Abandonar la seguridad para poder crecer
Foto: Julio Gutierrez
Luego de Canciones para amansar fantasmas (2015 | Edición independiente) y su disco en vivo del 2017, el cantautor tucumano Martín García regresa para presentarnos su tercera obra: Mutar.
Se trata de una propuesta discográfica con temas propios y variados en sus ritmos y climas. Es un trabajo muy inspirado y luminoso, tanto en la composición de las letras como de la música.
En las palabras de su autor, este disco “es el punto de partida de una nueva etapa, tanto a nivel compositivo como personal. La búsqueda de una voz y un sonido propios que inician su recorrido en las últimas canciones que nacieron para integrar este material. Todos estos cambios, me llevaron a pensar en la chicharra (en el norte se llama coyuyo), que es un bicho cantor y resiliente que abandona la seguridad de su exoesqueleto para poder crecer. Efectúa para ello una muda desde la estructura rígida hacia los sueños, muta desde los mandatos hacia la poca certeza de ser él mismo, a pesar del miedo. Esto es lo que representa Mutar”.
Acompañan a Martín García en este nuevo disco Francisco García Posse en guitarras acústicas, guitalele y secuencias; Cristian Tejera en baterías; Carlos Andujar en percusión y guitarra eléctrica en el tema “Guitarra”; Mario Corronca en Bajo en el mismo tema; Emilio Díaz en guitarras en las composiciones “Escribiré la Noche” y “Decí Más”; Aldo Parellón en baterías en “Escribiré la Noche” y “Decí Más” mientras Víctor Juárez acompaña con su bandoneón en “La Gota”.
Fue grabado y mezclado en Vintronix Music por Francisco García Posse y Cristian Tejera.
“Informe del Tiempo”, es el puntapié inicial del disco, habla de los estados de ánimo como estados del tiempo, al estilo de alguna canción de U2, va marcando el paisaje de un día que arranca gris pero en el que finalmente sale el sol.
De este estadío pasa a unas “Nanas” que le cuentan a una nena que no se duerme como se viene de dura la realidad del mundo y continúa con esta temática global en “Yo Mejor Me voy”.
Entramos en una parte más romántica del álbum con “Entonces te cuento”, que es una balada clásica, y “Escribiré la noche”, un aire de bolero en donde se respira Latinoamérica.
“Decí más” es una especie de tumbao que está escrito en octosílabos con la métrica de las décimas.
Una partícula de agua comienza a hablarle al compositor y a dictarle un tango en “La Gota”.
“Avioncito” es una especie de bossa nova electrónica, en la cual se relata el viaje de un aeronave de papel en un aula.
“Viaja liviana de equipaje, sin peso en el corazón…”, dicen los primeros versos de “Volar”, una verdadera canción de carretera, para ir escuchando en los auriculares durante un viaje.
Cierra el disco una zamba argentina en homenaje al instrumento fuente de tantas alegrías: “Guitarra”.