"Tenemos una estructura demasiado dependiente de gas"
AGENCIA PACO URONDO: Queremos charlar con vos sobre el tema de hidrocarburos y sobre YPF ya que se generaron grandes expectativas a partir de la estatización de la empresa. ¿Cuáles son los movimientos y los cambios que se dieron y que valen la pena señalar?
Diego Mansilla: Lo que es YPF en la toma del poder real de la empresa, efectivamente lo que se puede ver es que no hay grandes cambios que uno note en el día a día. Esto era de esperar, una petrolera que hay que reconstruir, hay algunos pasos dados en este sentido. Uno puede ver y mencionar que YPF volvió a explorar, empezó a hacer algunos pozos para explotar.
Si uno compara lo que tenía proyectado Repsol con respecto al 2012 con los que terminó proyectando la nueva administración es un avance, sin dudas. Se está perforando, hubieron acercamientos interesantes a las universidades. Se empezó a pensar en volver a armar una estructura de ciencia y tecnología nacional para los hidrocarburos y una serie de puntos en ese sentido. Todavía no sólo es mucho lo que resta por hacer sino que son muchos los proyectos más que las cosas que hay para mostrar como hechos.
APU: Uno de los temas que siempre se piensan cuando aparecen los temas ligados a la cuestión hidrocarburífera tiene que ver con que el propio país se pueda sustentar con su propia producción a partir de lo que es un déficit en materia energética que significó una pérdida de divisas muy importante sobre todo el último año y el 2011 ¿Cuáles son las discusiones que se están dando? ¿Cómo ves esa situación?
DM: Fundamentalmente el mayor problema que tiene la pérdida del autoabastecimiento argentino es el tema del gas natural. Específicamente si le tenemos que poner un nombre y apellido es Loma de la Lata. Repsol en Loma de la Lata hizo un brual sacrificio de reserva y de extracción que nos corresponde a todos los argentinos; costará muchísimo recuperarla. Gracias a ese que fue el único mega yacimiento argentino destrozado por la empresa, Argentina tuvo que importar grandes cantidades de gas tanto a Bolivia como gas en barco.
APU: ¿Ese es el principal elemento de lo que se considera el déficit energético?
DM: Sí, únicamente lo que hizo Repsol en Loma de la lata. Obviamente la extracción de gas en otros lugares también está cayendo, viene cayendo todos los años. Sin embargo, todavía no importamos petróleo. Argentina exporta petróleo, hace poco subieron el límite por el cual las petroleras pagan, con lo cual se beneficiaron de una baja muy importante en las retenciones. Importamos algunos combustibles como Gasoil y Fueloil.
APU: ¿Cómo se hace para evitar esa importación?
CC: Lo más importante es volver a extraer gas, porque no hay nada más barato, más limpio y eficiente que el gas. Nosotros generamos una estructura demasiado dependiente de gas. Es el hidrocarburo más limpio y más abundante en Argentina, el problema es que la estructura de los 90 hizo que todo se corriera al gas y cortáramos cualquier otra fuente de generación de energía que no sea el gas. Lo poco que se hizo desde los 90 fue generar energía eléctrica por gas.
Ahora, cuando estamos con problemas la energía eléctrica no se puede cortar. La gran crisis energética de la que siempre se habla en realidad es la falta de energía eléctrica; un Gobierno no se sobrepasaría a un corte masivo de energía eléctrica. Si no hay gas, hay que quemar gasoil, fueloil. Hay que importar gas, algo hay que hacer. Por ejemplo quemar hidrocarburo. Argentina dejó de lado las energías alternativas, como pueden ser las grandes represas que hubo en Argentina. En Argentina se paró cualquier desarrollo de energías alternativas, eólicas, solar. Argentina fue pionera en lo que son los agrocombustibles con caña de azúcar, antes que Brasil. En un momento Argentina dejó de serlo, Brasil tomó la punta porque debía lograr su autoabastecimiento que recién lo lograron apenas hace un par de años, gracias a un avance muy importante al sacar nafta de las alconaftas de su caña de azúcar. Abandonamos todas las cosas que no fueran gas y ahora que el gas no es tan abundante estamos sufriendo.
APU: En relación a los combustibles no tradicionales ¿Cómo está el país? ¿Hay inversiones en ese sentido?
