"Frigerio le sacó la careta a Barañao, y ahora está claro que la Ciencia no es prioridad para este Gobierno"
Siguen los ecos por el caso Marina Simian, la investigadora del CONICET en la Universidad de San Martín que participó de un programa de Tv en busca de lograr financiamiento a su proyecto de investigación.
En Radio 10, opinó el legislador nacional y ex titular del CONICET Roberto Salvarezza, y apuntó contra el recorte presupuestario en ciencia y tecnología aplicado por Cambiemos.
“Lo que todos sentimos ayer fue indignación y vergüenza, porque en muchos lugares del mundo deben estar preguntándose qué país somos que damos el contraejemplo, cuando EEUU, Alemania, Francia o España incrementan su presupuesto de tecnología para retener a sus investigadores y crear conocimiento, en nuestro país los científicos tienen que ir a programas de televisión para conseguir fondos para combatir el cáncer como el caso de la científica”, dijo.
Luego apuntó contra dos importantes funcionarios del gabinete de Macri: “Frigerio dijo con mucha claridad que la ciencia no es prioridad para este gobierno” y termina con una polémica de que no había ajuste, de que todo iba a ser igual. Bueno, Frigerio le sacó la careta a Barañao y a los que pregonan que todo está bien en el sistema científico argentino”.
“Cuando uno discute prioridades también tiene que discutir qué cosas no son prioritarias para el país, porque nosotros tenemos que hacer un esfuerzo para dejar de vivir de prestado”, había dicho al respecto el ministro del Interior Rogelio Frigerio en declaraciones radiales.
“Creo que es una buena discusión que nos debemos los argentinos: saber en qué cosas tenemos que invertir, debatir qué cosas dejan de ser prioridad”, había justificado Frigerio.
“Yo le recordaría a Frigerio que debe cultivarse un poco y ver qué hacen el resto de los países para ser más competitivos en el mundo. Con la destrucción de las políticas estatales de ciencia y tecnología no podemos tener una economía del conocimiento”, dijo Salvarezza en Radio 10.
Agregó que en 2015 “invertíamos 0,65% de un PBI de US$600.000 millones en Ciencia y Tecnología, y en 2003 era de 0,43% con un PBI mucho menor. Hoy estamos invirtiendo el 0,5% de un PBI de US$500.000 millones y eso significa directamente US$800 millones menos. El impacto es brutal”.