Caitlyn Jenner al descubierto: del autodescubrimiento a la felicidad
Por Agostina Gieco
Si en la actualidad todavía hay hostigamiento y burla, en la década del 60 era mucho más difícil ser trans. Esa fue la época que le tocó transitar a Caitlyn Jenner, la protagonista de uno de los episodios de la serie documental Al descubierto de Netflix, que recorre la vida de algunos/as deportistas y sus momentos más importantes. A los once años ya usaba vestidos y pintalabios de su madre. En su infancia descubrió que era buena en los deportes y decidió explotar ese talento: “Lo necesitaba porque era diferente. Nadie lo sabía, pero en mi interior yo era distinto”. Se creó el personaje de Bruce para sobrevivir. Practicó todo tipo de disciplinas: automovilismo, aviación, motociclismo, fútbol americano, y hasta deportes acuáticos.
Hoy en día, cada vez más celebridades transgenero deciden transicionar. Algunos ejemplos de ello son las hermanas Wachowski, directoras de Matrix y Elliot Page, protagonista de Juno. A medida que pasan los años, la sociedad avanza y más personas se animan a vivir con su género autopercibido, así como también se amplían sus derechos laborales e identitarios, entre otros. Sin embargo, en muchos países, las identidades trans siguen sufriendo persecución, acoso, agresión física y verbal, y distintos crímenes de odio hacia su persona.
Lo que condujo a Caitlyn a la fama fue el decatlón. En los Juegos Olímpicos de Montreal 1976 logró el primer puesto, superando el antiguo récord que había sido otorgado al ruso Nicolai Avilov. A partir de allí fue convocada para distintos comerciales de alimentos para niños/as, participó en películas, y pasó de ser una joven de un pueblo de Nueva York a obtener reconocimiento y firmar autógrafos en la calle.
A pesar de haber logrado la medalla dorada, “seguía siendo la misma persona con los mismos problemas”. A lo largo de los años, tuvo que lidiar con la disforia de no sentirse cómoda con su cuerpo. Una vez que realizó su transición, la prensa comenzó a acosarla tanto a ella como a su familia, sobre todo a las reconocidas hermanas Kardashian, hijas de su ex esposa, de las que se hizo cargo por 23 años. Hoy Caitlyn tiene 71 años, vive en una casa en Malibú y es candidata a gobernadora de California. Transita sus días siendo lo que siempre fue: una mujer trans.