DM: Hay inversiones que está empezando a surgir, hidroeléctricas por ejemplo, se terminó Yacyretá, se están haciendo obras importantes como la del río Santa Cruz. Se está volviendo a lo que fue Atucha 2, igualmente no es tan relevante en lo que es energía eléctrica: en cuanto a central es de las más medianas tirando a chiquita, lo que sí tiene es otra carga de tecnología, otro tipo de carga. A Atucha 2 no hay que `pensarla como generación de energía eléctrica, porque si no no se entiende la plata que se gastó en generar tan pocos voltios.
Hay un cierto desarrollo de las energías eólicas, algo de energía solar, se están pensando algunos planes de quema de agrocombustibles. Falta muchísimo pero si uno mira todas estas pequeñas cosas que se fueron haciendo, fueron más que compensadas con la construcción de las grandes usinas para la quema de hidrocarburo que se construyeron hace pocos años en Buenos Aires y Santa Fe que pagamos con nuestras boletas. Justamente porque como no se puede cortar la luz, se hicieron dos grandes usinas termoeléctricas que son tan grandes quemando gas que generan más energía eléctrica que todas estas cosas por separadas.
APU: La matriz está como muy cargada sobre ese elemento.
DM: Exacto, la quema de hidrocarburos es muy eficiente, es muy rápida, en una central como esa que es muy grande se soluciona en muy poco tiempo algún problema de demanda que puedas tener. En un año ya está funcionando una central de 1000 megabatios, mientras que para hacer una represa son muchísimos años.
APU: Además me imagino que para abastecer mercados de consumo tan poderosos como los de Capital y Gran Buenos Aires y Santa Fe, deben ser necesarias inversiones eficaces en generar voltios.
DM: Claro, el tema es ese. Es necesaria la energía eléctrica hoy pero también tenemos que pensar en el mañana, en empezar a hacer las nuevas centrales. Hay que reconstruir todo el aparato científico tecnológico, es mucho lo que hay que hacer.
APU: ¿Y la discusión en torno al pozo de Vaca Muerta? Viste que hay muchas expectativas en algunos sectores, otros lo miran con cierta precaución. ¿Cuál es tu opinión?
DM: Con Vaca Muerta hay que tener mucho cuidado porque fue parte de una estrategia de marketing de Repsol porque si uno lee los diarios, Repsol llegó a anunciar tres veces el descubrimiento de Vaca Muerta, cuando en realidad esa reserva se conoce desde la época de la YPF estatal, no existe tal descubrimiento. Lo que hay es que EE.UU. está desarrollando una técnica que permite de manera económica extraer eso que ya se conocía pero que es muy difícil sacarlo.
El problema es que esa técnica es muy cara pero además es muy sucia, es muy contaminante, hay que tener muchísimo cuidado porque se está fracturando la tierra, mediante la introducción de químicos altamente corrosivos con un riesgo importante de contaminación de las napas de agua, sobre todo en una zona donde el agua es un bien escaso. Estados Unidos desarrolló mucho esta técnica pero también hay un gran problema de contaminación. Hay varios Estados que ya la prohibieron, Hay juicios por contaminación de los habitantes.
APU: ¿Qué se puede extraer de Vaca Muerta?
DM: El gas es el mismo que se extrae de cualquier otro pozo lo que pasa es que en este caso hay que hacer varios pozos, hay que fracturar lo que está debajo de la tierra, es como si fuese una piedra pomex y en los globitos hay petróleo, hay que romper todo eso para generar una laguna.
APU: El petróleo es igual que en cualquier otro pozo.
DM: Exactamente igual con la diferencia que necesitas muchos pozos para romper eso, tirar líquidos para empujar y comprimir todo ese petróleo; pero el petróleo y el gas es el mismo, sólo cambia la forma en que está en la piedra.
APU: ¿Coincidís con los que hablan de una reserva muy importante, incluso a nivel mundial?
DM: Podría ser una importante reserva, el problema es que los temas ambientales no hay que dejarlos de lado, es muy peligroso. Porque hay posibilidades de contaminar muy fuertemente el agua del lugar donde es un recurso escaso. También es importante ver que no sea una zona sísmica, hasta ahora no se han detectado terremotos producidos por esto pero sí contaminaciones de agua.