islas Malvinas, haciendo un trabajo de investigación audiovisual filmando los paisajes y sus habitantes con sus costumbres. También viajó acompañando por el interior del país a los antropólogos y fue también muy amigo del documentalista etnográfico Jorge Prelorán. Por eso, cuando aparece el nombre de Raymundo Gleyzer tengo que hacer el esfuerzo por no sentirme impotente en cuanto a su destino tan injusto".
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