Las mentiras y engaños de Macri sobre ARSAT y la privatización

Por Trabajadores de ARSAT

En una entrevista que concedió a Radio Seis de Bariloche, Macri se refirió al informe de C5N sobre el acuerdo firmado entre ARSAT y la empresa norteamericana Hughes para crear una nueva empresa que brinde servicios de banda ancha satelital sobre ARSAT-3.

Este acuerdo, develado por la investigación periodística del Programa Economía Política, indignó profundamente a la sociedad y generó una muy fuerte reacción de rechazo por intentar entregar a escondidas al capital privado extranjero (una privatización, quién puede dudarlo) parte de la soberanía satelital de todos los argentinos desconociendo las leyes vigentes.

Las declaraciones de Macri, además de confirmar el intento de privatización, sorprendieron por estar plagadas de mentiras. A continuación le respondemos a Macri cada una de sus mentiras y engaños:

“Alianza Estratégica con Hughes basada en nuestra capacidad tecnológica”. No fue magia, Macri, las capacidades tecnológicas se lograron luego de que se creara ARSAT por Ley en el año 2006 mediante un proyecto que envió al Congreso Néstor Kirchner. La ley de creación de ARSAT establece que los satélites que la empresa opere tienen que estar diseñados y fabricados en Argentina. ¿Dirá lo mismo el estatuto de Newco?

“..lo que encontramos cuando llegamos fueron serios problemas de comercialización en ARSAT-1 y ARSAT-2”. Falso Macri, ARSAT-1 estaba a fines de 2015 completamente comercializado y ARSAT-2 -que fue lanzado ese mismo año y colocado en una posición orbital que no estaba siendo explotada, es decir, que no había previamente un satélites brindando servicios- tenía una ocupación del 30% de su capacidad con un plan para llegar al 100% en los siguientes 3 años (estos satélites tienen una vida útil de 15 años). Esto, además, es habitual a nivel internacional:

“No queremos repetir esta experiencia de lanzar un satélite que está vacío”. Lo que no queremos repetir es una privatización vergonzosa para el interés nacional. Ni que un privado extranjero ponga en riesgo las posiciones orbitales asignadas a nuestro país, como ya pasó con Nahuelsat. Además, que el propio Presidente de la Nación hable de esta forma del operador satelital nacional del Estado, nos hace quedar mal en el mundo. Por favor, desistan de seguir menospreciando y difamando la empresa que tienen temporalmente a su cargo.

“Eso cuesta miles de millones de pesos a todos los argentinos que necesitamos para hacer cloacas, agua potable en barrios carenciados, construir rutas”. Son todas obras que hacen las empresas de Macri, o las de su primo. Cloacas le había contratado Rousselot en Morón y nunca las hizo. ¿Se acuerda?

“Hay que combinar la capacidad tecnológica de INVAP, los desarrollos que ha hecho ARSAT con un socio estratégico (…) lo que llamo la inserción inteligente de Argentina en el mundo” Vender capacidad satelital en Estados Unidos es insertarse de forma inteligente en el mundo. Lo cual podemos hacer ahora gracias a que tenemos una empresa y un satélite que puede dar servicios ahí. El acuerdo con Hughes es más una forma de ser ensartados que insertados. Esa nueva empresa, ahora controlada por un privado norteamericano compite contra la propia ARSAT.

“Que no se preocupen los muchachos de INVAP que van a seguir trabajando en esto, que lo han hecho muy bien y lo que estamos buscando es potenciar lo mejor”. El desarrollo satelital es una Política de Estado garantizada por la Ley 27.208 de Desarrollo de la Industria Satelital. Los trabajadores de INVAP y de todo el Sistema Científico y Tecnológico Nacional que participan en la industria satelital deben estar no sólo preocupados, sino indignados y escandalizados por este intento de privatización ilegal.

Periodista: ¿Usted dice que no están dando rentabilidad los otros dos satélites?

MM: “Lógico. Cuando nosotros llegamos había un satélite en órbita vacío. Los satélites se lanzan primero habiendo sido comercializados en gran parte, así es en todos los países. En los últimos años hemos hecho cosas raras, por decirlo de alguna manera. Centrales que las inauguramos y después no funcionan (…)”. Cuando ustedes llegaron había una empresa que protegió desde el año 2006 las posiciones orbitales asignadas a nuestro país facturando 750 millones de pesos por año con resultados operativos positivos desde su creación. Dos satélites diseñados y fabricados en el país exitosamente colocados en órbita, un centro de ensayos de primer nivel mundial para satélites geoestacionarios, un plan aprobado por Ley para ampliar la flota al menos 6 satélites en los próximos 20 años, exportar tecnología espacial y mejorar la competitividad de nuestra industria. No mientan más con lo de satélites vacíos, ya todos sabemos que lo estaban instalando para privatizar acusando al Estado de ineficiente.

“Queremos seguir potenciando ARSAT, lo estamos haciendo. Hemos hecho una labor muy importante en algo trascendental que es llevar fibra óptica al lugar más alejado del país”. La fibra óptica la desplegó Cristina Kirchner. Su gobierno, Macri, solamente le cambió el nombre al proyecto.

“Buscando socios en el Mundo para que usemos lo bueno nuestro y ellos nos complementen lo que nos falte. ¿Nosotros somos buenos para cosechar limones y ellos para hacer negocios con satélites? Fue electo Presidente de la Nación, por favor, un poco más de seriedad y de patriotismo en lo que dice. Ah, cierto, cuando asumió no juró por la Patria. Cambio el término por “honestidad”… bueno, con esto tampoco está siendo muy honesto.

Periodista: Aparentemente esto debería pasar por el Congreso de acuerdo al Artículo 8 de la Ley 27.208 porque además está en juego la cuestión de la órbita que corresponde a la Argentina.

“MM: No… no… no, lo tengo tan claro. Esto es un acuerdo estrictamente sobre un satélite que tiene un carácter más comercial que tecnológico”. Sí Macri, vas a tener que pasar por el Congreso. Se sancionó una ley para que no destruyan lo que pudimos lograr con tanto esfuerzo. Por si no nos crees, toma, leelo en Clarín.

No te moleste Macri, en ARSAT y en INVAP ya te conocemos. Decías que ARSAT no servía para nada. Como dijo K-cho Otheguy en 2014 “Curiosamente Macri, ¡el ingeniero!, parece ser el único en nuestro país que menosprecia los logros de la ciencia y la tecnología que nos han hecho avanzar en estos once años como nunca antes”. Desde que asumiste estamos todos preocupados y lo que hicieron hasta el momento sólo lo confirma.