Salvapantallas libera SMS: cambiar de piel es renacer
Por Leandro Suarez
Es difícil encontrarse a uno mismo y cuando ese milagro identitario sucede, es aún más difícil saber cuándo aquello que uno encontró deja de ser lo que representa más fielmente nuestra esencia.
Salvapantallas se había constituido como el dúo acústico cordobés que podía producir e interpretar canciones emblemáticas del rock nacional a veces hasta mejor que los compositores originales, aun así, esto no condicionó la búsqueda estética que ellos emprendieron a la hora de elaborar su primer álbum.
Nunca se puede dar por sentado al pop argentino, la dinámica interna de esta corriente sonora se renueva año a año, una idea de reinvención que probablemente provenga de un legado que grupos como Virus o Babasonicos han diseminado en las bandas subsiguientes. Zoe Gotusso y Santiago Celli con la producción del artista coprovinciano Juan Ingaramo, lograron sumergirnos en una marea de secuencias electrónicas y beats, tejiendo una trama de texturas desnudas, elegidas con precisión y con la sensibilidad de un constructor de barcos dentro de una botella de vidrio.
A veces da la sensación de que Indie es sólo un nombre que le damos a los fenómenos que suceden en el espacio temporal contemporáneo que habitamos, esto deja de ser así cuando realmente escuchamos un material que nos descoloca profundamente, tal es el caso de artistas como Juana Molina, Lisandro Aristimuño o LOUTA, con Salvapantallas y SMS nos pasa lo mismo, con su nuevo álbum supieron plantar en la escena nacional un sonido nuevo, un conjunto de sonoridades que nos llevan hacia otro lugar, que no repiten una formula preestablecida.
La voz de Zoe cada vez atraviesa con más delicadeza las capas de nuestros oídos y se entrelaza con sutileza entre los distintos arreglos rítmicos, guiándonos con una melodía que a veces es duplicada por debajo por la voz de Santi, en una comunión tímbrica que parece haber compartido el mismo hogar desde siempre.
El balance de lo nuevo de Salvapantallas es sumamente positivo y consiste en una apertura hacia un nuevo espectro de sonoridades donde todavía es mucho el terreno por explorar. Es clave que la emergente ola pop argentina se nutra de diversas búsquedas para así poder expandirse en estéticas que cambien los parámetros preestablecidos del mainstream que nos invade día a día; podríamos decir que el dúo cordobés cumplió su parte y con creces.